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11 de julio - Clásicos de los siglos XIX y XX

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Lote 1 - VILHEM JACOB ROSENSTAND (Copenhague, 1838-1915). "Interior de una taberna". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Presenta algunas faltas en el marco dorado. Medidas: 60 x 48 cm; 85 x 72 cm (marco). En las escenas de género y de taberna Vilhem Rosenstand fue especialmente hábil, desarrollando un gran ingenio para la captación psicológica y antropológica. Así lo demuestra en esta escena de interior de taberna, en la que el crepitar del fuego del hogar confiere un ambiente cálido y acogedor. Dos individuos vestidos con trajes regionales, sus chaquetas adornadas con bordados sobre terciopelo negro y sus piernas enfundadas en amplios bombachos, tienen rostros parecidos con sus poblados bigotes pero muestran actitudes muy diferentes. Uno mira deslumbrado a la joven sentada en la mesa, mientras que su compañero mira la madera de la mesa. Ella lleva una piedra amatista en el pecho, y su busto queda realzado por el ajustado jersey. En la pared del fondo se anuncian conciertos locales en varios carteles. Vilhelm Jacob Rosenstand fue un pintor e ilustrador danés. Su obra más conocida es un mural que decora la sala de banquetes de la Universidad de Copenhague. Nacido en Copenhague, Rosenstand asistió a la Real Academia Danesa de Bellas Artes a partir de 1858 y recibió clases de su maestro Wilhelm Marstrand. También estudió en la escuela de Léon Bonnat en París (1881-82)[2] Expuso por primera vez en Charlottenborg en 1861 con Genrebillede fra Vendsyssel antes de servir como teniente en la Segunda Guerra de Schleswig en 1864. Sus experiencias bélicas se reflejan en obras como Fra Saxarmen ved Dannevirke. Morgen efter Bustrup-Fægtningen, por la que recibió el Premio Neuhausen (De Neuhausenske Præmier) en 1865. En 1869, becado por la Academia, viajó a Roma, donde pasó varios años. En la Exposición Universal de Viena de 1873 fue premiado por su obra En Campagnuol og hans Hustru. En Italia realizó varias obras de género, como Ved Kirkedøren (A la puerta de la iglesia, 1876), En Landsbyfrisør (El peluquero del pueblo, 1878) y Forlegenhed (La vergüenza, 1880). De Roma se trasladó a París en 1881, donde pintó obras de género que representaban escenas cotidianas, como Udenfor et Brasserie i Paris. Moder og Søn ved Pousse-Caféen (Fuera de una brasserie en París. Madre e hijo en el Café Pousse, 1882), por la que recibió la Medalla Thorvaldsen.

Valorac. 5 000 - 6 000 EUR

Lote 2 - FRANCISCO PRADILLA ORTIZ (Villanueva de Gállego, Zaragoza, 1848 - Madrid, 1921). "Los joyeros de la Plaza de San Marcos de Venecia, al atardecer", 1877. Óleo sobre cartón. Firmado en el ángulo inferior derecho. Firmado, fechado y titulado al dorso. Medidas: 17 x 27 cm; 36 x 46 cm (marco). Francisco Pradilla comienza su formación como aprendiz de Mariano Pescador, y en la Escuela de Bellas Artes de San Luis de Zaragoza. En 1868 continúa sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde es discípulo de Federico de Madrazo y Carlos de Haes. En 1874 ganó el Premio de Dibujo de la "Ilustración Española y Americana", y obtuvo una beca para estudiar en Roma, donde residió veintitrés años, hasta su nombramiento como director del Prado en 1897. En 1878 participó en la Exposición Nacional de Madrid y obtuvo la Medalla de Honor, la misma distinción que obtuvo ese mismo año en la Exposición Universal de París. A raíz de estos éxitos recibe numerosos encargos no sólo de España y Francia, sino también de América y otros países europeos. Viaja por toda España y se interesa por captar escenas costumbristas llenas de gracia y colorido. Sus obras formaron parte de exposiciones y concursos en ciudades de todo el mundo, como Londres, París, Berlín, Sao Paulo y Buenos Aires. Fue director de la Academia de España en Roma, y miembro de las Reales Academias de San Fernando y San Luis, de la Academia Francesa y de la Hispanic Society de Nueva York. Recibió, entre otras condecoraciones, la Cruz de Isabel la Católica y la Legión de Honor. La obra de Francisco Pradilla está presente en el Museo del Prado, los Museos de Bellas Artes de Bilbao, Buenos Aires, La Habana y São Paulo, el MACBA de Barcelona, la Christchurch Art Gallery de Nueva Zelanda y el Museo Romántico de Madrid, entre otros.

Valorac. 10 000 - 12 000 EUR

Lote 3 - CARLES NADAL FARRERAS (París, 1917 - Sitges, Barcelona, 1998). "Escena interior". 1975. Técnica mixta sobre papel. Firmado y fechado. Medidas: 31 x 44 cm; 52 x 67 cm (marco). Hijo de Santiago Nadal, pintor-decorador afincado en París, Carles Nadal vive desde niño en Barcelona, adonde se traslada la familia debido a una enfermedad del padre. A los trece años empieza a trabajar como aprendiz en un taller de pintura decorativa, y en 1936 recibe una beca del Ayuntamiento de Barcelona para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de Sant Jordi. Al estallar la Guerra Civil es reclutado por el ejército republicano, con el que combate en los frentes de Aragón y Tremp. A principios de 1939 cruza la frontera francesa y es internado en el campo de refugiados de Saint Cyprien, donde permanece varios meses. Consigue escapar y volver a cruzar la frontera, pero es detenido y encarcelado en Figueras. En libertad condicional regresa a Barcelona, donde prosigue su carrera artística al tiempo que trabaja como decorador y estudia Bellas Artes. En 1941 debuta en una exposición colectiva en la Galería Dalmau, obteniendo buenas críticas. Termina sus estudios con buenas calificaciones, obteniendo el reconocimiento de maestros y profesores, algunos de los cuales se convertirán en amigos y colaboradores del joven Nadal. De hecho, fue uno de ellos, Luis Muntané, quien le facilitó su primera exposición individual en 1944, en La Pinacoteca de Barcelona. Dos años más tarde se traslada a París, de nuevo becado por el Ayuntamiento de Barcelona. Allí trabaja y expone con el grupo Présence de l'Homme, además de participar en los Salones de Otoño. Más tarde, gracias a una beca del Estado francés, asiste a la Escuela de Bellas Artes de París. En 1948 se casa con Flore Joris, fijando su residencia en Bruselas, donde permanece hasta mediados de los años setenta. En Bélgica descubre, como él mismo afirma en repetidas ocasiones, la luz y el color. Durante estos años seguirá exponiendo en España y Bélgica, así como en Francia, Alemania, Holanda, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos. La pintura de Nadal es postimpresionista, intensamente colorista, y se basa en la búsqueda de la fuerza cromática como medio más directo de comunicación. Entre sus galardones destacan el Gran Premio de Spa, Bélgica, y su nombramiento como miembro de la Real Academia de Londres. Sus obras se encuentran en el MACBA, el Museo de Spa de Bélgica y el Museo Real de Bruselas.

Valorac. 2 000 - 3 000 EUR

Lote 5 - ANTONIO CABA CASAMITJANA (Barcelona, 1837 - 1907). "Soldado", 1859. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 202 x 120 cm; 218 x 137 cm (marco). Pintor y decorador nacido en Barcelona, Antonio Caba inició sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, donde tuvo como maestros a Gabriel Planella, Pablo Milà Fontanals y Claudio Lorenzale. Posteriormente amplió sus estudios en Madrid gracias a una pensión que le concedió la Diputación de Barcelona en 1863. Allí fue alumno de Federico de Madrazo. Posteriormente viajó a Roma y París, ampliando su formación como discípulo del pintor de frescos Carlos Ruiz Delaroche. A lo largo de su carrera Caba presentó sus obras a numerosas exposiciones oficiales, siendo galardonado con una segunda medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1864 y con una medalla de oro en la Exposición Universal de Barcelona de 1888. Durante muchos años ejerció la docencia, primero en la Escuela Llotja de Barcelona y más tarde en las Academias de San Fernando de Madrid y Sant Jordi de Barcelona, dando clases, entre otros, al pintor impresionista Eliseu Meifrèn. En San Fernando fue profesor adjunto, y en Sant Jordi llegó a ser catedrático y director de la Academia. Su obra se conserva actualmente en el Museo del Prado, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo de L'Empordà, el Ayuntamiento de Perelada (Gerona) y la Abadía de Montserrat, así como en diversas colecciones privadas.

Valorac. 3 000 - 3 500 EUR

Lote 6 - JOSÉ ARPA PEREA (Carmona, 1858 - Sevilla, 1952). "Flores". Óleo sobre lienzo. Firmado y situado en la zona inferior derecha. Medidas: 61 x 74 cm; 74 x 84 cm (marco). Esta obra, localizada en Sevilla, pertenece probablemente a la última etapa del artista, ya que estéticamente el tratamiento de la materia en el lienzo, la carga de óleo y el acabado texturado de la imagen recuerdan mucho a las calidades de sus paisajes en Estados Unidos. Compositivamente la obra es realmente interesante, ya que el artista recrea un paisaje, pero rebaja el punto de vista y estrecha el espacio de tal manera que presenta un bodegón clásico de flores, que es el motivo principal, pero contextualizado en su propio entorno. José Arpa Perea fue un paisajista español que realizó gran parte de su obra en Norteamérica. Se trasladó de Carmona a Sevilla a los diez años, donde compaginó su trabajo como pintor de brocha gorda con clases nocturnas en la Escuela de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría de Sevilla a partir de 1876, donde conoció a Eduardo Cano. Entre 1883 y 1886 vivió en Roma, muy necesitado por la escasa beca que le concedió la Diputación de Sevilla, donde pintó lienzos históricos. A su regreso a Sevilla instala su propio estudio y comienza a ser reconocido, consiguiendo encargos como la decoración del Círculo Mercantil y el Casino Militar de la ciudad. Desarrolló aún más su faceta orientalista en un viaje a Marruecos en 1895. Vivió en México entre 1896 y 1910, trasladándose posteriormente a San Antonio (Texas, Estados Unidos) con motivo de la Revolución Mexicana, estableciendo allí una academia de pintura y recibiendo encargos, disfrutando de una situación económica que le permitió realizar frecuentes viajes a España, con largas estancias en Sevilla y visitas a la cornisa cantábrica. Pasó más de 30 años en esta ciudad americana. A lo largo de su vida mantuvo frecuentes contactos con los paisajistas de la conocida Escuela de Alcalá de Guadaira, y su obra pudo verse en numerosas ciudades de todos los países en los que vivió (Sevilla...), y se encuentra en importantes colecciones privadas de todo el mundo y en destacadas instituciones como el Museo de Bellas Artes de Sevilla, el Museo Cajasol, el Museo de Huelva, el San Antonio Museum of Art (Estados Unidos), el Museo Universitario Casa de los Muñecos (Puebla, México), etc.

Valorac. 12 000 - 14 000 EUR

Lote 7 - GEORGE OWEN WYNNE APPERLEY (Ventnor, Isla de Wight, Inglaterra, 1884 - Tánger, Marruecos, 1960). "Bacante", 1942. Óleo sobre lienzo. Presenta daños en el bastidor. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 63,5 x 53,5 cm; 90 x 78 cm (marco). La pintura de George Owen, siempre tuvo como protagonista a la mujer, en muchas ocasiones se trataba de mujeres andaluzas, aunque también trató ampliamente el género del desnudo. En este caso el autor nos presenta una imagen idílica, y a la vez sensual, protagonizada por una joven semidesnuda inmersa en la naturaleza. La mujer, con gesto altivo y media sonrisa, cubre su cuerpo con una piel de leopardo. Junto a ella hay unas hojas de vid, lo que indica que se trata de la representación de una mujer de la corte del dios Baco, ya que ambos atributos aluden a la iconografía del dios del vino. La utilización de una bacante como protagonista revela a una joven despreocupada, entregada al placer y a su vez sigue la tradición retratística iniciada en el siglo XVIII, en la que las damas de la corte eran retratadas con atributos de santas o diosas del panteón clásico, aunque en este caso el artista va más allá, en busca de lo que bajo su propia mirada simboliza la mujer de su tiempo. George Owen Wynne Apperley pertenecía a una familia aristocrática galesa, lo que le permitió gozar de una holgada situación económica. Desde muy joven se sintió atraído por la pintura y, oponiéndose a su familia, se matriculó en la Academia Herkomer. Su formación se amplió con su viaje a Italia, donde quedó cautivado por la luz mediterránea y realizó obras de género y temas paisajísticos. Tras casarse en secreto en 1907, se trasladó con su esposa a Lugano (Suiza), y luego regresó a Londres. En 1914 viajó a España, y se instaló definitivamente en Madrid dos años después, para ir un año más tarde a Granada, donde se estableció, y donde conoció a pintores locales como Francisco Soria Aedo y López Mezquita. Al proclamarse la II República, se trasladó a Tánger (Marruecos), donde se interesó por los nuevos temas orientalistas, y donde murió. Su obra pudo contemplarse en los distintos países donde residió, siendo especialmente importante una exposición en 1918 inaugurada por el rey Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battemberg, momento a partir del cual su prestigio aumentó. Su obra se conserva en importantes colecciones privadas e instituciones como el Victoria & Albert Museum de Londres, el Museo de Málaga, el Museo de Arte Palaciego de Bruselas, el Museo Municipal de Bellas Artes de Tandil en Buenos Aires (Argentina), el Museo de Sidney (Australia), etc. Presenta daños en el marco.

Valorac. 3 000 - 4 000 EUR

Lote 8 - JOAQUIN AGRASOT (Orihuela, Alicante, 1837 - Valencia, 1919). "Odalisca". Acuarela sobre papel. Presenta ligeras manchas de óxido en el papel. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 49 x 26,5 cm; 77 x 56 cm (marco). Partiendo de las bellas e inalcanzables odaliscas de Ingres, de piel tan pálida y gestos tan elegantes que siempre llevan a pensar en una princesa cristiana cautiva, nunca en una mujer árabe, las diversas escuelas pictóricas irán desarrollando toda una nueva iconografía que busca recrear de manera fantástica -pues de Oriente nada se sabe- un mundo vedado a los occidentales y lleno de atractivos. Agrasot comenzó su formación en su Orihuela natal, donde fue pensionado por la Diputación de Alicante para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. Discípulo allí de Francisco Martínez Yago, en sus primeros años obtuvo premios como la medalla de oro en la Exposición Provincial de Alicante de 1860. En 1863 obtuvo una nueva pensión, esta vez para viajar a Roma, donde entró en contacto con Rosales, Casado del Alisal y Fortuny. Con este último estableció estrechos lazos de amistad, y su pintura se vio profundamente influida por el estilo del pintor catalán. Periódicamente envió lienzos a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en las que obtuvo la tercera medalla en 1864 y la segunda en 1867. Agrasot permaneció en Italia hasta 1875; tras la muerte de Fortuny regresó a España, siendo ya un pintor de reconocido prestigio, fue miembro de las Academias de San Carlos y San Fernando, y participó como jurado en varias exposiciones artísticas. En 1886 recibió la medalla de arte en la Exposición Universal de Filadelfia, y en 1888 la segunda medalla en la Exposición Internacional de Barcelona. El estilo de Agrasot se enmarca dentro del realismo, interesándose especialmente por los temas de género y el costumbrismo regional. Sin embargo, también trabajó desnudos, temas orientales y retratos. Está representado en el Museo del Prado, el Museo de Bellas Artes de Valencia, el MUBAG de Gravina (Alicante) y la Academia de San Carlos de Valencia. Ligeras manchas de óxido en el papel.

Valorac. 1 500 - 2 000 EUR

Lote 9 - SEGUNDO MATILLA MARINA (Madrid, 1862 - Teià, Barcelona, 1937). "Vista rural con carácter", 14-3-1931. Óleo sobre cartón. Sin firma. Fechado. Presenta alguna falta en la pintura y en el cartón. Medidas: 14,5 x 17 cm; 33 x 36 cm (marco). Aunque nació en Madrid, Matilla se formó y desarrolló su carrera en Barcelona. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, bajo la dirección de Antonio Caba. Participó en numerosas exposiciones, como la Exposición Internacional de Barcelona de 1891, 1894, 1896 y 1898 (mención honorífica en 1891), las Exposiciones de Arte de Barcelona de 1918 y 1919, y el Salón de París de 1897. Ese mismo año recibió una mención honorífica en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid. Entre sus exposiciones individuales destacan las celebradas en el Salón Vilches de Madrid (1915) y, en Barcelona, en la Sala Parés (1914) y en las Galerías Pallarés (1942), esta última como homenaje póstumo. Varias de sus obras allí expuestas fueron adquiridas por el Museo de Arte Moderno de Madrid, y muchas otras se exportaron a América. Sus paisajes del Ampurdán, Camprodón, Port de la Selva y Cadaqués tuvieron un gran éxito de público y crítica. Su obra se encuentra en diversos museos, como el ya mencionado Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, el Museo del Prado, el Museo Pablo Gargallo de Zaragoza y el Museo Nacional de Arte de Cataluña, así como en importantes colecciones privadas internacionales.

Valorac. 700 - 800 EUR

Lote 10 - JOAQUÍN TERRUELLA MATILLA (Barcelona, 1891 - 1957). "Paseo de Ronda", 1946. Óleo sobre tabla. Firmado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 25 x 34,5 cm; 35 x 44,5 cm (marco). Sobrino y seguidor de Segundo Matilla, Joaquín Terruella fue también discípulo de Santiago Rusiñol. Con este último realizó un viaje a Italia en 1923, además de pasar algún tiempo trabajando juntos en Aranjuez. También pintó en París y Palma de Mallorca. Realiza su primera exposición individual en la desaparecida Sala Goya de Barcelona en 1916. A partir de entonces expuso en Barcelona, especialmente en la Sala Parés (desde 1924), y también mostró sus paisajes impresionistas en galerías de París (allí expuso por primera vez en 1922), Madrid, Palma, Zaragoza, Burdeos y Biarritz. A partir de 1928 expone en la Sala Gaspar de Barcelona, donde permanecerá hasta 1952. En 1956 celebró su última exposición en la Sala Busquets, también en su ciudad natal. Desde entonces su obra ha estado presente en diversas exposiciones colectivas y antológicas, como la celebrada en la Sala Gothsland de Barcelona en 1985. En 1993, Ángeles Cortina reunió en su galería barcelonesa una serie de sus óleos y dibujos. Joaquín Terruella fue un pintor fundamentalmente paisajista, en la estela del Impresionismo, que reflejó el paisaje catalán con delicadeza y sutil transparencia. Otro de sus temas preferidos fue el mundo taurino, y de hecho trabajó como ilustrador taurino para las publicaciones "El Día Gráfico" y "La Noche". También pintó escenas de gitanos y cafés concierto. Su obra se conserva en el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid y el Museo Provincial de Lugo.

Valorac. 2 000 - 2 500 EUR

Lote 11 - JOAQUÍM TERRUELLA MATILLA (Barcelona, 1891 - 1957). "Paisaje litoral". Óleo sobre cartón. Firmado en la esquina inferior izquierda. Tamaño: 24 x 27,5 cm; 41 x 45 cm (marco). Sobrino y seguidor de Segundo Matilla, Joaquín Terruella fue también discípulo de Santiago Rusiñol. Con este último realizó un viaje a Italia en 1923, además de pasar algún tiempo trabajando juntos en Aranjuez. También pintó en París y Palma de Mallorca. Realizó su primera exposición individual en la desaparecida galería Goya de Barcelona en 1916, y a partir de entonces expuso en otras galerías barcelonesas, como la Parés y la Gaspar, y también en París, Madrid, Palma, Zaragoza, Burdeos y Biarritz. En 1956 celebró su última exposición en la Sala Busquets de Barcelona. Desde entonces su obra ha estado presente en diversas exposiciones colectivas y antológicas, como la celebrada en la Sala Gothsland de Barcelona en 1985. En 1993, Ángeles Cortina reunió en su galería barcelonesa una serie de sus óleos y dibujos. Joaquín Terruella fue un pintor fundamentalmente paisajista, en la estela del Impresionismo, que reflejó el paisaje catalán con delicadeza y sutil transparencia. Otro de sus temas preferidos fue el mundo de los toros, y de hecho trabajó como ilustrador taurino para las publicaciones "El Día Gráfico" y "La Noche". También pintó escenas de gitanos y cafés concierto. Su obra se conserva en el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid y el Museo Provincial de Lugo.

Valorac. 700 - 800 EUR

Lote 12 - FRANCISCO LOZANO SANCHIS (Valencia, 1912 - 2000). "Paisaje", 1934. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Fechado al dorso. Medidas: 74 x 92 cm; 93 x 112 cm (marco). Pintor, profesor y miembro de las Reales Academias de Bellas Artes de San Fernando y San Carlos, Francisco Lozano se interesó por la pintura desde su juventud, y a los dieciséis años comenzó su formación en la Academia de San Carlos de Valencia. Posteriormente continuó sus estudios en la Residencia de Pintores de la Alhambra, y tras la Guerra Civil comenzó a hacerse un nombre. Su carrera despegaría en la década de 1940, cuando comenzó a exponer regularmente en Madrid y otras ciudades. En la capital fue acogido por Eugenio d'Ors, de cuya mano expuso en la galería Estilo, y quien le puso en contacto con los círculos artísticos e intelectuales del Madrid de la época. Pintor eminentemente mediterráneo, su obra se centró desde el principio en el paisaje, aunque evolucionó desde la influencia inicial de Sorolla hacia un lenguaje más personal, aunque igualmente sensible a la luz y al color. El suyo es un paisaje sintético, ordenado y austero, completamente moderno. Entre 1951 y 1952 viajó a París becado por el gobierno francés, y a su regreso su reconocimiento se completó con el primer premio en la Exposición Nacional de Bellas Artes. Ese mismo año obtuvo también un gran éxito en la Bienal de Venecia. A partir de entonces compaginó su práctica artística con la docencia en la Academia de San Carlos, donde ejerció la docencia desde 1955 hasta 1977. Paralelamente, realizó importantes exposiciones en España, Sudamérica, Estados Unidos, Alemania y Reino Unido, entre otros países, principalmente de la Europa mediterránea. Lozano fue socio de honor del Círculo de Bellas Artes (1952), miembro del Consejo Valenciano de Cultura (1986) y doctor honoris causa por la Universidad Politécnica de Valencia (1994), y en 1993 se le dedicó una gran exposición retrospectiva en el IVAM. Su obra se encuentra actualmente en museos como el Reina Sofía de Madrid, la Fundación Mendoza de Caracas, el Camón Aznar de Zaragoza, el IVAM de Valencia y el Museo de Bellas Artes de Montevideo, entre otros.

Valorac. 2 000 - 2 500 EUR

Lote 15 - GABINO REY SANTIAGO (Marín, Pontevedra, 1928 - Barcelona, 2006). "Flores y libros". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Con etiqueta en el reverso de la Sala Parés. Medidas: 55 x 46 cm; 73 x 64 cm (marco). Siendo aún un niño, al finalizar la Guerra Civil, Gabino Rey se trasladó a Barcelona con su familia. Discípulo de Ramón Rogent, comenzó a exponer muy joven, en el Salón de la Juventud de 1943. Continuó participando en este Salón, donde ganó un premio en 1946. En los años cuarenta obtuvo una beca del Gobierno francés, y expuso en las galerías barcelonesas Dalmau (1946) y Syra (1947). Desde 1957 expone en la Sala Parés de Barcelona, así como en la galería madrileña El Cisne. Fue galardonado en la III Exposición Universal de la Unión de Arte, en Bilbao (1947), y en 1980 con el Premio Poussiel de la Societé Nationale des Beaux Arts, de París. Junto con el grupo de la Sala Parés, expuso su obra no sólo en Barcelona, sino también en Madrid, Alicante, Pontevedra y Lugo, así como en Nueva York, Los Ángeles y París. Está representado en los Museos de Lugo, Pontevedra, Marín y Sitges, y en importantes colecciones institucionales y privadas de Europa y América. Su estilo, de raíces postimpresionistas, es de factura suelta. Gabino es un pintor al que le gusta la materia, la pincelada empastada, que aplica siguiendo una paleta cálida y equilibrada. Ha trabajado paisajes y bodegones, pero destaca especialmente como retratista, con obras intimistas y líricas, en las que mezcla lo aprendido de las escuelas catalana y gallega.

Valorac. 700 - 750 EUR

Lote 17 - Atribuido a FRANCISCO LAMEYER Y BERENGUER (Puerto de Santa María, Cádiz, 1825-Madrid, 1877). Maja con abanico". Óleo sobre lienzo. Tamaño: 32 x 24 cm; 44,5 x 37 cm (marco). En esta obra el pintor nos ofrece una imagen de gran expresividad plástica, con una composición sencilla en la que vemos a una mujer de busto, en primer plano, ante un fondo neutro que realza su presencia. El resultado sorprende por la representación veraz y convincente de la personalidad de la mujer: un personaje tranquilo con una mirada triste. Estéticamente, la obra recuerda en gran medida a los cuadros de Lameyer y Berenguer, que nació en El Puerto de Santa María pero cuya familia se trasladó a Madrid cuando él era aún un niño. En cuanto tuvo edad suficiente comenzó a trabajar con el grabador de Vicente Castelló. Posteriormente colaboró en El Siglo Pintoresco, revista fundada por Castelló. En 1841 ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, donde estudió con José de Madrazo, conoció a su hijo Luis y, a través de él, entabló amistad con toda la familia Madrazo. Dos años más tarde, impulsado por la necesidad de mantener a su familia, ingresa en la marina española como oficial administrativo. Aunque esto le impidió continuar con su carrera artística, siguió trabajando en sus ratos libres; completó 125 dibujos para las Escenas Andaluzas de Serafín Estébanez Calderón (publicadas en 1847). De 1854 a 1859 estuvo en Filipinas, donde dirigió la comisaría de policía. Regresó a España en 1860. En 1863 acompañó a Marià Fortuny (a quien había conocido a través de los Madrazo) en un viaje a Marruecos, donde visitó Tánger y Tetuán. El país se encontraba aún en cierta confusión debido a la reciente guerra hispano-marroquí. Esto le sirvió de inspiración para su obra más conocida, El asalto de los moros, que representa un asalto al barrio judío de Tetuán en el siglo XVIII. De regreso a Madrid, instala un estudio y comienza a pintar a partir de los bocetos realizados. Entre 1872 y 1873 visitó Egipto y Palestina. Durante su estancia en Egipto adquirió varias antigüedades que vendió al Museo Arqueológico Nacional de España, aliviando así parte de su carga económica. Siguió viviendo en Madrid, pero viajaba con frecuencia a París, en parte debido a la inestabilidad política de España que desembocó en la Tercera Guerra Carlista.

Valorac. 1 500 - 1 800 EUR

Lote 18 - JULIO MOISÉS FERNÁNDEZ DE VILASANTE (Tarragona, 1888 - Cantabria, 1968). "Retrato femenino", 1922. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado en el ángulo inferior izquierdo. Presenta en la contraetiqueta de la exposición de 1923 en la Junta Municipal d'Exposicions d'Art. Medidas: 110 x 93 cm; 131 x 115 cm (marco). Julio Moisés Fernández de Villasante pasó su infancia y adolescencia en Galicia y Cádiz, ciudad en cuya Escuela de Bellas Artes inició sus estudios de pintura. Allí ganó varios premios y recibió encargos como el de decorar su Gran Teatro. En 1912 se trasladó a Barcelona y en su primera participación en una Exposición Nacional de Bellas Artes obtuvo una tercera medalla. Repitió con un segundo y un primer premio en las ediciones de 1915 y 1920. También fue premiado en las Exposiciones Internacionales de San Francisco (1915) y Panamá (1916). Su obra seguiría siendo expuesta a lo largo de su vida, como las diversas exposiciones individuales que en la década de 1930 le llevaron a Brasil, Uruguay y Argentina. Instalado en Madrid desde 1920, ejerció la docencia durante varios años tras fundar una Academia Libre de Arte en 1923. Por ella pasaron alumnos como Salvador Dalí, mientras que fue requerido por la Casa Real para retratar a S.M. el Rey Alfonso XIII y a la Reina Victoria Eugenia. La temática de su obra fue, sobre todo, la pintura de género y el retrato femenino, mezcla de costumbrismo y folclore a partes iguales. Así fue la Mujer con garrafa en la mano que firmó en 1945 para ilustrar el calendario de UEE y con la que, siguiendo la tradición iconográfica de la colección, aportó su propia visión de los cánones ideales de belleza femenina. Su talento fue reconocido con su nombramiento como director de la Escuela de Bellas Artes en 1946 y como académico de la Escuela de San Fernando de Madrid en 1947.

Valorac. 1 500 - 1 900 EUR

Lote 20 - CECILIO PLÁ GALLARDO (Valencia, 1860 - Madrid, 1934). "El círculo de los avaros", serie El círculo de los infiernos, Dante. Óleo sobre lienzo. Sin firma. Medidas: 90 x 112 cm; x 111,50 x 132,50 cm (marco). Cecilio Pla comienza su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, para continuar después en la de San Fernando de Madrid, donde tuvo como profesor a Emilio Sala. En 1880 realiza un viaje de estudios a Roma, visitando Italia, Francia y Portugal. Desde allí comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, obteniendo una tercera medalla en 1884 por la obra de tema italiano "El Dante: círculo de los codiciosos", y segunda medalla en 1887 por el lienzo religioso titulado "Entierro de Santa Leocadia". En 1892 obtuvo de nuevo una segunda medalla por el cuadro realista de intención social "Las doce (el almuerzo)", y el mismo galardón en 1895 por una escena de desavenencia conyugal en un interior burgués, "Lazo de unión". Pla continuó participando en las Exposiciones Nacionales a lo largo de su vida, obteniendo en 1910 la consideración de primera medalla por el cuadro "Dos generaciones", caracterizado por los diferentes efectos de luz natural que eran la verdadera especialidad de este artista. Ese mismo año de 1910 sustituyó a su antiguo maestro Emilio Sala en la clase de estética del color y procedimientos pictóricos en la Academia de San Fernando, donde fue profesor de Juan Gris, Francisco Bores, Pancho Cossío y José María López Mezquita, entre otros. Fue entonces cuando publicó su "Cartilla de arte pictórico". Pla también participó en concursos internacionales, siendo galardonado con una medalla de honor en la Exposición Universal de París de 1900. En 1924 fue nombrado académico de San Fernando. Alternó su actividad docente con la pintura, además de colaborar como ilustrador con publicaciones como "La Ilustración Española y Americana", "Blanco y Negro" y "La Esfera". También realizó carteles, como el del Carnaval del Círculo de Bellas Artes de 1892, y participó en decoraciones murales, entre ellas el techo del hotel de la Infanta Isabel de Borbón, el Casino de Madrid, el Círculo de Bellas Artes o el palacio de los Duques de Denia. Considerado el máximo exponente de la pintura modernista valenciana, abrazó sin embargo diferentes tendencias, desde el academicismo y costumbrismo de sus inicios hasta el wagnerianismo y luminismo de sus vistas costeras pintadas en Valencia. En la actualidad, Cecilio Pla está representado en el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza, los Museos de Bellas Artes de Valencia, Zaragoza, Santander y Bilbao, el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el Ayuntamiento de Valencia y la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, entre otras colecciones públicas y privadas, como la Colección UEE. En 1999, la Fundación Mapfre le dedicó una amplia retrospectiva.

Valorac. 8 000 - 9 000 EUR

Lote 21 - JOSÉ MIRABENT GATELL (Barcelona, 1831 - 1899). "Bodegón de frutas". Óleo sobre cartón. Firmado en la esquina inferior derecha. Falta el marco. Medidas: 36 x 45 cm; 49 x 58 cm (marco). José Mirabent estudió en la Escuela de La Lonja de Barcelona, donde fue discípulo de Pablo Milá Fontanals, Claudio Lorenzale y Segismundo Ribó, de quienes recibió la influencia de la estética nazarí. En 1855 ingresó como ayudante en la citada escuela, obteniendo en 1872 la categoría de profesor de pintura decorativa, tejidos y estampas. En su primera época se le puede considerar como un pintor romántico adscrito a la línea nazarena de sus maestros, y pintó principalmente retratos y bodegones con flores y frutas. Posteriormente se especializó en la decoración de interiores, actividad en la que destacan sus trabajos para el Gran Teatro del Liceo y la Universidad de Barcelona, el Museo Balaguer de Vilanova i la Geltrú y las iglesias madrileñas del Buen Suceso, las Salesas Reales y el convento de las Madres Reparadoras. Con sus cuadros de flores y frutas participó en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en Madrid, y obtuvo varios premios: mención honorífica en las de 1856 y 1858, tercera medalla en las de 1860 y 1867, y condecoración en 1871. También fue galardonado con una medalla de oro en la Exposición Universal de Barcelona de 1888. Como retratista retrató a Pablo Piferrer, Ramón Anglasells y Joaquín Rey Esteve, entre otros. En 1892 participó en el Primer Festival Modernista. Está ampliamente representado en el MNAC, así como en el Museo del Prado, el Museo de Arte Moderno y el Museo Romántico de Madrid, la Real Academia de Sant Jordi, el Ateneo y la Galería de Catalanes Ilustres de Barcelona, etc.

Valorac. 5 000 - 6 000 EUR

Lote 22 - AGUSTÍN REDONDELA (Madrid, 1922 - 2015). "El olivar (Guadalajara)", 1978. Óleo sobre lienzo. Presenta etiqueta en el reverso de la Galería Biosca (Madrid). Presenta faltas en el marco. Firmado y fechado en la esquina inferior derecha. Firmado, fechado, titulado y localizado (Madrid) en el reverso. Medidas: 46 x 55 cm; 70 x 79 cm (marco). En esta obra Redondela nos ofrece un sobrio paisaje, típicamente castellano, dominado por una atmósfera de gran poder evocador, basada en el contraste de las tonalidades del primer plano con el cielo. El pintor deja de lado la descripción narrativa del paisaje para construirlo utilizando únicamente el color, muy trabajado y estudiado, y una línea sintética, expresiva y rotunda a base de gruesos trazos negros. Guadalajara fue un escenario prolífico en la pintura de Agustín Redondela, convirtiéndose en protagonista de muchas de sus obras. Pintor principalmente autodidacta, considerado uno de los paisajistas españoles más originales del siglo XX, Agustín González Alonso se formó con su padre, el pintor y escenógrafo José González "Redondela". Tras la guerra civil asistió a clases en la Escuela de Artes y Oficios de Madrid con el paisajista José Ordoñez, y en 1945 envió por primera vez un cuadro a la Exposición Nacional de Bellas Artes, firmado con el seudónimo de Redondela. Ese mismo año celebra su primera exposición personal en la Galería Estilo de Madrid. Es en esta época cuando entra en contacto con la Escuela de Madrid, y en 1947 es seleccionado para exponer en el Salón de los Once de la Academia Breve e Crítica de Arte de Eugenio d'Ors. En los años cincuenta Redondela obtuvo una beca de la Fundación Catherword de Filadelfia (1954), el Premio Nacional de Pintura (1953) y la primera medalla de la Exposición Nacional (1957). A lo largo de su carrera compaginó la pintura con la escenografía, trabajando para obras de Jacinto Benavente, Joaquín Calvo Sotelo, Dodie Smith y Peter Ustinov, entre otros. También realizó algunos trabajos como ilustrador, entre ellos una lujosa edición del "Viaje a la Alcarria" de Cela en 1978. En 1996 la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando le concedió el premio José González de la Peña, y dos años más tarde el Centro Cultural de la Villa de Madrid le dedicó una importante exposición antológica. Actualmente está representado en el Museo de Bellas Artes de La Coruña, el Museo del Paisaje Español Contemporáneo de Priego de Córdoba, el Museo de Bellas Artes de Bilbao, el Museo Camón Aznar de Zaragoza, los museos de Buenos Aires, Caracas y La Habana, y la Casa-Museo Oswaldo Guayasamín de Quito, entre otras colecciones públicas y privadas. Presenta etiqueta al dorso de la Galería Biosca (Madrid). Presenta faltas en el marco.

Valorac. 2 400 - 2 800 EUR

Lote 23 - RAMÓN MARTÍ ALSINA (Barcelona, 1826 - 1894). "La modelo". Óleo sobre lienzo. Revestido. Sin firma. Adherida al dorso una etiqueta de la Sala Parés de Barcelona. Tiene parches en la parte posterior. Medidas: 182 x 89 cm. Con los pies envueltos en una tela que se desliza por las piernas, la modelo se muestra desnuda y de cuerpo entero pero gira la cabeza como si quisiera ocultar su identidad, al tiempo que adopta un gesto ambiguo engañosamente pudoroso. Las mujeres de Martí Alsina son de una gran contundencia carnal, que aquí se ve acentuada por el fondo negro y por el tamaño natural de la figura. El modelado de sus miembros es magistral, lo que confiere a la anatomía una cadencia escultórica pero exenta de todo idealismo, haciéndola viva, espontánea y sensual. La sedosidad del cabello azabache, el modelado luminoso de las formas, la perfecta redondez de las rodillas, etc. denotan la impronta de un maestro. Considerado hoy como la figura más importante del realismo español, Martí Alsina se enmarca dentro de la vanguardia europea de la época. Revolucionó el panorama artístico español del siglo XIX, fue pionero en el estudio del dibujo del natural y creador de la escuela catalana moderna, así como maestro de toda una generación, con discípulos de la talla de Vayreda, Urgell y Torrescassana. Inició sus estudios de Filosofía y Letras, alternándolos con clases nocturnas en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona hasta 1848. Finalizado este primer aprendizaje y decidido a dedicarse a la pintura, da sus primeros pasos en la comarca del Maresme, donde comienza a ganarse la vida pintando retratos de estilo naturalista y paisajes "à plen air". En 1852 ingresó como profesor de dibujo lineal en la Escuela de la Lonja de Barcelona, y dos años más tarde comenzó a impartir clases de dibujo de figuras, puesto que ocupó hasta la subida al trono de Amadeo de Saboya. En 1853 viajó a París, donde visitó el Louvre y se familiarizó con la obra de Horace Vernet, Eugène Delacroix y el romanticismo francés. Más tarde conocería la obra de Gustave Courbet, máximo exponente del realismo. En 1859 fue nombrado académico correspondiente de la Academia de Bellas Artes de Sant Jordi de Barcelona. Su primera exposición importante fue la Exposición General de Bellas Artes de Barcelona en 1851. A partir de ese momento expuso regularmente en Barcelona, Madrid y París, y fue invitado a la Exposición Universal de la capital francesa en 1889. Entre sus premios destacan las medallas obtenidas en las Exposiciones Nacionales de Madrid, tercero en 1858 con la obra "Último día de Numancia" y segundo en 1860 con su paisaje. En sus últimos años vivió recluido, centrando sus esfuerzos en la búsqueda de nuevas formas de expresión, con una pincelada cercana al impresionismo. Entre sus temas encontramos numerosos paisajes y marinas, vistas urbanas (especialmente de Barcelona), retratos y figuras humanas, escenas de género, temperamentales desnudos femeninos, pintura de historia y escenas bíblicas. En pocas ocasiones se dedicó a los bodegones, aunque también pintó algunos. Se conservan obras de Martí Alsina en el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo de la Abadía de Montserrat y el Museo de l'Empordà, en Figueras.

Valorac. 6 000 - 8 000 EUR

Lote 24 - ERNEST SANTASUSAGNA SANTACREU (Barcelona, 1900 - Santa Coloma de Gramenet, Barcelona, 1964). "Venus del espejo". Óleo sobre lienzo. Presenta restauraciones. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 65 x 80 cm; 93 x 109 cm (marco). Esta obra deja testimonio de un profundo conocimiento de la obra del maestro del barroco Velázquez, además de un pulso artístico privilegiado: los vivos tonos rosados de la carne del modelo, la forma de extender la hoja blanca, el sentido material impreso, el reflejo metálico del espejo... son aspectos que dan cuenta de un digno seguidor de la estela de Velázquez. Con suma sabiduría, consigue que el cuerpo crestado adquiera cualidades táctiles, así como el pequeño Cupido. La pintura de Santasusagna, de lenguaje naturalista, siempre se ha dedicado a realzar la sensualidad femenina, en sus formas y frescura, pero sin idealizar. En esta ocasión lo consigue a través de esta Venus carnal y realista, como también le interesaba a Velázquez tomar como modelos a mujeres jóvenes de su entorno en lugar de representar diosas irreales. Ernest Santasusgana inició su formación en la Academia Baixas de Barcelona, y luego amplió sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios de La Lonja. Más tarde sería profesor de esta última y, cuando las enseñanzas de la institución se desmoronaron, pasó a ser catedrático del Superior de Bellas Artes de San Jorge. Miembro del Real Círculo Artístico, debutó en la Sala Parés en 1928. A partir de entonces repitió presencia en la sala de la Pinacoteca, además de participar en los Salones de Otoño y en las Exposiciones de Primavera de Barcelona, entre otros certámenes y exposiciones. Fue distinguido con mención honorífica en la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, en la Exposición Nacional de Madrid de 1941 con una tercera medalla y en la Exposición Nacional de Barcelona de 1944 con el premio de honor. También fue galardonado en dos ocasiones por el Círculo Artístico. Además de en su ciudad natal, Santasusagna expuso en Madrid, San Sebastián y Bilbao, y participó en exposiciones colectivas en Egipto, Brasil, Argentina e Italia, así como en las Bienales de Venecia, Berlín y Arte Español Contemporáneo de Buenos Aires. También trabajó como diseñador de carteles para Metro Goldwin Mayer. Sus obras se encuentran en varios museos españoles, así como en numerosas colecciones nacionales y extranjeras. Presenta restauraciones.

Valorac. 2 000 - 3 000 EUR

Lote 25 - MANOLO HUGUÉ (Barcelona, 1872 - Caldas de Montbui, Barcelona, 1945). "Bueyes en el establo", 1935-1936. Relieve en terracota sobre peana de madera. Obra catalogada en el libro "Manolo. Escultura, pintura y dibujo", Montserrat Blanch, nº197, página 114. Procedencia: Colección Jacky J. Druker, amigo y mecenas de Joan Brotat. Medidas: 34 x 34 x 3 cm; 6 cm (altura de la base). En el catálogo razonado sobre Manolo Hugué escrito por Montserrat Blanch se reproducen varias obras (dibujos preparatorios, bajorrelieves en terracota, pero también en piedra) cuyo tema son los bueyes (generalmente representados en parejas), de las que forma parte la pieza que nos ocupa. Se trata de una producción realizada entre 1917 y 1923, años en los que el escultor insufla a la terracota nuevas sugerencias temáticas y formales. De vuelta a Ceret, tras su etapa parisina, se dedica al estudio de las cadencias, los ritmos, el esencialismo de inspiración arcaica... una suma de estrategias para escapar de todo estancamiento y renovar el lenguaje escultórico sin dejar de dialogar con los clásicos. En este relieve, una energía serena palpita como una fuerza invisible a través de los cuerpos, a través de los perfiles redondeados y alternando con incisiones geométricas. Las patas delanteras del buey yacente se flexionan para adaptarse al ángulo, buscando una cierta tensión conceptual entre los volúmenes y su encerramiento en un preciso límite cuadrangular. Con ello emula el arte griego desarrollado en las metopas. La indicación espacial es breve y sintética: unos pocos elementos esquemáticos esbozan la idea de un establo. Manuel Martínez Hugué, Manolo Hugué, se formó en la Escuela de la Lonja de Barcelona. Participante habitual en las tertulias de "Els Quatre Gats", entabló amistad con Picasso, Rusiñol, Mir y Nonell. En 1900 se traslada a París, donde vive diez años. Allí reanuda su relación con Picasso y entabla amistad con otros teóricos de la vanguardia como Apollinaire, Modigliani, Braque y Derain. En la capital francesa trabajó en el diseño de joyas y pequeñas esculturas, influido por la obra de su amigo, el escultor y orfebre Paco Durrio. En 1892 trabajó con Torcuato Tasso en obras decorativas para las celebraciones del centenario del Descubrimiento de América. Entre 1910 y 1917, dedicado por completo a la escultura, trabajó en Ceret, donde reunió a un heterogéneo grupo de artistas entre los que destacaron Juan Gris, Joaquín Sunyer y, de nuevo, Picasso. Durante estos años realizó exposiciones en Barcelona, París y Nueva York. En 1932 fue nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona. En la obra de Hugué, lo esencial es la relación con la naturaleza, teniendo en cuenta la figura humana como elemento integrado en ella. Esta es una característica del clasicismo novecentista, pero en manos de Hugué va más allá de sus limitados orígenes. Suele representar campesinos, aunque también toreros y bailarinas -como puede verse en esta ocasión-, siempre retratados con un nivel de detalle y una apreciación de las texturas que revelan su antigua formación como orfebre. En su producción artística conviven la tradición mediterránea, el clasicismo y el arcaísmo griegos, y el arte del antiguo Egipto y Mesopotamia, con las vanguardias europeas que asimiló y conoció de primera mano, concretamente el fauvismo y el cubismo de Matisse. Se conservan obras de Hugué en el MACBA, el Centro Georges Pompidou de París, el Museo Nacional de Arte de Cataluña y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, entre muchos otros.

Valorac. 2 200 - 2 500 EUR

Lote 26 - SEGUNDO MATILLA MARINA (Madrid, 1862 - Teià, Barcelona, 1937). "Escena costera en Vilanova y la Geltrú". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Situado en el reverso. Presenta restauraciones. Medidas: 60 x 100 cm; 73,5 x 114,5 cm (marco). A pesar de nacer en Madrid, Matilla se formó y desarrolló su carrera en Barcelona. Estudió Bellas Artes en la Lonja de Barcelona, bajo la dirección de Antonio Caba. Participó en numerosas exposiciones, como la Exposición Internacional de Barcelona de 1891, 1894, 1896 y 1898 (mención honorífica en 1891), las Exposiciones de Arte de la misma ciudad de 1918 y 1919, y en el Salón de París de 1897. Ese mismo año recibió una mención honorífica en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid. Entre sus exposiciones individuales destacan las celebradas en el Salón Vilches de Madrid (1915) y, en Barcelona, en la Sala Parés (1914) y en las Galerías Pallarés (1942), esta última como homenaje póstumo. Varias de sus obras allí expuestas fueron adquiridas por el Museo de Arte Moderno de Madrid, y muchas otras se exportaron a América. Consiguió un gran éxito de público y crítica gracias a sus paisajes del Ampurdán, Camprodón, Port de la Selva y Cadaqués. Su obra se encuentra en diversos museos, como el citado Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, el Museo del Prado, el Museo Pablo Gargallo de Zaragoza y el Museo Nacional de Arte de Cataluña, así como en importantes colecciones privadas internacionales.

Valorac. 3 000 - 3 500 EUR

Lote 27 - JOSEP PUIGDENGOLAS BARELLA (Barcelona, 1906 - 1987). "Calatayud", 1957. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 73 x 92 cm. En esta obra Puigdengolas demuestra su absoluto dominio de la técnica y la captación del paisaje, en una imagen en la que consigue sintetizar la representación naturalista, la expresión personal y el orden pictórico. Vemos una pincelada sensible, que explora el espacio y le da forma y entidad, creando volúmenes, luces y sombras, definiendo una atmósfera captada con gran sensibilidad. A través de un lenguaje puramente personal, Puigdengolas sintetiza los elementos básicos de representación y expresividad de la pintura, como se aprecia en la intensidad de sus colores o en el rigor de su estructura compositiva. Josep Puigdengolas se formó en las escuelas de Artes y Oficios y La Lonja, en Barcelona, y posteriormente completó sus estudios en El Paular y en la Real Academia de Florencia. Fue discípulo de Eliseo Meifrén y Joaquín Mir. En 1951 fue nombrado profesor de dibujo en la Escuela de Bellas Artes de Sant Jordi. Aunque tenía su estudio en Barcelona, pintaba con frecuencia en La Cerdanya y Mallorca, concretamente en la localidad de Deià. Su obra, de un luminoso naturalismo, deriva de la estela de Mir, y le valió una gran aceptación por parte del público. Centró su obra en el paisaje, pero también trabajó el retrato. A lo largo de su carrera realizó varias exposiciones individuales, como la organizada en el Salón Cano de Madrid en 1962, y participó en colectivas y certámenes como la Exposición Nacional de Bellas Artes. Pocos meses antes de su muerte, en enero de 1987, celebró su última exposición en la Sala Parés de Barcelona. Actualmente está representado en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y en el MACBA de Barcelona, entre otros.

Valorac. 2 200 - 2 500 EUR

Lote 28 - JUAN RIBERA BERENGUER, (Valencia, 1935 - Valencia, 2016). "Antigua estación de tren de Aragón, Valencia". Óleo sobre papel. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 89 x 174 cm; 104 x 189 cm (marco). Formado en la Escuela Superior de Bellas Artes de Valencia, Juan Ribera fue miembro fundador de grupos artísticos como Parpalló, Arte Actual y Movimiento Artístico del Mediterráneo. Ha formado parte de la vanguardia artística valenciana y madrileña, participando en las exposiciones de la galería Juan Mordó. Expuso individualmente en la Dirección General de Bellas Artes de Madrid (1969) y en el Museo de la Ciudad de Valencia (1998), entre otros centros, y participó en importantes exposiciones colectivas como las celebradas en el Museo de Arte Moderno de París (1963), "Pintores figurativos de la España actual" (1964), que recorrió Estados Unidos, y el IVAM de Valencia. A lo largo de su carrera ha recibido pensiones de la Diputación y el Ayuntamiento de Valencia, la Casa Velázquez de Madrid y la Fundación March, y ha sido galardonado con el Premio Valencia en la Exposición de Bellas Artes de Barcelona (1960), el Diputación de Valencia en la Exposición Nacional de Madrid (1968), la medalla de oro en el Salón de Marzo de Valencia (1977) y el Premio Archivero al mérito artístico (1995), entre otros. Ribera está representado en el Museo San Pío V de Valencia, el Museo de Arte Contemporáneo de Vilafamés, el Museo Municipal y el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el Museo de Springfield (Massachusetts), la Catedral, la Diputación, el Ateneo y el Museo de la Ciudad de Valencia, etc.

Valorac. 8 000 - 9 000 EUR

Lote 29 - PERE YSERN ALIÉ (Barcelona, 1875 - 1946). "Serra Tramontana, Mallorca", ca. 1920. Óleo sobre lienzo. Firmado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 54 x 65 cm. Pere Ysern Alié fue discípulo de Pere Borrell del Caso en su academia, donde con Ramón Riera formó el núcleo generador del grupo "El Rovell de l'Ou". Se presentó por primera vez en la Exposición General de Bellas Artes de Barcelona en 1894, y en 1896 viajó a Roma, donde permaneció dos años y completó su formación con Ramón Tusquets. A su regreso a Barcelona, en 1898, participa en la Exposición Municipal de Bellas Artes. Al año siguiente se instala en París, donde expone en el Salón de Artistas Franceses de 1900. También participó regularmente en el Salon des Indépendants. Una clara señal de su éxito internacional fue su participación, en 1901, en la Exposición Internacional de San Petersburgo, donde el Zar de Rusia compró uno de sus cuadros. Instalado en París, visitó ocasionalmente Barcelona, donde expuso en la Sala Parés en 1901 y 1903, y participó en la exposición colectiva de la Asociación de Pintores y Escultores Catalanes en 1905. En 1927 regresó a España, y a partir de entonces su presencia en certámenes barceloneses y catalanes fue constante, y su pintura fue finalmente valorada en nuestro país. Hoy está representado principalmente en el MACBA, así como en el Museo de Luxemburgo de París, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, la Fundación La Caixa y diversas colecciones privadas.

Valorac. 1 800 - 2 000 EUR

Lote 31 - JOAN CARDONA I LLADÓS (Barcelona, 1877 - 1957). "Elle quitte ses gants". Carboncillo y gouache sobre papel. Firmado en la esquina inferior derecha. Obra publicada en: - "Ceinture Dorée" de Victorien du Saussay, 1907. - Catálogo "Joan Cardona. El glamour de la Belle Époque", página 170, n.417J. Firmado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 26 x 18,5 cm; 50 x 42 cm (marco). Joan Cardona fue una figura indispensable de la estética de la Belle Époque, contribuyendo a definir los ambientes glamurosos del París elegante del ocaso del siglo XIX. Los críticos llegaron a hablar del "estilo Cardona" para referirse a la exclusividad de su obra. Desde 1900, año en que se instaló en París, hasta 1914, cuando la Primera Guerra Mundial le devolvió a Barcelona, fue uno de los ilustradores más reconocidos de la capital francesa. Formado en la Escuela de Bellas Artes de la Lonja y en la Academia Baixeras de Barcelona, amplió sus estudios en París, donde se estableció durante varios años. En la capital francesa formó grupo con los mejores ilustradores de la época, como Cappiello, Sem, Steinlen y Roubille. Pintor y dibujante, desarrolló una importante actividad en el campo de la ilustración, colaborando con revistas españolas como "El Gato Negro" e "Hispania", y en las francesas "Le Rire" y "Simplicissimus". Destaca su colaboración con "Jugend", la revista insignia del modernismo vienés, el Jugendstil. En su etapa parisina, Cardona alcanzó fama internacional gracias a sus dibujos a pluma, caracterizados por la nitidez del trazo y fuertes valores expresivos. Por el contrario, en su pintura subordina la línea al color, con tonos cálidos en sus primeros años y gamas frías en su madurez. Sus cuadros, de gran fuerza expresiva y denso empaste, definen el protagonismo de la mujer, que se perfila sobre fondos vibrantes, casi abstractos, en un estilo que le acerca a Anglada Camarasa. En 1897 fue premiado en el concurso convocado por la Academia Mariana de Lérida. Expuso en París en los Salones de Otoño y de la Societé Nationale, obteniendo en ambos el título de "societaire". Participó en las Exposiciones Internacionales de Bellas Artes de Barcelona de 1907 y 1929. Está representado en el Museo de Luxemburgo, en París.

Valorac. 4 200 - 4 500 EUR

Lote 32 - JOAN REBULL TORROJA (Reus, 1899 - Barcelona, 1981). "Busto femenino. Escultura de terracota sobre base de mármol. Firmada. Se trata de un estudio preparatorio para una escultura conservada actualmente en el MNAC, n. inventario 010048000. Medidas: 26 x 14 x 16 cm; 9 cm (altura de la base). Esta obra es una muestra elocuente del trabajo más personal de Joan Rebull, un artista que desarrolla un lenguaje de raíces clásicas en la estética, basado en los principios de nobleza, belleza y proporción, que utiliza sin embargo una idealización y una síntesis de las formas según las vanguardias y no los modelos de la antigüedad clásica. Así, nos encontramos ante un retrato sereno, equilibrado, de cierto carácter inmutable, arcaico y casi sagrado en la perfección de sus proporciones y líneas estructurales, que establece un puente entre los ídolos antiguos y la investigación plástica de vanguardia. Considerado el escultor catalán más destacado de su época, Joan Rebull se inició en el mundo de la escultura en su ciudad natal, de la mano del escultor Pau Figueres. En 1915 se trasladó a Barcelona para iniciar su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de La Lonja, al tiempo que trabajaba en el taller del marmolista Bechini. En 1916 debutó individualmente con una exposición en el Centro de Lectura de Reus, y al año siguiente fundó, junto con otros artistas, el grupo conocido como "Els Evolucionistes", que pretendía reproducir el Novecentismo catalán. En 1921 viajó a Londres y París, ciudades en las que quedó especialmente impresionado por el arte antiguo que albergaban sus museos. Entre 1926 y 1929 residió en la capital francesa y participó en el Salon des Indépendants, aunque también envió obras a exposiciones en Barcelona. En París fue el primer artista contratado por el destacado marchante catalán Joan Merli. A su regreso fue nombrado presidente del nuevo Salón de Montjuic (1932) y miembro de la Academia de Sant Jordi (1934), participó en diversas exposiciones en Madrid y Barcelona y, en 1938, ganó el Premio Campeny en el Salón de Otoño de Barcelona. Después de la guerra, se exilió en París, donde participó activamente en la vida artística, asistiendo a la exposición "Le Jeune Sculpture Française" y a los Salones de Otoño. Regresó a Barcelona en 1948, y tres años más tarde ganó un gran premio en la I Bienal Hispanoamericana de Arte de Madrid. En 1962 fue nombrado profesor de la Escuela de Bellas Artes de Sant Jordi, y poco antes de su muerte le fue concedida la medalla de oro de la Generalitat de Catalunya. Hijo del perfeccionismo novecentista y gran dibujante, Rebull trabaja con gran dominio técnico y seguridad en el camino a seguir. La suya es una escultura directa y antirretórica, basada en una visión serena y esencial de la realidad. Su estilo puede definirse como un reencuentro con la fuente del clasicismo, del que nunca copia las consecuencias. Está representado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Centro Nacional Reina Sofía, el Ayuntamiento de Barcelona, el Monasterio de Montserrat y el Palau de la Música Catalana, entre otros centros.

Valorac. 3 200 - 3 500 EUR

Lote 33 - ISMAEL SMITH MARÍ (Barcelona, 1886 - Nueva York, 1972). "Desnudos femeninos". Lápiz sobre papel. Firmado con sello en la esquina superior izquierda. Presenta manchas de óxido. Medidas: 30 x 23 cm; 60 x 49,5 cm (marco). Escultor, dibujante y grabador, fue uno de los primeros artistas considerados novecentistas por Eugenio D'Ors. Formado en la Escuela de La Lonja de Barcelona y en la Academia Baixas, fue alumno de los escultores Benlliure, Querol, Vallmitjana y Llimona. Premiado en un concurso para artistas noveles en el Ateneo Barcelonés en 1903, en 1906 expuso en la Sala Parés. Obtiene segunda y tercera medalla en la V Exposición Internacional de Bellas Artes de Barcelona, en 1907, y segunda medalla en la VI, en 1911. En 1910 viaja a París becado por el Ayuntamiento de Barcelona. Entre 1913 y 1914 estudia en la Escuela Nacional de Artes Decorativas de la capital francesa, y a continuación inicia una serie de viajes a Inglaterra y Estados Unidos, realizando numerosas exposiciones. En 1918 se instaló definitivamente en Nueva York, donde colaboró con la Hispanic Society. En 2005 la Fundación Palau le dedicó una retrospectiva. Las matrices de sus grabados se conservan en la Unidad Gráfica de la Biblioteca de Cataluña y en la Calcografía Nacional de Madrid. Muchos de sus grabados se encuentran también en el British Museum de Londres, y además está representado en el Museo Reina Sofía de Madrid, el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el MoMA de Nueva York, la Calcografía Nacional de Madrid y la Biblioteca de Cataluña.

Valorac. 400 - 450 EUR

Lote 34 - FRANCISCO JAVIER GOSÉ ROVIRA (Alcalá de Henares, 1876 - Lleida, 1915). "Dama con gato", 1913. Cartel litográfico. Estampes D'Art Devambez. Con sello del editor. Firmado en la plancha. Obra catalogada en "Xavier Gosé, Il.lustrador de la modernitat", Ed. Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC), 2015, Barcelona, p. 18. Colección: Monografies (Museu Nacional d'Art de Catalunya), 3. Presenta algunos desperfectos, arrugas y faltas laterales del papel. Medidas: 50 x 35 cm. El estilo de Javier Gosé oscila entre el modernismo y el art-decó francés y refleja la vida de la sociedad parisina. Inspirado en la vida mundana de los cafés-concierto, las prostitutas, las carreras de caballos, los deportistas y el conocido Montmartre, su estilo refleja la finura y delicadeza de la sociedad francesa de la época, aunque no está exento de cierta picaresca característica del París despreocupado. Francisco Javier Gosé fue un dibujante y pintor esencial en el mundo gráfico y de la moda en la transición del siglo XIX al XX. Estudió en Barcelona, donde fue ayudante del dibujante José Luis Pellicer. Colaboró desde muy joven en publicaciones barcelonesas, desde "La Esquella de la Torratxa", "La saeta", en las que queda clara su adscripción al modernismo, hasta "Mundial Magazine" y "Fémina", donde ya se empieza a vislumbrar una línea precubista. Su primera exposición tuvo lugar en Els Quatre Gats. Durante su estancia en Barcelona retrató al proletariado, aunque en 1900 viajó a París, donde colaboró con "La vie Illustrée", "Le frou-frou", entre otros. Expuso en las galerías barcelonesas Parés y Dalmau, la galería Vilches (Madrid), Georges Petit y Ritlinger (ambas en París). Hasta ese momento sus obras mostraban una mirada satírica y realista sobre burgueses, esnobs y prostitutas, aunque esta mirada cambió en 1907, cuando inició una etapa más estilizada, menos realista y menos irónica, sobre todo por su inicio en el mundo de la moda, en el que Gosé buscaba marcar tendencia entre la sociedad femenina. Su paso por París fue el punto de inflexión en su vida y en su producción artística, ya que la capital francesa fue el lugar donde amplió sus conocimientos, convirtiéndose en un artista de éxito que conseguiría interesantes encargos como ilustrador en las mejores revistas satíricas. En 1910 comenzó a colaborar con revistas alemanas como "Ulk". En 1914 estalló la Primera Guerra Mundial, circunstancia que, unida a los graves problemas de salud que padecía, le privó del elegante ambiente parisino, trasladándose a la ciudad de Vichy, famosa por sus balnearios. Poco después, Gosé se trasladó de nuevo a Barcelona, pasando los últimos días de su vida en Lleida. Entre las exposiciones póstumas destacan la del Círculo Artístico, el mismo año de su muerte, la retrospectiva de la Galería Rovira (1970) y la de la Fundación La Caixa (1984). Está representado en los Museos de Arte Moderno de Barcelona y Madrid, entre otros.

Valorac. 2 800 - 3 000 EUR

Lote 35 - FRANCISCO JAVIER GOSÉ ROVIRA (Alcalá de Henares, 1876 - Lleida, 1915). "L'arbre de Mai. Robes simples pour l'eté". Pochoir iluminado a mano sobre papel Velin. Firmado. Prueba de estado de L'Arbre de Mai-Revista La Gazette du Bon Ton 1914, nº5, p. 42. Medidas: 19 x 34 cm; 26 x 40 cm (passe-partout). El estilo de Javier Gosé oscila entre el modernismo y el art-decó francés y refleja la vida de la sociedad parisina. Inspirado en la vida mundana de los cafés-concierto, las prostitutas, las carreras de caballos, los deportistas y el conocido Montmartre, su estilo refleja la finura y delicadeza de la sociedad francesa de la época, aunque no está exento de cierta picaresca característica del París despreocupado. Francisco Javier Gosé fue un dibujante y pintor esencial en el mundo gráfico y de la moda en la transición del siglo XIX al XX. Estudió en Barcelona, donde fue ayudante del dibujante José Luis Pellicer. Colaboró desde muy joven en publicaciones barcelonesas, desde "La Esquella de la Torratxa", "La saeta", en las que queda clara su adscripción al modernismo, hasta "Mundial Magazine" y "Fémina", donde ya se empieza a vislumbrar una línea precubista. Su primera exposición tuvo lugar en Els Quatre Gats. Durante su estancia en Barcelona retrató al proletariado, aunque en 1900 viajó a París, donde colaboró con "La vie Illustrée", "Le frou-frou", entre otros. Expuso en las galerías barcelonesas Parés y Dalmau, la galería Vilches (Madrid), Georges Petit y Ritlinger (ambas en París). Hasta ese momento sus obras mostraban una mirada satírica y realista sobre burgueses, esnobs y prostitutas, aunque esta mirada cambió en 1907, cuando inició una etapa más estilizada, menos realista y menos irónica, sobre todo por su inicio en el mundo de la moda, en el que Gosé buscaba marcar tendencia entre la sociedad femenina. Su paso por París fue el punto de inflexión en su vida y en su producción artística, ya que la capital francesa fue el lugar donde amplió sus conocimientos, convirtiéndose en un artista de éxito que conseguiría interesantes encargos como ilustrador en las mejores revistas satíricas. En 1910 comenzó a colaborar con revistas alemanas como "Ulk". En 1914 estalló la Primera Guerra Mundial, circunstancia que, unida a los graves problemas de salud que padecía, le privó del elegante ambiente parisino, trasladándose a la ciudad de Vichy, famosa por sus balnearios. Poco después, Gosé se trasladó de nuevo a Barcelona, pasando los últimos días de su vida en Lleida. Entre las exposiciones póstumas destacan la del Círculo Artístico, el mismo año de su muerte, la retrospectiva de la Galería Rovira (1970) y la de la Fundación La Caixa (1984). Está representado en los Museos de Arte Moderno de Barcelona y Madrid, entre otros.

Valorac. 1 500 - 1 600 EUR

Lote 36 - FRANCISCO JAVIER GOSÉ ROVIRA (Alcalá de Henares, 1876 - Lleida, 1915). "Dama con perro", 1913. Cartel litográfico. Estampes D'Art Devambez. Con sello del editor. Firmado en la plancha. Obra catalogada en "Xavier Gosé, Il.lustrador de la modernitat", Ed. Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC), 2015, Barcelona, p. 18. Colección: Monografies (Museu Nacional d'Art de Catalunya), 3. Presenta algunos desperfectos, arrugas y faltas laterales del papel. Medidas: 50 x 35 cm. El estilo de Javier Gosé oscila entre el modernismo y el art-decó francés y refleja la vida de la sociedad parisina. Inspirado en la vida mundana de los cafés-concierto, las prostitutas, las carreras de caballos, los deportistas y el conocido Montmartre, su estilo refleja la finura y delicadeza de la sociedad francesa de la época, aunque no está exento de cierta picaresca característica del París despreocupado. Francisco Javier Gosé fue un dibujante y pintor esencial en el mundo gráfico y de la moda en la transición del siglo XIX al XX. Estudió en Barcelona, donde fue ayudante del dibujante José Luis Pellicer. Colaboró desde muy joven en publicaciones barcelonesas, desde "La Esquella de la Torratxa", "La saeta", en las que queda clara su adscripción al modernismo, hasta "Mundial Magazine" y "Fémina", donde ya se empieza a vislumbrar una línea precubista. Su primera exposición tuvo lugar en Els Quatre Gats. Durante su estancia en Barcelona retrató al proletariado, aunque en 1900 viajó a París, donde colaboró con "La vie Illustrée", "Le frou-frou", entre otros. Expuso en las galerías barcelonesas Parés y Dalmau, la galería Vilches (Madrid), Georges Petit y Ritlinger (ambas en París). Hasta ese momento sus obras mostraban una mirada satírica y realista sobre burgueses, esnobs y prostitutas, aunque esta mirada cambió en 1907, cuando inició una etapa más estilizada, menos realista y menos irónica, sobre todo por su inicio en el mundo de la moda, en el que Gosé buscaba marcar tendencia entre la sociedad femenina. Su paso por París fue el punto de inflexión en su vida y en su producción artística, ya que la capital francesa fue el lugar donde amplió sus conocimientos, convirtiéndose en un artista de éxito que conseguiría interesantes encargos como ilustrador en las mejores revistas satíricas. En 1910 comenzó a colaborar con revistas alemanas como "Ulk". En 1914 estalló la Primera Guerra Mundial, circunstancia que, unida a los graves problemas de salud que padecía, le privó del elegante ambiente parisino, trasladándose a la ciudad de Vichy, famosa por sus balnearios. Poco después, Gosé se trasladó de nuevo a Barcelona, pasando los últimos días de su vida en Lleida. Entre las exposiciones póstumas destacan la del Círculo Artístico, el mismo año de su muerte, la retrospectiva de la Galería Rovira (1970) y la de la Fundación La Caixa (1984). Está representado en los Museos de Arte Moderno de Barcelona y Madrid, entre otros.

Valorac. 2 800 - 3 000 EUR

Lote 37 - LUIS GRANER ARRUFÍ (Barcelona, 1863 - 1929). "El castaño". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Presenta craqueladuras. Medidas: 50 x 36 cm; 68 x 56 cm (marco). Luis Graner se formó en la Escuela de La Lonja de Barcelona, donde fue discípulo de Benito Mercadé y Antonio Caba, y en 1886 se traslada a París gracias a una beca de la Diputación de Barcelona. Durante sus cinco años en la capital francesa obtiene dos terceras medallas en las Exposiciones Universales de Barcelona (1888) y París (1889). Instalado de nuevo en Barcelona en 1891, continuó participando en importantes exposiciones internacionales, como las de Berlín (1891), Munich (1892), Dusseldorf (1904). También envió obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, obteniendo una tercera medalla en 1895 y 1897, una segunda en 1901 y una condecoración en 1904. Ese mismo año Graner creó la Sala Mercè, diseñada por Gaudí, donde organizaba sus "visiones musicales", espectáculos que combinaban la poesía con la música, la escenografía con el cine. Finalmente, arruinado, se trasladó a América. Llegó a Nueva York en 1910, y ese mismo año celebró una exposición individual en la Edward Brandus Gallery. El éxito de esta exposición le valió a Graner importantes encargos, entre ellos el retrato del magnate Carlos B. Alexander. Tras pasar cinco meses en Barcelona, Graner partió de nuevo hacia Nueva York, siendo su destino final La Habana. En 1911 abandonó Cuba rumbo a Nueva Orleans, y poco después ya se encontraba en San Francisco. Allí inauguró una exposición de setenta y seis cuadros, celebrada en el California Club, que fue la mayor muestra individual celebrada hasta la fecha en la ciudad. Durante este mismo periodo pintó varios tapices para el director de cine David W. Griffith. Antes de finalizar el año está de vuelta en Nueva York, donde vuelve a exponer individualmente con gran éxito. Sigue pintando retratos de importantes figuras nacionales, y en 1912 celebra otra exposición clave, esta vez en The Ralston Galleries (Nueva York). En los años siguientes continuará con su brillante carrera internacional en Brasil y Chile, para finalmente regresar a Estados Unidos, donde permanecerá debido al estallido de la Gran Guerra, pasando por Nueva York, Nueva Orleans, Chicago y otras ciudades, exponiendo siempre su pintura con gran éxito. En los años veinte viajó a Argentina, Uruguay y Cuba, y finalmente en Nueva Orleans quedó postrado por una grave enfermedad que dañó irreparablemente su mente, transformando también su obra, que perdió la fuerza y trascendencia de sus etapas anteriores. Arruinado y enfermo, incapaz de encontrar mercado para sus cuadros, regresó finalmente a Barcelona en 1928, poco antes de su muerte, tras dieciocho años de gloria que acabaron en penuria. Ese mismo año expuso individualmente en el Hotel Ritz y en las Galerías Layetanas de Barcelona, y a finales de año realizó una importante retrospectiva en la Sala Parés, antes de fallecer definitivamente en mayo de 1929 a los sesenta y seis años. Su obra está presente en el Museo del Prado, el MACBA de Barcelona, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, la Hispanic Society de Nueva York y el Museo Balaguer de Vilanova i la Geltrú, entre otros, así como en importantes colecciones privadas catalanas.

Valorac. 2 200 - 2 500 EUR

Lote 38 - Atribuido a THÉODORE ROUSSEAU (Francia, 1812 - 1867). "La siega". Óleo sobre lienzo. Etiqueta firmada al dorso. Medidas: 28 x 41 cm; 42,5 x 56 cm (marco). Un segador lleva un haz de heno a la espalda y se dirige hacia un carro ya lleno de paja prensada. Un buey está parado en medio del camino y otro busca sombra bajo las montañas de heno. Detrás de las figuras, un amplio cielo azul está salpicado de tenues nubes. La pincelada es vibrante y el trazo grueso, dando lugar a un lenguaje impresionista comparable al de la Escuela de Barbizon. Uno de los principales representantes de la Escuela de Barbizon, caracterizada por una visión realista del paisaje, Théodore Rousseau compartió las dificultades de los pintores románticos de 1830 para conseguir un lugar para sus cuadros en el Salón de París. Tras ser rechazado en el Salón de 1836, se retiró a Barbizon y formó, junto con otros artistas como Corot o Millet, la llamada Escuela de Barbizon. Allí cultivó la pintura de paisajes al aire libre, con un tratamiento de la naturaleza cercano al de los maestros holandeses del siglo XVII, especialmente centrado en los fenómenos atmosféricos y naturales. No fue hasta 1848 cuando su obra se presentó adecuadamente al público, al ser admitido finalmente en el Salón de París. Ese mismo año se instaló definitivamente en Barbizon, donde pasaría el resto de su vida. En la Exposición Universal de 1853, donde se reunieron todos los cuadros de Rousseau rechazados anteriormente y se le dedicó una sala, fue reconocido por el público y la crítica como uno de los mejores participantes en la muestra. Sus obras se caracterizan por su carácter sobrio, con un aire de exquisita melancolía que atrae poderosamente al espectador. Actualmente, Rousseau está representado en los principales museos del mundo, como el Louvre y el Orsay de París, el Hermitage de San Petersburgo, la National Gallery de Londres, el Rijksmuseum de Amsterdam, la Frick Collection de Nueva York, el Thyssen-Bornemisza de Madrid y el Albertina de Viena, entre muchos otros.

Valorac. 1 800 - 2 000 EUR

Lote 40 - FILIPPO TOMMASO MARINETTI (Alejandría, Egipto, 1876-Bellagio, Como, 1944). "Futurismo contra pasaticismo". Londres, 1914. Técnica mixta sobre papel. Firmado y fechado. Con dibujo al dorso de JOSÉ CAPUZ (1884-1964). Medidas: 21 x 18 cm. Composición gráfica de Marinetti, dibujo original del fundador del futurismo (tal vez un boceto para un cartel), en cuyo reverso aparece un dibujo del escultor José Capuz. Fechado en Londres, significativamente, el año del estallido de la Primera Guerra Mundial. Conocido por ser el fundador del movimiento futurista, la primera vanguardia italiana del siglo XIX, que sirvió de base al fascismo de Mussolini. Marinetti fue un poeta, escritor, ideólogo, dramaturgo y editor italiano. Procedía de la comunidad artística y literaria utópica y simbolista Abbaye de Créteil, de la que fue miembro entre 1907 y 1908. Tanto como poeta como político e ideólogo, estuvo fuertemente influido por Friedrich Nietzsche, Sorel, Giuseppe Mazzini y por el poeta Gabriele D'Annunzio, siendo autor del Manifiesto Futurista, redactado y publicado en 1909, y también del Manifiesto Fascista, redactado y publicado en 1919. Considerado el padre del fascismo italiano, colaboró estrechamente con Mussolini e inspiró en gran medida a este último. En 1942 combatió en territorio soviético como parte de una fuerza expedicionaria italiana, siendo herido en Stalingrado. Su poema más famoso es "Las 5 estrellas". Principalmente escultor, aunque también pintor y dibujante, José Capuz se formó en las Reales Academias de Bellas Artes de San Carlos de Valencia y San Fernando de Madrid. Amplió sus estudios en el taller del escultor Félix Granda y, gracias a una beca, realizó un largo viaje que le llevó a Roma, Florencia, Nápoles y París. Académico de San Fernando desde 1927, actualmente está representado en el Museo Provincial de Jaén y en las colecciones de diversas hermandades, así como en lugares públicos de varias ciudades españolas.

Valorac. 2 000 - 2 500 EUR

Lote 41 - Círculo de JOHAN BARTHOLD JONGKIND (Lattrop, 1819-alrededor de Grenoble, 1891). "Puesta de sol". Óleo sobre tabla. Medidas: 25,5 x 33,5 cm; 34 x 41,5 cm (marco). Cuadro de tema costero retratado en la hora mágica de la puesta de sol. El disco dorado desaparece tras la línea del horizonte y se despide con una sinfonía ígnea. En la orilla, cabañas y casas precarias se perfilan frente al mar. El cuadro se inspira en las marinas nocturnas de Johan Barthold Jongkind, resueltas en lenguaje preimpresionista. Johan Barthold Jongkind fue un pintor y grabador holandés considerado uno de los precursores del impresionismo. Estudió arte en la Escuela de La Haya bajo la tutela del pintor romántico Andreas Schelfhout, y pintó sus primeros cuadros al estilo de la pintura tradicional flamenca. En 1846 se instaló en París y fue alumno de Eugène Isabey hasta que, en 1855, se vio obligado a regresar a Holanda por problemas económicos y se instaló en Rotterdam. Regresó a París en abril de 1860, y a partir de entonces manifestó su atracción por la marina durante sus estancias en la costa normanda, en Le Havre, Sainte-Adresse (véase la acuarela), Honfleur y Trouville. Allí conoció a Boudin y sobre todo a Monet, quien reconoció sinceramente su deuda con el artista holandés: "a él debo la educación definitiva de mis ojos". Participó en el Salon des Refusés de 1863 con el cuadro Ruinas del castillo de Rosemont, junto al controvertido cuadro de Manet Le déjeuner sur l'herbe (Almuerzo sobre la hierba); ambos se encuentran hoy en el museo de Orsay. Sus paisajes de Normandía, de los canales y playas del Mar del Norte, de las orillas del Sena, de París, y más tarde de Grenoble, traducen en tonos finamente matizados la luz y la atmósfera de esos lugares. Al contrario que los impresionistas, pintaba sus cuadros en el estudio tras los bocetos y acuarelas que dibujaba en el exterior. A veces repetía el mismo tema bajo distintas luces o en diferentes estaciones (una idea típicamente impresionista que más tarde adoptó su amigo Monet). Llevó una vida desordenada y finalmente, con problemas psíquicos (melancolía, paranoia) y alcohólico, murió en el manicomio de Saint-Égrève, cerca de Grenoble. Según Monet, la obra de Jongkind, junto con la de Corot y Boudin, es el origen del Impresionismo.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 42 - MANUEL HUMBERT I ESTEVE (Barcelona, 1890 - 1975). "Paisaje. 1932. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Perteneció a la antigua colección de Raimond Maragall. Publicado en "33 peintres catalans", de Joan Merlí, 1937, p. 104. Medidas: 38,5 x 55,5 cm. El estilo de Manuel Humbert, de un lirismo contenido y delicado, se expresa de manera singular en este paisaje en el que las casas y los jardines se integran en la naturaleza. Humbert se formó en Barcelona en la Escuela Llotja, y también fue alumno de Francesc d'Assís Galí en su academia. Se dio a conocer en el semanario satírico "Papitu", bajo el seudónimo de Isaac, y también colaboró con la revista "Picarol". En 1915 realizó su primera exposición individual en las Galerías Layetanas de Barcelona. Entre 1909 y 1939 vivió entre Barcelona y París, donde entabló amistad con Picasso, Modigliani, Soutine y Kisling. Miembro fundador del grupo Les Arts y els Artistes, en 1929 colaboró en la decoración del Palacio Nacional de Montjuic (actual Museo Nacional de Arte de Cataluña). Amigo de X. Nogués y J. Aragay, se incorporó a la vertiente realista del novecentismo, y participó en los Salones de los Once de 1944 y 1953, además de exponer individualmente en la Sala Parés desde 1927. Trabajó indistintamente en sanguina, grabado, gouache y óleo. Expuso en Barcelona, Madrid y París, y en 1934 obtuvo el Premio Nonell. Asimismo, en 1953 obtuvo el Gran Premio de Pintura al Agua de la Bienal Hispanoamericana de La Habana. Manuel Humbert es pintor de mujeres en interiores de matizada iluminación, vestidas, semivestidas o desnudas, aunque siempre mostrando un cierto pudor, revelador del carácter pulcro y comedido del autor. Actualmente está representado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, entre otros, así como en diversas colecciones privadas.

Valorac. 2 200 - 2 500 EUR

Lote 43 - BENJAMIN PALENCIA (Barrax, Albacete, 1894 - Madrid, 1980). "Época" años 40. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Obra verificada por Ramón Palencia. Medidas: 31 x 45 cm; 60 x 75 cm (marco). En los años cuarenta, la pintura de Benjamín Palencia alcanza su plena madurez cuando sabe sustraerse a los dogmas cubistas para volver a una figuración de su propia cultura. Capta entonces la rudeza de la vida campesina durante la posguerra, pueblos castellanos, rincones que transmiten un halo despojado y áspero, aunque impregnado de sentimiento. Fundador de la Escuela de Vallecas junto al escultor Alberto Sánchez, Benjamín Palencia fue uno de los más importantes herederos de la poética del paisaje castellano propia de la Generación del 98. Con sólo quince años, Palencia abandona su ciudad natal y se instala en Madrid para desarrollar su formación a través de sus frecuentes visitas al Museo del Prado, ya que siempre rechazó las enseñanzas oficiales de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. En 1925 participa en la Exposición de Artistas Ibéricos celebrada en el Palacio del Retiro de Madrid, y en 1926 viaja por primera vez a París. Allí conoce a Picasso, Gargallo y Miró y entra en contacto con la técnica del collage, que más tarde aplicará a su obra, incorporando nuevos materiales como la arena o la ceniza. Será a partir de esta estancia parisina cuando la obra de Palencia adquiera un tono surrealista, evidenciado en una cada vez mayor libertad expresiva que alcanzará su plenitud en su periodo de madurez. A su regreso a Madrid funda la Escuela de Vallecas (1927), y debuta individualmente en el Museo de Arte Moderno (1928). Palencia irá abandonando los bodegones para retomar el paisaje castellano, plasmándolo a través de una magnífica síntesis entre tradición y vanguardia. Esta personal estética del paisaje alcanzará su culminación en la Escuela de Vallecas y, tras una brillante incursión surrealista a principios de los años treinta, al estallar la Guerra Civil Palencia permanece en Madrid, sufriendo como sus compañeros de generación un periodo de profunda crisis. Tras la guerra, entre 1939 y 1940 su pintura da un giro radical; abandona las influencias cubistas y abstractas e incluso los aspectos surrealistas, en busca de un arte de fuerte impacto cromático, vinculado al fauvismo. Centrado en su labor como paisajista, en 1942 Palencia retoma la experiencia de la Escuela de Vallecas junto a los jóvenes pintores Álvar Delgado, Carlos Pascual de Lara, Gregorio del Olmo, Enrique Núñez Casteló y Francisco San José. Su obra recogerá imágenes del campo castellano y de sus campesinos y animales; su pintura se convierte en testimonio de lo rudo, lo tosco y lo rural, de la sutil expresividad de la sobriedad castellana. Ya plenamente consolidado, en 1943 obtiene la primera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes y en 1944 es seleccionado para participar en el Salón de los Once de Eugenio D'Ors en Madrid. Al año siguiente se le concede la medalla de honor de la Exposición Nacional, aunque renuncia a ella para facilitar su concesión a José Gutiérrez Solana, fallecido pocos días antes del fallo del jurado. A partir de esta década, sus exposiciones en centros de arte y galerías como el Círculo de Bellas Artes de Madrid o la galería Estilo, y en 1946 vuelve a ser seleccionado para el Salón de los Once. También comenzó a participar en exposiciones internacionales, como las de Arte Español Contemporáneo celebradas en 1947 en Buenos Aires, Río de Janeiro y Sao Paulo. También obtuvo el Gran Premio de la Bienal Hispanoamericana de Madrid (1951) y expuso en el Museo de Arte Moderno de París (1951), la Bienal de Venecia (1956), el Palacio de la Princesa de Paravinci de Roma (1965), etc. En 1973 fue nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, y en 1978 ingresó en la Academia de San Jorge de Barcelona. Ese mismo año se le concedió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes. Benjamín Palencia está representado actualmente en el Museo Nacional Reina Sofía, en el Patio Herreriano de Valladolid y en los Museos de Bellas Artes de Valencia y Albacete, entre otros muchos. Obra verificada de Ramón Palencia.

Valorac. 12 000 - 14 000 EUR

Lote 49 - ROMÁN RIBERA CIRERA (Barcelona, 1848 - 1935). "Escena de casacón", ca. 1890. Óleo sobre lienzo. Firmado en el margen inferior. Medidas: 94 x 108 cm; 120 x 1333 cm (marco). Escena flamenca de interior, ambientada en una taberna holandesa o belga del siglo XVIII. En este tipo de pinturas de casacón, Román Ribera exhibió una notable habilidad para plamar con verismo y sabor literario los ropajes y los tipos humanos. El sabio uso de las veladuras en los vasos de cristal y en la suavidad de las telas se combina con la caracterización naturalista de los rostros y las actitudes. Una joven criada con bonete y dos hombres con trajes tradicionales, uno de ellos tamborilero, ocupan este interior espartano, trabajado con luces cálidas y acogedoras. Pintor catalán, Román Ribera estudió dibujo en la Escuela de La Lonja de Barcelona, y pintura en la academia de Pere Borrell. Amplió sus estudios en Roma, entre 1873 y 1976, y viajó y expuso en Londres. En la capital italiana asistió a la Academia Chigi y se dedicó a la pintura, pero evitando el contagio del manierismo academicista de la escuela romana. En 1877 marchó a París, bajo la dirección del marchante Adolphe Goupil, que había adquirido los derechos de reproducción de toda su obra. Allí prosigue su formación, esta vez estudiando directamente escenas de la vida callejera parisina. Un año más tarde participa en la Exposición Universal de París, donde obtiene un éxito decisivo gracias a las tres obras que presenta. En 1881 participó en la Exposición Nacional de Madrid precisamente con la citada obra de ambientación barroca, y en 1883 fue galardonado con la Encomienda de Isabel la Católica. Tras doce años en París regresó a Barcelona, donde ya había expuesto en el Centro de Acuarelistas (1885) y en la recién inaugurada Sala Parés. Posteriormente expuso en la Asociación Artística y Literaria y en las salas Parés y Rovira, así como en la Exposición Universal de 1888 y en la Exposición de Bellas Artes de 1894, obteniendo un gran éxito de crítica y público, ganándose pronto el favor de la adinerada burguesía catalana. En 1893 presentó dos cuadros a la Exposición organizada por el Ateneo de Barcelona: "Inocencia" e "Incógnitca". Individualmente, Cirera expuso con regularidad en la sala Rovira y, como colectivo, fue miembro de la Sociedad Artística y Literaria de Cataluña. Formó parte de varios jurados oficiales, y también de la Junta de Museos de Barcelona, en 1901. En 1915 fue nombrado Miembro de Mérito del Círculo Artístico de Barcelona. A su regreso a España, Ribera continuó retratando la vida de las clases altas, el lujo de sus casas, la riqueza de sus vestidos de fiesta, etc., convirtiéndose en un fiel retratista de la alta burguesía catalana de la Restauración, como ya lo había sido de la burguesía francesa de la III República. Trabajó principalmente en Barcelona, pero también viajó a Madrid y allí realizó exposiciones de su obra. Actualmente, su obra se conserva en el MACBA de Barcelona, el Museu d'Art de Girona, el Museu de Montserrat, la Biblioteca Víctor Balaguer y en diversas colecciones privadas importantes.

Valorac. 4 000 - 5 000 EUR

Lote 52 - JOSEP LLIMONA BRUGUERA (Barcelona, 1864 - 1934). "Modèstia", 1891. Estuco policromado. Firmado. Estampado Esteva & Cia, Barcelona. Obra catalogada en "Una passejada per l'obra de Josep Llimona, 150 anys", MEAM, 2015, p. 104. Medidas: 42 x 34 x 15 cm. La escultura "Modèstia" evidencia las características más personales de Josep Llimona: el idealismo naturalista, la inclinación hacia el lado amable de la realidad y, sobre todo, una gran delicadeza y belleza en sus figuras femeninas, siempre esbeltas e inocentes, envueltas por un velo de misterio. Josep Limona es recordado como el escultor catalán más importante del modernismo. Formado en la Escuela Llotja de Barcelona, obtuvo la pensión para ir a Roma en 1880. Durante su estancia en Italia recibió la influencia de la escultura renacentista florentina. Con las obras que envió desde allí obtuvo premios (medalla de oro en la Exposición Universal de Barcelona de 1888), así como una gran reputación. Con su hermano Joan fundó el Círculo Artístico de Sant Lluc, una asociación artística catalana de carácter religioso (los dos hermanos eran profundamente creyentes). Hacia mediados de los 90 su estilo ya deriva hacia el modernismo pleno. Recibió el premio de honor en la Exposición Internacional de Bellas Artes celebrada en 1907 en Barcelona. A partir de 1900 se centró en sus famosos desnudos femeninos, y en 1914 creó, en colaboración con Gaudí, su impresionante "Cristo Resucitado". Su genio artístico también se manifestó en grandes monumentos públicos, como la estatua ecuestre de San Jordi en el parque de Montjuic de Barcelona, así como en obras de imaginería funeraria, como los panteones que creó para varios cementerios. Además de exponer en Barcelona y otras ciudades catalanas, expuso en Madrid, Bruselas, París, Buenos Aires y Rosario (Argentina). Fue presidente de la Junta de Museos de Barcelona entre 1918 y 1924, y de nuevo desde 1931 hasta su muerte en 1934. A lo largo de su vida recibió numerosas condecoraciones, entre ellas las otorgadas por los gobiernos de Francia e Italia. También recibió la Medalla de Oro de la Ciudad de Barcelona en 1932, en reconocimiento a su extraordinaria labor en el desarrollo de la actividad museística. La obra de Llimona se conserva en el Monasterio de Montserrat, el Museo Nacional de Arte de Cataluña y el Museo Reina Sofía, entre otros.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 53 - Escuela italiana; siguiendo los modelos de GIUSEPPE MAZZOLINI (Italia, 1806-1876), siglo XIX. "Cuidados maternales", 1865. Óleo sobre lienzo. Revestido. Presenta ligeros desperfectos, repintes y restauraciones en la superficie pictórica y daños en el bastidor. Medidas: 100 x 73 cm; 119 x 93 cm (marco). El pintor académico Giuseppe Mazzolini se inspiró en numerosas ocasiones en los maestros del Renacimiento. Copiar a los clásicos era un ejercicio frecuente entre los pintores del neoclasicismo. A menudo para venderlos a los viajeros del extranjero. Este cuadro, a su vez, está realizado por un copista. Los futuros artistas tenían la oportunidad de aprender copiando las obras de los grandes maestros. A pesar de ser una práctica muy habitual durante el siglo XIX y principios del XX, hoy en día el Museo del Prado es el único museo de la capital que admite copistas de forma reducida para que no interrumpan el tránsito de los visitantes. La maternidad fue un tema recurrente durante el siglo XIX, que se fundamentaba en cierto modo en una religiosidad basada en la figura de la Virgen con el Niño. La representación de la maternidad busca un tema de carácter amable y dulce, en la mayoría de los casos en un ambiente cálido, donde se aprecia la alegría del hogar, como es el caso de este cuadro donde el tratamiento de la luz y el color nos trasladan al ambiente mencionado. El cuadro destaca por su acabado realista que se aprecia tanto en los rasgos de los protagonistas, como en la indumentaria que inscribe la pieza en una corriente estética de carácter costumbrista. Presenta ligeros desperfectos, repintes y restauraciones en la superficie pictórica y daños en el marco.

Valorac. 1 800 - 2 000 EUR

Lote 54 - Escuela española, según MANUEL DOMÍNGUEZ SÁNCHEZ (Madrid, 1840- 1906); siglo XIX. "Séneca, después de abrirse las venas". Óleo sobre tabla. Medidas: 23,5 x 36 cm; 40 x 51 cm (marco). Esta obra sigue los modelos del cuadro de Domínguez Sánchez, que se encuentra en la colección del Museo del Prado. El Museo describe así la pieza "Manuel Domínguez eligió un argumento de la antigua Roma, aunque vinculado en gran medida al mundo hispánico al tener como protagonista al filósofo cordobés Lucio Anneo Séneca (4-65 d.C.), maestro del emperador Nerón, quien ordenó su muerte acusándole de haber participado en la conspiración de Pisón contra él. Burlándose de la ejecución de la orden imperial como un desprecio a Nerón, Séneca decidió quitarse la vida. Para ello, se abrió las venas y se metió en una bañera, aunque finalmente murió al inhalar los vapores del baño. El éxito que este cuadro tuvo en su época residió fundamentalmente en la modernidad de la severa monumentalidad de su composición, así como en su elegante sencillez en la disposición de las figuras, de rasgos clásicos, ubicadas en un amplio espacio interior, de rica y grandiosa arquitectura". Las figuras que lo componen, armonía que también se aprecia en los rostros, serenos, en las actitudes y en la paleta elegida por el pintor, muy viva, pero sin excesivos sellos en el colorido ni en las fuentes de luz utilizadas. El tema histórico del cuadro está ambientado en un pasado glorioso relacionado con la historia del país del pintor, España, y puede relacionarse con el Historicismo pictórico del siglo XIX, principal corriente de la época, vinculada a las Academias de Bellas Artes. El término "historicismo" (Historismus) fue acuñado por el filósofo alemán Karl Wilhelm Friedrich Schlegel. Con el paso del tiempo, lo que es el historicismo y cómo se practica ha adquirido significados diferentes y divergentes. Aparecen elementos del historicismo en los escritos del ensayista francés Michel de Montaigne (1533-1592) y del filósofo italiano GB Vico (1668-1744), y se desarrollaron más plenamente con la dialéctica de Georg Wilhelm Friedrich Hegel (1770-1831), influyente en la Europa del siglo XIX.

Valorac. 1 000 - 1 200 EUR

Lote 55 - Escuela catalana; siglo XIX. "Paisaje". Óleo sobre lienzo. Revestido. Medidas: 133 x 228 cm. La obra que aquí se presenta muestra un colorido paisaje en el que se funden el costumbrismo y la pintura de paisaje. Al intenso color azul predominante en toda la obra se unen los ocres y verdes del lugar, hechos a base de manchas de color que dan sensación de frescor y humedad. Se configura así un paisaje propio de los días de primavera, donde la brisa peina los árboles y se dispersa en el horizonte. Desde que a mediados del siglo XIX el paisajismo catalán se desarrolló como un género plenamente autónomo, se inició una etapa que sería reconocida como una verdadera edad de oro en la renovación de un tema que hasta entonces había quedado relegado a un segundo plano como mero acompañamiento de los grandes temas mitológicos y bíblicos. Experimentando con las nuevas corrientes artísticas surgidas a lo largo de los siglos XIX y XX, la pintura de paisaje se desarrolló bajo una continua evolución, cuya progresiva ruptura con los convencionalismos academicistas la condujo hacia la libertad creativa de la llamada Modernidad. La influencia francesa unida a la demanda de la nueva burguesía catalana, que encontraba en el coleccionismo de arte un signo de prestigio para reafirmar su nuevo estatus social, propició la aparición del realismo en Cataluña con un auge de la pintura de paisaje. La estricta observación de la realidad y su expresión naturalista del mundo circundante fue importada por Martí Alsina a raíz de sus viajes a París, ciudad que le brindó la oportunidad de conocer de primera mano la obra de Courbet y de los paisajistas de la Escuela de Barbizon. Tras este primer acercamiento a las corrientes europeas, veremos como a partir de los años 70 surgirá una concepción más espiritual del paisaje, que se consolidará con la llegada del simbolismo. Esta corriente encontró en la obra de Modest Urgell su principal precursor, introduciendo en sus paisajes una mirada emotiva y melancólica.

Valorac. 2 500 - 3 000 EUR

Lote 58 - JOAQUÍN PEINADO (Ronda, Málaga, 1898 - París, 1975). "Retrato femenino", 1946. Dibujo a lápiz sobre papel. Firmado y fechado. Medidas: 31,5 x 25 cm; 67 x 58,5 cm (marco). Joaquín Ruiz-Peinado Vallejo fue un pintor cubista, sucesor de Cézanne e hijo espiritual de Picasso, fue uno de los más destacados representantes de la Escuela Española de París. Ingresó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid en 1918, y durante los años siguientes se convirtió en discípulo de Cecilio Plá y Julio Romero de Torres, y fue becado durante tres años en el Monasterio de Santa María de El Paular, obteniendo el Premio de Pintura de El Paular en 1922. En 1923, una vez finalizados sus estudios, marchó a París, donde se instaló definitivamente. Allí asistió a las clases impartidas en las academias Ranson, Colarossi y La Grande Chaumière, al tiempo que se interesaba por la pintura cubista, estética que personalizaría y mantendría en sus obras. Además, en 1924 expuso en los Salones des Indépendants, Surindépendants y d'Automne. Sin embargo, desde la ciudad del Sena continuó formando parte de la vida artística española, participando en la mítica Primera Exposición de la Sociedad de Artistas Ibéricos en 1925, e ilustrando las revistas "Litoral", "Gallo" y "La Gaceta Literaria", así como "La flor de California" (1928) de José María Hinojosa. Además, en 1926 ganó el Premio de Pintura de la Diputación de Málaga. Tres años más tarde, en 1929, participó en dos importantes exposiciones de arte de vanguardia en España: la Exposición de Pinturas y Esculturas de Españoles Residentes en París, en el Jardín Botánico de Madrid, y la Exposición Regional de Arte Moderno, en la Casa de los Tiros de Granada. También mantuvo relación con las artes escénicas, como otros artistas de la época, participando en las películas "Un perro andaluz" (1929) y "La edad de oro" (1930), de su amigo Buñuel, o como escenógrafo y dibujante de "Carmen", de Feyder (1925). Asimismo, en 1926 participó en la representación de "El retablo de Maese Pedro", de Falla, en Amsterdam, junto a Buñuel, Cossío, Viñes y Ángeles Ortiz. Con el tiempo, su trayectoria artística le llevaría a ocupar un lugar destacado dentro de la Escuela de París; sería director de la Sección de Pintura de la Unión de Intelectuales Españoles y más tarde vicepresidente de la misma, y la UNESCO le nombraría delegado de la Sección de Pintores Españoles de la Escuela de París. Asimismo, en 1946 fue uno de los organizadores de la exposición "Arte de la España Republicana. Artistas españoles de la Escuela de París", celebrada en Praga y, debido a su enorme éxito, más tarde también en Brno. A partir de esa fecha, fueron frecuentes sus exposiciones internacionales, tanto individuales como colectivas, agrupándose dentro del mejor arte francés de la época. Sin embargo, no fue hasta 1969 cuando se celebró en España una retrospectiva de su obra; organizada por la Dirección General de Bellas Artes y celebrada en el Museo de Arte Español Contemporáneo de Madrid, esta exposición consagró su figura en nuestro país. De hecho, ese mismo año fue nombrado miembro de la Real Academia de San Telmo de Málaga. En la actualidad su obra está ampliamente representada en el museo que lleva su nombre en Ronda, así como en la colección Unicaja y en otras muchas colecciones públicas y privadas.

Valorac. 2 000 - 2 500 EUR

Lote 60 - ELISEO MEIFRÈN ROIG (Barcelona, 1859 - 1940). "Paisaje. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 34 x 45 cm; 52 x 63 cm (marco). Un tholos de mármol blanco se perfila junto a un mar azul celeste bordeado de espuma, que se abre hacia el horizonte, dejando en primer plano una exuberante pradera. Se trata de un paisaje pintado con pinceladas vibrantes y trazos rápidos, característicos de la obra de Meifrén. Pintor de paisajes y marinas, Eliseo Meifrèn está considerado como uno de los primeros introductores del movimiento impresionista en Cataluña. Inició su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, donde fue discípulo de Antonio Caba y Ramón Martí Alsina, con quienes comenzó a crear paisajes románticos de estilo académico. Tras finalizar sus estudios, en 1878, se trasladó a París para ampliar sus conocimientos artísticos, y allí conoció de primera mano la pintura "à plen air", que le influiría poderosamente en sus paisajes parisinos de aquellos años. Asimismo, en París coincidió con el inicio público del impresionismo. Un año más tarde realizó un viaje a Italia, durante el cual visitó Nápoles, Florencia, Venecia y Roma; allí entró en contacto con el círculo de artistas catalanes formado por Ramón Tusquets, Arcadio Mas i Fondevila, Enrique Serra, Antonio Fabrés y Joan Llimona, entre otros. Ese mismo año, 1879, participó en la Exposición Regional de Valencia, y obtuvo una medalla de oro. De vuelta a Barcelona, en 1880 debutó individualmente en la Sala Parés de Barcelona, donde seguiría exponiendo regularmente a partir de entonces. Durante estos años forma parte del grupo modernista y frecuenta Els Quatre Gats. En 1883 regresó a París, donde realizó numerosos dibujos y acuarelas con vistas de la ciudad y sus cafés, que le valieron una calurosa acogida por parte de la crítica y el público franceses. A finales de los ochenta regresó a Barcelona y continuó exponiendo en la Sala Parés, así como en el Centro de Acuarelistas. Además, en 1888 fue miembro del jurado de la Exposición Universal celebrada en Barcelona. En 1890 regresó por tercera vez a la capital francesa, donde participó en el Salon des Beaux-Arts y en el Salon des Indépendants de 1892, junto con Ramon Casas y Santiago Rusiñol, artistas con los que un año antes había formado el grupo pictórico de Sitges. En los años siguientes Meifrèn enviaría sus obras a numerosas exposiciones y certámenes oficiales, entre ellos las Exposiciones Nacionales de Madrid y Barcelona, y obtuvo la tercera medalla en la Universal de París de 1889 y 1899, medalla de plata en la Universal de Bruselas de 1910, gran premio en la Universal de Buenos Aires del mismo año, medalla de honor en la Internacional de San Francisco de 1915 y gran premio en la Internacional de San Diego del año siguiente. También ganó el Premio Nonell de Barcelona en 1935. En 1952, el Ayuntamiento de Barcelona le dedicó una exposición retrospectiva, celebrada en el Palacio de la Virreina. Sus paisajes iniciales, caracterizados por una concepción académica y romántica, evolucionarían posteriormente hacia un lenguaje impresionista; abandonando el preciosismo romano, la suya sería una técnica de pincelada suelta y paleta clara, en la que la concepción luminosa se acerca a presupuestos simbolistas, dentro de la órbita de Modesto Urgell. Actualmente está representado en el Museo del Prado, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el MACBA de Barcelona y el Thyssen-Bornemisza, entre otros muchos.

Valorac. 6 000 - 8 000 EUR

Lote 61 - CASIMIRO MARTÍNEZ TARRASSÓ (Sarrià, Barcelona, 1898 - Barcelona, 1980). "Familia gitana". Óleo sobre táblex. Firmado en la esquina superior izquierda. Medidas: 22 x 26,5 cm; 41,5 x 46,5 cm (marco). Conocido simplemente como Tarrassó, se formó en la Escuela de La Lonja de Barcelona. Completó sus estudios en París, donde conoció de primera mano las obras fauvistas que sacudían el panorama artístico parisino de la época. Esta influencia fauvista seguirá siendo palpable en su obra a lo largo de toda su vida en rasgos como el fuerte contraste cromático, la perspectiva elevada y un tanto exagerada, el absoluto desinterés por la figura humana, que sólo aparece esbozada como complemento del paisaje, y la representación de los árboles como electrizados, sometidos a tortuosas inclinaciones. Son estos rasgos formales los que dotan a sus obras de una vitalidad propia y reducen su vinculación con lo referencial a un mero pretexto. Tarrassó siguió la estela de los grandes paisajistas catalanes, centrándose especialmente en Joaquín Mir, aunque con una personalidad claramente diferenciada debido en parte al impacto que el fauvismo tuvo en su pensamiento artístico. Cultivó el bodegón y el paisaje catalán y mallorquín. Realizó su primera exposición en 1928, en las Galerías Layetanas de Barcelona. Desde entonces se sucedieron sus exposiciones en Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca y Bilbao. En 1935 visitó Mallorca por primera vez, y a partir de 1940 tuvo allí un estudio, concretamente en Palma, donde vivió largas temporadas y desarrolló la mayor parte de su producción artística. Después de la Guerra Civil, durante los años cuarenta, Tarrassó participó en varias Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en sus ediciones de 1942, 1943 y 1950, y realizó numerosas exposiciones personales en Barcelona, en galerías como Augusta, Layetanas, Ars, etc., entre ellas la que realizó de paisajes pirenaicos en 1948, y la de grandes lienzos de paisajes mallorquines que presentó en 1949. Aunque el paisaje fue siempre el centro de su producción, Tarrassó también realizó obras como la decoración mural de la iglesia de Santa Maria de Badalona. En Mallorca también llevó a cabo una singular empresa, plantar su caballete en las Cuevas de Campanet para captar las estalactitas y estalagmitas de sus cavidades pétreas, desarrollando una serie de obras que presentó en las Galerías Costa de Palma en octubre de 1948. A lo largo de su carrera Tarrassó fue galardonado con el Premio Pollença del I Certamen Internacional de Pintura en 1962; el Premio Santiago Rusiñol en 1972; y las medallas obtenidas en diversas ediciones de los Salones de Otoño de Palma de Mallorca: primer premio en 1967 y 1973, y premio honorífico en 1970. La obra de Tarrassó se caracteriza por la gran personalidad de su colorido. Su obsesión por el cromatismo determina una pintura profundamente sensorial, vitalista e intuitiva. En muchas de sus obras, el pintor se centra sobre todo en captar una imagen que escenifique la plenitud de la vida recreada y sin solución de continuidad, preocupándose más por ella que por las exigencias de la composición. Así, en sus paisajes las arquitecturas aparecen plenamente integradas en una naturaleza armoniosa, como simples manchas de color con límites indefinidos, o con límites definidos pero deformados. De este modo, Tarrassó sugiere la presencia humana y, al mismo tiempo, evita que el espectador la perciba como una intervención o una ruptura del conjunto natural. Por otra parte, las perspectivas, muy altas o muy bajas, combinadas con una combinación de colores contraídos, sin mezclar montaña y cielo, cielo y mar, proporcionan una sensación de profundidad, y a veces incluso de opresión, que lleva al espectador a concebir la escena como un todo autónomo, al margen de los detalles. Por otro lado, también cabe destacar a nivel formal su factura vigorosa, combinada con espátula gruesa, que remite a otro maestro paisajista catalán del que Tarrassó es deudor, Nicolás Raurich. Su obra se conserva actualmente en diversas colecciones privadas nacionales e internacionales, así como en el Museo y Fondo Artístico de Porreras (Mallorca) y en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma.

Valorac. 1 800 - 2 200 EUR

Lote 62 - JULIÁN GRAU SANTOS (Canfranc, Huesca, 1937). "Armario y flores", 1991. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Firmado, fechado y titulado al dorso. Medidas: 73 x 60 cm; 92 x 78 cm (marco). Hijo de Emilio Grau Sala y Ángeles Santos Torroella, se forma en Barcelona. En 1949 realiza varios viajes a París, donde tiene la oportunidad de contemplar de primera mano obras de Sisley, Van Gogh y diversos impresionistas y postimpresionistas. Realiza su primera exposición individual en la Sala Libros de Zaragoza en 1957. Desde entonces ha realizado exposiciones personales en las galerías Syra, Rovira y Vayreda de Barcelona; Alas, Abril, El Cisne, Collage y Biosca de Madrid; Justin Lester de Los Ángeles, Art Roman de Tokio, etc. Desde 1966 expone regularmente de forma individual en la Sala Parés de Barcelona, y en 1968 participa en el Salon des Artistes Français del Grand Palais de Madrid. Su obra, vinculada al expresionismo y muy basada en el color, se caracteriza por una técnica muy elaborada y un profundo conocimiento del dibujo. También realizó numerosos dibujos, que se publicaron en diversos periódicos y revistas. Entre sus galardones destacan el Premio La Rambla (Barcelona, 1961), la Medalla Ramón Rogent (Salón de Mayo, Barcelona, 1962), medalla de la Exposición de Bellas Artes (Madrid, 1961), III Premio Sant Jordi y Premio Van Gogh (Barcelona, 1963), Medalla Ciudad de Barcelona (1965), Premio Bienal de Pintura de Huesca (1976), Medalla Condesa de Barcelona (Madrid, 1983) y Medalla de Honor en el Certamen BMW (Madrid, 1987). En los últimos años ha participado en las ferias ARCO de Madrid y ARTEXPO de Valencia, Barcelona, Basilea, Nueva York, Chicago, Miami y Hong Kong. En 1993 la Fundación Mapfre Vida de Madrid le dedicó una exposición retrospectiva.

Valorac. 1 500 - 1 600 EUR

Lote 64 - MANOLO HUGUÉ (Barcelona, 1872 - Caldas de Montbui, Barcelona, 1945). "Plaza de Toros". Acuarela sobre papel. Medidas: 17 x 23 cm; 45 x 50 cm (marco). Lo que llamamos inmovilidad no es más que un caso límite de lentitud en el movimiento, un límite ideal que la naturaleza nunca alcanza. Lo escribió el filósofo francés Henri Bergson, y este mismo principio lo materializan estos toreros de Manolo Hugué, cuyas posturas traducen la densa tensión del instante en el ruedo. Manuel Martínez Hugué, Manolo Hugué, se formó en la Escuela de la Lonja de Barcelona. Participante habitual en las tertulias de "Els Quatre Gats", entabló amistad con Picasso, Rusiñol, Mir y Nonell. En 1900 se traslada a París, donde vive diez años. Allí reanuda su relación con Picasso y entabla amistad con otros teóricos de la vanguardia como Apollinaire, Modigliani, Braque y Derain. En la capital francesa trabajó en el diseño de joyas y pequeñas esculturas, influido por la obra de su amigo, el escultor y orfebre Paco Durrio. En 1892 trabajó con Torcuato Tasso en obras decorativas para las celebraciones del centenario del Descubrimiento de América. Entre 1910 y 1917, dedicado por completo a la escultura, trabajó en Ceret, donde reunió a un heterogéneo grupo de artistas entre los que destacaron Juan Gris, Joaquín Sunyer y, de nuevo, Picasso. Durante estos años realizó exposiciones en Barcelona, París y Nueva York. En 1932 fue nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona. En la obra de Hugué, lo esencial es la relación con la naturaleza, teniendo en cuenta la figura humana como elemento integrado en ella. Esta es una característica del clasicismo novecentista, pero en manos de Hugué va más allá de sus limitados orígenes. Suele representar campesinos, aunque también toreros y bailarinas -como puede verse en esta ocasión-, siempre retratados con un nivel de detalle y una apreciación de las texturas que revelan su antigua formación como orfebre. En su producción artística conviven la tradición mediterránea, el clasicismo y el arcaísmo griegos, y el arte del antiguo Egipto y Mesopotamia, con las vanguardias europeas que asimiló y conoció de primera mano, concretamente el fauvismo y el cubismo de Matisse. Se conservan obras de Hugué en el MACBA, el Centro Georges Pompidou de París, el Museo Nacional de Arte de Cataluña y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, entre muchos otros.

Valorac. 1 500 - 1 600 EUR

Lote 65 - JOAN ABELLÓ PRAT (Mollet del Vallés, Barcelona, 1922 - Barcelona, 2008). "Paisaje". Técnica mixta sobre papel. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 49 x 63 cm; 70 x 84 cm (marco). Pintor y grabador, Joan Abelló inició su formación de forma autodidacta, teniendo en sus primeros cuadros una gran influencia las obras que Joaquín Mir realizó en Mollet. Posteriormente estudió en la Academia Baixas y en el Real Círculo Artístico de Barcelona (1941), y más tarde fue discípulo de Pere Pruna, trabajando durante dos años en su taller (1944-46). Pruna le enseñó técnicas murales y de grabado, y también aprendió restauración en el estudio de Miracle. En 1945 expone por primera vez en Barcelona, y al año siguiente entra en el estudio de Carlos Pellicer, con quien trabaja durante catorce años. Completó sus estudios con viajes a Londres, Bélgica, París y la Isla de Man, entre otros lugares. En los años sesenta regresó a su ciudad natal, donde volvió a interesarse por los paisajes del Vallés y del Mediterráneo, aunque no abandonó sus extensos viajes por Europa, África, Costa de Marfil, Marruecos y Brasil. Destacado coleccionista, en 1996 donó su colección de arte al Ayuntamiento de Mollet, que tres años más tarde creó el Museo Municipal Joan Abelló. Anexa al museo se encuentra la casa natal del artista, que desde 2002 alberga un taller de restauración y un centro de estudios artísticos. Abelló comienza su carrera desarrollando una cierta tendencia impresionista, para iniciarse a finales de los cuarenta en el postimpresionismo sin perder los vínculos con su lenguaje inicial, siempre con una explosión de colores aplicados con violentas pinceladas. Años más tarde su estilo evolucionará, practicando una pintura más matérica bajo la influencia del informalismo, y acentuando su expresionismo sin abandonar nunca la figuración. Desde 1940, año en que realiza su primera exposición en su ciudad natal, antes incluso de trasladarse a Barcelona para estudiar, Abelló expone en España, Londres, París, Nueva York y Moscú. En 2002 fue nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Sant Jordi. Está representado en el Museo que lleva su nombre, así como en el MACBA de Barcelona, la Courtauld Collection de Londres, el Ashmolean Museum de Oxford, el Museo Vaticano, el Poldersmuseum de Bélgica y el Legado Francesc Galí.

Valorac. 900 - 1 000 EUR

Lote 66 - JOAN ABELLÓ PRAT (Mollet del Vallés, Barcelona, 1922 - Barcelona, 2008). "A las puertas del establo", 1963. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado en el ángulo superior izquierdo. Firmado, fechado y titulado al dorso. Medidas: 54 x 64,5 cm; 75 x 85 cm (marco). Pintor y grabador, Joan Abelló comienza su formación de forma autodidacta, teniendo en sus primeros cuadros una gran influencia las obras que Joaquín Mir realizó en Mollet. Posteriormente estudia en la Academia Baixas y en el Real Círculo Artístico de Barcelona (1941), y más tarde se convierte en discípulo de Pere Pruna, trabajando durante dos años en su taller (1944-46). Pruna le enseñó técnicas murales y de grabado, y también aprendió restauración en el estudio de Miracle. En 1945 expone por primera vez en Barcelona, y al año siguiente entra en el estudio de Carlos Pellicer, con quien trabaja durante catorce años. Completó sus estudios con viajes a Londres, Bélgica, París y la Isla de Man, entre otros lugares. En los años sesenta regresó a su ciudad natal, donde volvió a interesarse por los paisajes del Vallés y del Mediterráneo, aunque no abandonó sus extensos viajes por Europa, África, Costa de Marfil, Marruecos y Brasil. Destacado coleccionista, en 1996 donó su colección de arte al Ayuntamiento de Mollet, que tres años más tarde creó el Museo Municipal Joan Abelló. Anexa al museo se encuentra la casa natal del artista, que desde 2002 alberga un taller de restauración y un centro de estudios artísticos. Abelló comienza su carrera desarrollando una cierta tendencia impresionista, para iniciarse a finales de los cuarenta en el postimpresionismo sin perder los vínculos con su lenguaje inicial, siempre con una explosión de colores aplicados con violentas pinceladas. Años más tarde su estilo evolucionará, practicando una pintura más matérica bajo la influencia del informalismo, y acentuando su expresionismo sin abandonar nunca la figuración. Desde 1940, año en que realiza su primera exposición en su ciudad natal, antes incluso de trasladarse a Barcelona para estudiar, Abelló expone en España, Londres, París, Nueva York y Moscú. En 2002 fue nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Sant Jordi. Está representado en el Museo que lleva su nombre, así como en el MACBA de Barcelona, la Courtauld Collection de Londres, el Ashmolean Museum de Oxford, el Museo Vaticano, el Poldersmuseum de Bélgica y el Legado Francesc Galí.

Valorac. 1 100 - 1 200 EUR

Lote 69 - JOSEP MOMPOU I DENCAUSSE (Barcelona, 1888 - Vic, Barcelona, 1968). "Tossa de Mar", 1945. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado en la esquina inferior derecha. Con etiqueta de Ramoneda y Barrachina. Medidas: 50 x 61 cm; 61 x 74 cm (marco). Veraneantes, bañadores y sombrillas centellean en miríadas cromáticas sobre la arena. Con pincelada rápida e intuitiva, Josep Mompou compone una vibrante sinfonía estival. La colina se perfila bajo un cielo límpido. Sobre ella, la muralla del castillo serpentea entre los arbustos. Pintor formado en la academia de Joaquín Torres Canosa, fue miembro del Círculo de Sant Lluc. En 1907 participó en la Exposición Internacional de Barcelona, y al año siguiente organizó una exposición individual en las Galerías Dalmau. Entre 1910 y 1911 colaboró con la revista "Papitu", y en 1917 participó en la exposición de artistas francófilos en las Galerías Dalmau, donde posteriormente realizó dos importantes exposiciones individuales, en 1920 y 1925. Entre 1926 y 1934 residió en París, donde organizó varias exposiciones individuales, así como exposiciones sucesivas en la Sala Parés de Barcelona y en Madrid en 1946. También participó en numerosas exposiciones colectivas, tanto en Europa como en América, así como en diversos salones de París y en las Bienales Iberoamericanas. En 2009, la Fundación Caixa de Cataluña le dedicó una gran antológica en La Pedrera. Fue miembro de la Academia de Sant Jordi, y está representado en el Centro Nacional Reina Sofía, los Museos de Arte Moderno de La Habana, París y Barcelona, el Museo Municipal de Tossa de Mar, el Museo de Toledo (Ohio, Estados Unidos) y la Biblioteca de Cataluña, entre otros.

Valorac. 3 000 - 4 000 EUR

Lote 70 - ELISEO MEIFRÈN ROIG (Barcelona, 1859 - 1940). "Paisaje. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Medidas: 70 x 36 cm; 84 x 50 cm (marco). Eliseo Meifrèn nos ofrece una obra claramente impresionista, con un tratamiento puramente cromático y luminoso del paisaje, que deja de lado la minuciosa descripción del modelo natural para captar una impresión de la naturaleza, una imagen puramente visual y totalmente plástica, en la que la pincelada suelta, empastada y precisa configura formas, espacios y volúmenes a base de yuxtaponer colores. Las formas se difuminan y se convierten en pura mancha expresiva; la luz, trabajada y pensada, adquiere un renovado protagonismo, y la naturaleza cobra una nueva dimensión atmosférica, que va más allá de la pura reproducción de la realidad. Pintor de paisajes y marinas, Eliseo Meifrèn está considerado como uno de los primeros introductores del movimiento impresionista en Cataluña. Inició su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, donde fue discípulo de Antonio Caba y Ramón Martí Alsina, con quienes comenzó a crear paisajes románticos de estilo académico. Tras finalizar sus estudios, en 1878, se trasladó a París para ampliar sus conocimientos artísticos, y allí conoció de primera mano la pintura "à plen air", que le influiría poderosamente en sus paisajes parisinos de aquellos años. Asimismo, en París coincidió con el inicio público del impresionismo. Un año más tarde realizó un viaje a Italia, durante el cual visitó Nápoles, Florencia, Venecia y Roma; allí entró en contacto con el círculo de artistas catalanes formado por Ramón Tusquets, Arcadio Mas i Fondevila, Enrique Serra, Antonio Fabrés y Joan Llimona, entre otros. Ese mismo año, 1879, participó en la Exposición Regional de Valencia, y obtuvo una medalla de oro. De vuelta a Barcelona, en 1880 debutó individualmente en la Sala Parés de Barcelona, donde seguiría exponiendo regularmente a partir de entonces. Durante estos años forma parte del grupo modernista y frecuenta Els Quatre Gats. En 1883 regresó a París, donde realizó numerosos dibujos y acuarelas con vistas de la ciudad y sus cafés, que le valieron una calurosa acogida por parte de la crítica y el público franceses. A finales de los ochenta regresó a Barcelona y continuó exponiendo en la Sala Parés, así como en el Centro de Acuarelistas. Además, en 1888 fue miembro del jurado de la Exposición Universal celebrada en Barcelona. En 1890 regresó por tercera vez a la capital francesa, donde participó en el Salon des Beaux-Arts y en el Salon des Indépendants de 1892, junto con Ramon Casas y Santiago Rusiñol, artistas con los que un año antes había formado el grupo pictórico de Sitges. En los años siguientes Meifrèn enviaría sus obras a numerosas exposiciones y certámenes oficiales, entre ellos las Exposiciones Nacionales de Madrid y Barcelona, y obtuvo la tercera medalla en la Universal de París de 1889 y 1899, medalla de plata en la Universal de Bruselas de 1910, gran premio en la Universal de Buenos Aires del mismo año, medalla de honor en la Internacional de San Francisco de 1915 y gran premio en la Internacional de San Diego del año siguiente. También ganó el Premio Nonell de Barcelona en 1935. En 1952, el Ayuntamiento de Barcelona le dedicó una exposición retrospectiva, celebrada en el Palacio de la Virreina. Actualmente está representado en el Museo del Prado, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el MACBA de Barcelona y el Thyssen-Bornemisza, entre muchos otros.

Valorac. 2 000 - 2 500 EUR

Lote 71 - JOAQUIM MIR TRINXET (Barcelona, 1873 - 1940). "Entorno de una masía", Mollet, c.1914. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Adjunto certificado de D. Francesc Miralles. Medidas: 40 x 65 cm; 50 x 75 cm (marco). Con una pincelada atrevida e intuitiva, Mir capta, con una vibrante paleta mediterránea, el bullicio de unos campesinos frente a una casona rodeada de pajares. Bajo la luz del mediodía, unos gansos picotean en un gran corral abierto. Las figuras se integran en la naturaleza exultante y el cielo azul reverbera sobre la paja ambarina. A través de un lenguaje puramente personal, Mir sintetiza los elementos básicos para hacer reconocible la escena, de particular estructura compositiva, al tiempo que la hace vibrar con su imaginación. En esta obra, Mir demuestra un absoluto dominio técnico y atmosférico, que pone al servicio de una concepción casi animista del elemento natural. Joaquín Mir estudió en la Escuela de Bellas Artes de San Jordi de Barcelona y en el taller del pintor Luis Graner. Su estilo también se vio influido por la Escuela de Olot, ciudad natal de su padre. En 1893 formó la "Colla del Safrà" junto a artistas como Isidro Nonell, Ricard Canals y Ramón Pichot, y en los últimos años del siglo se vinculó al ambiente artístico de "Els Quatre Gats". Completó su formación en 1895, cuando pasó una temporada en Madrid copiando obras de Velázquez. Durante estos años participa en las Exposiciones de Bellas Artes de Barcelona de 1894, 1896 y 1898. Ganador de una segunda medalla en la Exposición de Madrid de 1899, ese mismo año se traslada a la capital para competir por una beca en Roma. Al no conseguirlo, se marchó con Santiago Rusiñol a Mallorca, en un viaje que supondría un punto de inflexión definitivo en su carrera. Mir quedó deslumbrado por el paisaje mallorquín, concretamente por el de Sa Calobra, que fue para él una fuente inagotable de inspiración. En 1901 expuso el fruto de esta primera etapa mallorquina en la Sala Parés de Barcelona, y volvió a ganar una segunda medalla en la Exposición Nacional. Tras un periodo de enfermedad que le obligó a trasladarse a Reus, en 1907 obtuvo la primera medalla en la Exposición Internacional de Bellas Artes de Barcelona. Consolidado ya como figura destacada del panorama catalán, adquiere el reconocimiento definitivo a nivel nacional en 1917, cuando se le concede el Premio Nacional de Bellas Artes. Cuatro años más tarde contrae matrimonio y se instala definitivamente en Vilanova i la Geltrú. Los éxitos se suceden y en 1929 obtiene la primera medalla en la Exposición Internacional de Barcelona. Al año siguiente obtuvo la medalla de honor de la Exposición Nacional de Madrid, galardón al que aspiraba desde 1922. Aunque era principalmente un pintor nativo, realizó exposiciones individuales y colectivas en Washington, París, Pittsburg, Nueva York, Filadelfia, Amsterdam, Buenos Aires y Venecia. Mir está considerado hoy el más destacado representante del paisajismo postimpresionista español. Su obra se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza y el Museo Reina Sofía de Madrid, entre muchos otros.

Valorac. 8 000 - 10 000 EUR

Lote 72 - IGNACIO PINAZO CAMARLENCH (Valencia, 1849 - Godella, Valencia, 1916). "Joven de perfil. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Medidas: 66 x 51 cm; 97 x 71 cm (marco). Nacido en el seno de una familia humilde, Pinazo se vio obligado desde muy joven a contribuir con diferentes oficios al sostenimiento de su hogar. Sólo había terminado el octavo curso en la escuela cuando su madre murió de cólera, por lo que pronto tuvo que emplearse en diversos oficios, como platero, decorador de azulejos, panadero, dorador y pintor de abanicos. Tras la muerte de su padre se fue a vivir con su abuelo, y en 1864 ingresó en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, donde fue discípulo de José Fernández Olmos. Durante este periodo se gana la vida como sombrerero. Comenzó su formación artística a los veintiún años, logrando su primer éxito tres años más tarde, en Barcelona. En 1871 participa por primera vez en la Exposición Nacional de Bellas Artes. Estuvo dos veces en Roma, la primera gracias a la venta de un cuadro, en 1873, y la segunda con una beca, entre 1876 y 1881. Allí comenzó sus grandes producciones de historia, alejadas de las convenciones del género. En su primera época desarrolló un estilo academicista, pero a partir de 1874 inició una línea pictórica más intimista e impresionista. Cuando regresó a Valencia abandonó los temas históricos, y en su lugar comenzó a pintar temas familiares, desnudos y escenas de la vida cotidiana. Por ello, hoy se le considera precursor, tanto en temas como en estilo, de Joaquín Sorolla y Francisco Domingo. En 1884 Pinazo abandona temporalmente Valencia debido a una epidemia de cólera, instalándose en la casa que el banquero José Jaumandreu poseía en Bétera. Desde su regreso ese mismo año hasta 1886, impartió clases en la Escuela de Bellas Artes de Valencia. Durante estos años recibió numerosos encargos de la aristocracia valenciana, contando entre sus clientes a personajes tan destacados como la marquesa de Benicarló. Pinazo expuso sus obras en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes de Madrid, obteniendo la medalla de plata en 1881 y 1885, y la de oro en 1897 y 1899. En 1896 fue nombrado académico de San Carlos, y en 1906 lo será también de San Fernando, en Madrid. En 1900 participó en la decoración de la escalera del palacio de don José Ayora, junto con Antonio Fillol, Peris Brell, Ricardo Verde y Luis Beüt. Por estos años recibió una medalla real y, en 1912, la ciudad de Valencia le dedicó una calle. A su muerte, en 1916, seguirán los actos conmemorativos de su vida y obra. En la actualidad, Pinazo está representado en el Museo del Prado, el MACBA de Barcelona, el Museo y Círculo de Bellas Artes de Valencia, su Casa-Museo de Godella y la Diputación de Valencia, así como en varias importantes colecciones privadas.

Valorac. 2 000 - 2 200 EUR

Lote 73 - JOAN CARDONA I LLADÓS (Barcelona, 1877 - 1957). "Maternidad. Óleo sobre lienzo. Firmado al dorso. Medidas: 81 x 65 cm; 99 x 82,5 cm (marco). Formado en la Escuela de Bellas Artes de la Lonja y en la Academia Baixeras de Barcelona, amplió sus estudios en París, ciudad en la que se instalará durante varios años. En la capital francesa formó grupo con los mejores ilustradores de la época, como Cappiello, Sem, Steinlen y Roubille. Pintor y dibujante, desarrolló una importante actividad en el campo de la ilustración, colaborando con revistas españolas como "El Gato Negro" e "Hispania", y en las francesas "Le Rire" y "Simplicissimus". Destaca su colaboración con "Jugend", la revista insignia del modernismo vienés, el Jugendstil. En su etapa parisina, Cardona alcanzó fama internacional gracias a sus dibujos a pluma, caracterizados por la nitidez del trazo y fuertes valores expresivos. Por el contrario, en su pintura subordina la línea al color, con tonos cálidos en sus primeros años y gamas frías en su madurez. Sus cuadros, de gran fuerza expresiva y denso empaste, definen el protagonismo de la mujer, que se perfila sobre fondos vibrantes, casi abstractos, en un estilo que le acerca a Anglada Camarasa. En 1897 fue premiado en el concurso convocado por la Academia Mariana de Lérida. Expuso en París en los Salones de Otoño y de la Societé Nationale, obteniendo en ambos el título de "societaire". Participó en las Exposiciones Internacionales de Bellas Artes de Barcelona de 1907 y 1929. Está representado en el Museo de Luxemburgo, en París.

Valorac. 1 600 - 1 700 EUR

Lote 74 - CASIMIRO MARTÍNEZ TARRASSÓ (Barcelona, 1898 - 1980). "Paisaje de montaña". Óleo sobre tablex. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 16 x 20 cm; 43 x 48 cm (marco). En este tablex Tarrassó plasma un paisaje construido en profundidad con su personal lenguaje basado en manchas de color de herencia fauvista. El vivo cromatismo responde a un cuidadoso y meditado estudio, basado en la yuxtaposición de tonos principalmente fríos, unos más brillantes y otros más oscuros para reforzar la construcción tridimensional del espacio. Conocido simplemente como Tarrassó, se formó en la Escuela de La Lonja de Barcelona. Completó sus estudios en París, donde conoció de primera mano las obras fauvistas que sacudían entonces la escena artística parisina. Fue sobre todo un brillante paisajista, con un estilo caracterizado por sus colores violentos y vivos, muy luminosos. Siguió los pasos de los grandes paisajistas catalanes, especialmente de Joaquín Mir, aunque con una personalidad claramente diferenciada debido en parte al impacto que el fauvismo tuvo en su pensamiento artístico. Cultivó el bodegón y los paisajes catalanes y mallorquines. Realizó su primera exposición en 1928, en las Galerías Layetanas de Barcelona. Desde entonces se sucedieron sus exposiciones en Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca y Bilbao. En 1935 visitó Mallorca por primera vez, y a partir de 1940 tuvo allí un estudio, concretamente en Palma, donde vivió largas temporadas y desarrolló la mayor parte de su producción artística. Después de la Guerra Civil, durante los años cuarenta, Tarrassó participó en varias Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en sus ediciones de 1942, 1943 y 1950, y realizó numerosas exposiciones personales en Barcelona, en galerías como Augusta, Layetanas, Ars, etc., entre ellas la que realizó de paisajes pirenaicos en 1948, y la de grandes lienzos de paisajes mallorquines que presentó en 1949. Aunque el paisaje fue siempre el centro de su producción, Tarrassó también realizó obras como la decoración mural de la iglesia de Santa Maria de Badalona. En Mallorca también llevó a cabo una singular empresa, plantar su caballete en las Cuevas de Campanet para captar las estalactitas y estalagmitas de sus cavidades pétreas, desarrollando una serie de obras que presentó en las Galerías Costa de Palma en octubre de 1948. A lo largo de su carrera Tarrassó fue galardonado con el Premio Pollença del I Certamen Internacional de Pintura en 1962; el Premio Santiago Rusiñol en 1972; y las medallas obtenidas en diversas ediciones de los Salones de Otoño de Palma de Mallorca: primer premio en 1967 y 1973, y premio honorífico en 1970. La obra de Tarrassó se caracteriza por la gran personalidad de su colorido. Su obsesión por el cromatismo determina una pintura profundamente sensorial, vitalista e intuitiva. Está representado en diversas colecciones privadas nacionales e internacionales, así como en el Museo y Fondo Artístico de Porreras (Mallorca) y en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma.

Valorac. 550 - 600 EUR

Lote 75 - JOAN CARDONA I LLADÓS (Barcelona, 1877 - 1957). "Maternidad. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda y en el reverso. Medidas: 71 x 60 cm; 96 x 86 cm (marco). Formado en la Escuela de Bellas Artes de la Lonja y en la Academia Baixeras de Barcelona, amplió sus estudios en París, ciudad en la que se instalará durante varios años. En la capital francesa formó grupo con los mejores ilustradores de la época, como Cappiello, Sem, Steinlen y Roubille. Pintor y dibujante, desarrolló una importante actividad en el campo de la ilustración, colaborando con revistas españolas como "El Gato Negro" e "Hispania", y en las francesas "Le Rire" y "Simplicissimus". Destaca su colaboración con "Jugend", la revista insignia del modernismo vienés, el Jugendstil. En su etapa parisina, Cardona alcanzó fama internacional gracias a sus dibujos a pluma, caracterizados por la nitidez del trazo y fuertes valores expresivos. Por el contrario, en su pintura subordina la línea al color, con tonos cálidos en sus primeros años y gamas frías en su madurez. Sus cuadros, de gran fuerza expresiva y denso empaste, definen el protagonismo de la mujer, que se perfila sobre fondos vibrantes, casi abstractos, en un estilo que le acerca a Anglada Camarasa. En 1897 fue premiado en el concurso convocado por la Academia Mariana de Lérida. Expuso en París en los Salones de Otoño y de la Societé Nationale, obteniendo en ambos el título de "societaire". Participó en las Exposiciones Internacionales de Bellas Artes de Barcelona de 1907 y 1929. Está representado en el Museo de Luxemburgo, en París.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 76 - JOAN MESTRE I BOSCH (Palma de Mallorca, 1826 - 1893). "Santa Cecilia", Barcelona, 1847. Óleo sobre lienzo. Agrietado. Con restauración en el reverso e inscripción. Presenta faltas en el marco y en la pintura. Medidas: 87 x 68 cm; 108 x 91 cm (marco). Joan Mestre i Bosch se formó con Bartolomé Sureda en la Escuela de Bellas Artes de Palma de Mallorca. Posteriormente viajó a Barcelona para completar allí su formación, en la Academia de Bellas Artes de la ciudad, y finalmente pasó una temporada en Madrid, donde se dedicó a copiar obras de los grandes maestros en el Museo del Prado. A su regreso a Mallorca, ocupó gratuitamente la cátedra de Anatomía y Dibujo de Paisaje en la Sociedad Económica Mallorquina de Amigos del País. A lo largo de su vida mostró su obra en diversas exposiciones oficiales, siendo premiado en varias ocasiones, y también pintó obras religiosas para varias iglesias de Baleares. También fue correspondiente de la Academia de San Fernando de Madrid y pintor de cámara honorario. Fue especialmente conocido como retratista y pintor de temas religiosos, y desarrolló un estilo de base académica, raíces románticas y una clara apuesta por el naturalismo, aunque de un realismo ecléctico. Fue también un importante pedagogo, y la huella de su estilo se aprecia en discípulos suyos como Joan Bauzà, Antoni Ribas y Antoni Fuster. Joan Mestre i Bosch está representado actualmente en la colección del Consell de Mallorca, Sa Nostra, la Fundación Yannick y Ben Jakober y el Museo de Mallorca, entre otras colecciones públicas y privadas.

Valorac. 2 500 - 2 800 EUR

Lote 77 - JOAQUÍN MICHAVILA ASENSI (Alcora, Castellón, 1926 - Albalat de Taronchers, Valencia, 2016). "LLAC". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Medidas: 73 x 95,50 cm; 93 x 112 cm (marco). Uno de los principales representantes de la abstracción valenciana, Joaquín Michavila se formó en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, de cuya academia fue miembro desde 1975 y presidente entre 2003 y 2007. Catedrático de Bellas Artes, fue galardonado con la Distinción al Mérito Cultural de la Generalitat Valenciana (2001) y el Premio de Artes Plásticas de la Generalitat Valenciana (2007). Michavila se trasladó a Valencia en 1932, donde vivió hasta 1966. Destacado participante de la vanguardia valenciana, Michavila formó parte, desde su fundación, de los grupos Los Siete, Parpalló y Artes del Arte. Comenzó su carrera en 1952, y durante algunos años buscó un lenguaje propio, y a partir de 1960 desarrolló un lenguaje enmarcado en el constructivismo, que fue evolucionando en un sentido cada vez más geométrico. Una década más tarde se centrará en evocar los paisajes de su juventud a través de la abstracción, y hacia 1990 comienza a acercarse al tenebrismo, con obras marcadas por el contraste de luces y sombras. A principios del siglo XXI, Michavila iniciará una nueva etapa con una producción de acrílicos titulada genéricamente "Contrapunto", término musical del que surgen interpretaciones plásticas de maestros compositores de la vanguardia como Schönberg, Luis de Pablo o Paco Llàcer. Esta última serie habla de un cierto dramatismo existencial derivado del tenebrismo pictórico anterior, con fondos negros sobre los que el sonido se convierte en pura forma, vibración sonora a la vez que lumínica, jugando a evocar la sinestesia. A lo largo de su carrera, Michavila realizó exposiciones por toda España, así como en Roma, Florencia, Basilea, Denver, São Paulo, Nueva York y Viena. Fue distinguido con numerosos galardones, entre ellos el Premio Alfonso Roig de la Diputación de Valencia en 1996 y la Medalla de Oro de la Ciudad de Valencia en 1997, además de ser nombrado Alcorí Distinguit en 1998. Asimismo, en febrero de 2016 la Universitat de València le dedicó una exposición monográfica como homenaje, reuniendo una selección de treinta obras representativas de toda su trayectoria.

Valorac. 4 000 - 4 200 EUR

Lote 79 - RICARDO NAVARRETE Y FOS (Serpis, Alicante, 1834 - Madrid, 1909). "Vista de Venecia. Acuarela sobre papel. Firmada y localizada en Venecia. Medidas: 46 x 25 cm; 82,5 x 59,5 cm (marco). Se trata de una pintura enmarcada en la tradición del vedutismo veneciano, cuya historia comienza en el siglo XVIII, aunque tiene antecedentes que se remontan a la segunda mitad del siglo XV. Orgullosa de su poder, la ciudad entonces considerada reina del Mediterráneo por sus contactos comerciales lo reforzó mediante una verdadera propaganda visual. Con la representación precisa y oportunamente idealizada del escenario de tantos episodios históricos y legendarios, se consolidó un mito destinado a perdurar en el tiempo, aunque en el siglo XVIII sólo quedaran algunos cimientos poco firmes para sostenerlo. Pintor alicantino de la segunda mitad del siglo XIX, Ricardo Navarrete, hermano del grabador Federico Navarrete, abordó en su obra un amplio abanico de temas, destacando especialmente en el retrato, la historia y la pintura de costumbres. Comenzó su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia, para pasar después a la de San Fernando, en Madrid. Alumno aventajado, obtuvo pensiones para Roma y Venecia, y durante su estancia en Italia comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes. Así, en 1864 obtuvo una mención honorífica, y tres años más tarde su obra "Capuchinos en el coro" le valió una tercera medalla. Navarrete se instaló en Venecia gracias al mecenazgo de José María Olmos, y allí se dedicó a pintar temas de la historia de la ciudad y pequeños cuadros de género veneciano, muy admirados en su época. Siguió participando en concursos oficiales, y en 1873 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Viena. Ese mismo año pintó un notable retrato del novelista Enrique Pérez Escrich, que fue presentado como homenaje póstumo en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897, año de la muerte del escritor. En 1884 Navarrete regresó a España y ocupó una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, desde donde más tarde se trasladaría a Barcelona y Madrid. También fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. Actualmente se conservan obras de Ricardo Navarrete en el Museo del Prado, el Museo Municipal de Játiva, el Museo de Almería, la Diputación Provincial de Zamora, el Ayuntamiento de Irún, el Gobierno Civil de Vitoria y otras colecciones públicas y privadas.

Valorac. 1 500 - 1 800 EUR

Lote 80 - RICARDO NAVARRETE Y FOS (Serpis, Alicante, 1834 - Madrid, 1909). "Vista de Venecia. Acuarela sobre papel. Firmada y localizada en Venecia. Medidas: 46 x 25 cm; 82,5 x 59,5 cm (marco). Se trata de una pintura enmarcada en la tradición del vedutismo veneciano, cuya historia comienza en el siglo XVIII, aunque tiene antecedentes que se remontan a la segunda mitad del siglo XV. Orgullosa de su poder, la ciudad entonces considerada reina del Mediterráneo por sus contactos comerciales lo reforzó mediante una verdadera propaganda visual. Con la representación precisa y oportunamente idealizada del escenario de tantos episodios históricos y legendarios, se consolidó un mito destinado a perdurar en el tiempo, aunque en el siglo XVIII sólo quedaran algunos cimientos poco firmes para sostenerlo. Pintor alicantino de la segunda mitad del siglo XIX, Ricardo Navarrete, hermano del grabador Federico Navarrete, abordó en su obra un amplio abanico de temas, destacando especialmente en el retrato, la historia y la pintura de costumbres. Comenzó su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia, para pasar después a la de San Fernando, en Madrid. Alumno aventajado, obtuvo pensiones para Roma y Venecia, y durante su estancia en Italia comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes. Así, en 1864 obtuvo una mención honorífica, y tres años más tarde su obra "Capuchinos en el coro" le valió una tercera medalla. Navarrete se instaló en Venecia gracias al mecenazgo de José María Olmos, y allí se dedicó a pintar temas de la historia de la ciudad y pequeños cuadros de género veneciano, muy admirados en su época. Siguió participando en concursos oficiales, y en 1873 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Viena. Ese mismo año pintó un notable retrato del novelista Enrique Pérez Escrich, que fue presentado como homenaje póstumo en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897, año de la muerte del escritor. En 1884 Navarrete regresó a España y ocupó una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, desde donde más tarde se trasladaría a Barcelona y Madrid. También fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. Actualmente se conservan obras de Ricardo Navarrete en el Museo del Prado, el Museo Municipal de Játiva, el Museo de Almería, la Diputación Provincial de Zamora, el Ayuntamiento de Irún, el Gobierno Civil de Vitoria y otras colecciones públicas y privadas.

Valorac. 1 400 - 1 600 EUR

Lote 81 - RICARDO NAVARRETE Y FOS (Serpis, Alicante, 1834 - Madrid, 1909) "Marina Acuarela sobre papel. Presenta ligeras manchas de óxido. Firmada en la esquina inferior izquierda. Medidas: 25 x 44 cm; 33,5 x 53 cm (marco). Pintor alicantino de la segunda mitad del siglo XIX, hermano del grabador Federico Navarrete, Ricardo abordó en su obra una amplia gama de temas, destacando especialmente en el retrato, la pintura de historia y la de costumbres. Comenzó su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia, y luego pasó a la de San Fernando, en Madrid. Alumno aventajado, obtuvo pensiones para Roma y Venecia, y durante su estancia en Italia comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes. Así, en 1864 obtuvo una mención honorífica, y tres años más tarde su obra "Capuchinos en el coro" le valió una tercera medalla. Navarrete se instaló en Venecia gracias al mecenazgo de José María Olmos, y allí se dedicó a pintar temas de la historia de la ciudad y pequeños cuadros de género veneciano, muy admirados en su época. Siguió participando en concursos oficiales, y en 1873 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Viena. Ese mismo año pintó un notable retrato del novelista Enrique Pérez Escrich, que fue presentado como homenaje póstumo en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897, año de la muerte del escritor. En 1884 Navarrete regresó a España y ocupó una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, desde donde más tarde se trasladaría a Barcelona y Madrid. También fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. En la actualidad, se conservan obras de Ricardo Navarrete en el Museo del Prado, el Museo Municipal de Játiva, el Museo de Almería, la Diputación Provincial de Zamora, el Ayuntamiento de Irún, el Gobierno Civil de Vitoria y otras colecciones públicas y privadas. Ligeras manchas de óxido.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 82 - JOAQUIN AGRASOT (Orihuela, Alicante, 1837 - Valencia, 1919). "Retrato orientalista". Acuarela sobre papel. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 37,5 x 29 cm; 63 x 54 cm (marco). Agrasot comenzó su formación en su Orihuela natal, donde fue pensionado por la Diputación de Alicante para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. Discípulo allí de Francisco Martínez Yago, en sus primeros años obtuvo premios como la medalla de oro en la Exposición Provincial de Alicante de 1860. En 1863 obtuvo una nueva pensión, esta vez para viajar a Roma, donde entró en contacto con Rosales, Casado del Alisal y Fortuny. Con este último estableció estrechos lazos de amistad, y su pintura se vio profundamente influida por el estilo del pintor catalán. Periódicamente envió lienzos a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en las que obtuvo la tercera medalla en 1864 y la segunda en 1867. Agrasot permaneció en Italia hasta 1875; tras la muerte de Fortuny regresó a España, siendo ya un pintor de reconocido prestigio, fue miembro de las Academias de San Carlos y San Fernando, y participó como jurado en varias exposiciones artísticas. En 1886 recibió la medalla de arte en la Exposición Universal de Filadelfia, y en 1888 la segunda medalla en la Exposición Internacional de Barcelona. El estilo de Agrasot se enmarca dentro del realismo, interesándose especialmente por los temas de género y el costumbrismo regional. Sin embargo, también trabajó desnudos, temas orientales y retratos. Está representado en el Museo del Prado, el Museo de Bellas Artes de Valencia, el MUBAG de Gravina (Alicante) y la Academia de San Carlos de Valencia.

Valorac. 900 - 1 000 EUR

Lote 83 - RICARDO NAVARRETE Y FOS (Serpis, Alicante, 1834 - Madrid, 1909) "Marina Acuarela sobre papel. Presenta ligeras manchas de óxido. Firmada en la esquina inferior derecha. Medidas: 25 x 44 cm; 33,5 x 53 cm (marco). Pintor alicantino de la segunda mitad del siglo XIX, hermano del grabador Federico Navarrete, Ricardo abordó en su obra una amplia gama de temas, destacando especialmente en el retrato, la pintura de historia y la de costumbres. Comenzó su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia, y luego pasó a la de San Fernando, en Madrid. Alumno aventajado, obtuvo pensiones para Roma y Venecia, y durante su estancia en Italia comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes. Así, en 1864 obtuvo una mención honorífica, y tres años más tarde su obra "Capuchinos en el coro" le valió una tercera medalla. Navarrete se instaló en Venecia gracias al mecenazgo de José María Olmos, y allí se dedicó a pintar temas de la historia de la ciudad y pequeños cuadros de género veneciano, muy admirados en su época. Siguió participando en concursos oficiales, y en 1873 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Viena. Ese mismo año pintó un notable retrato del novelista Enrique Pérez Escrich, que fue presentado como homenaje póstumo en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897, año de la muerte del escritor. En 1884 Navarrete regresó a España y ocupó una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, desde donde más tarde se trasladaría a Barcelona y Madrid. También fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. En la actualidad, se conservan obras de Ricardo Navarrete en el Museo del Prado, el Museo Municipal de Játiva, el Museo de Almería, la Diputación Provincial de Zamora, el Ayuntamiento de Irún, el Gobierno Civil de Vitoria y otras colecciones públicas y privadas. Ligeras manchas de óxido.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 84 - JUAN PABLO SALINAS TERUEL (Madrid, 1871 - Roma, 1946). "Escena orientalista". Acuarela sobre papel. Presenta etiqueta al dorso de la Galería D'Arte, Italia. Firmado y localizado (Roma) en la esquina inferior izquierda. Medidas. 68 x 39 cm; 93 x 65 cm (marco). En esta obra realizada en Roma, el autor presenta una escena de gran crudeza al retratar a un hombre sujeto por cadenas. Tanto su turbante como sus ropas nos trasladan al mundo oriental. Una corriente que nació en el siglo XIX como consecuencia del espíritu romántico de evasión en el tiempo y en el espacio. Los primeros orientalistas buscaban reflejar lo perdido, lo inalcanzable, en un viaje dramático destinado desde el principio al fracaso. Como Flaubert en "Salambo", los pintores realizaron retratos detallados de Oriente y de pasados imaginados, recreados al milímetro, pero en última instancia desconocidos e idealizados. Durante la segunda mitad del siglo XIX, sin embargo, muchos de los pintores que viajaron a Oriente Próximo en busca de esa realidad inventada descubrieron un país diferente y nuevo, que destacaba con sus peculiaridades por encima de los tópicos y prejuicios de los europeos. Así, esta nueva escuela orientalista deja atrás las bellas odaliscas, los harenes y los mercados de esclavos para pintar nada más que lo que ven, el Oriente real en toda su dimensión cotidiana. Juan Pablo Salinas comenzó su formación artística en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid, aunque su paso por las aulas fue probablemente efímero. Comenzó a darse a conocer en 1885, año en el que participó en la exposición organizada por la Asociación de Escritores y Artistas y en la Exposición Aragonesa, obteniendo en ambas una medalla de tercera clase. Hacia 1886 se traslada a Roma para ampliar estudios gracias a una beca concedida por la Diputación Provincial de Zaragoza. Allí asistió al Círculo Internacional de Bellas Artes, así como a las clases nocturnas de la Academia Chigi. También se incorporó a la colonia artística española residente en la ciudad, y trabajó con su hermano, el pintor Agustín Salinas, afincado en Roma desde 1883. Ambos hermanos presentaron obras a la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid en 1887; Juan Pablo envió "Marco Antonio y Cleopatra", un tema clásico. Como su hermano, su verdadero maestro, Salinas también recreó temas medievales de notable influencia toscana, con obras como "Romeo y Julieta" o "Escena del Decamerón". Su estilo evolucionó hacia el costumbrismo, con especial atención a las escenas populares españolas e italianas, como "Una boda en Aragón", "Regreso de los vendimiadores" y otras obras. Su carrera se mantuvo estrechamente ligada a la de su hermano hasta que conoció, en un viaje a París, la obra de Ernest Meissonier, cuya influencia le llevó a centrarse en el género de los casacones, con el que obtuvo un gran éxito de ventas en Francia, Italia, Centroeuropa, Rusia y América. Durante estos años expuso en los Salones Roger e inició sus famosas composiciones de ambiente dieciochesco, en las que aparecen personajes vestidos a la moda de la época en el contexto de lujosos interiores, minuciosamente detallados a través de una técnica preciosista, que se recrea en la colorista descripción de ropajes y encajes, pero, sobre todo, en el magistral tratamiento de los tonos de la carne femenina, deliberadamente sensual. También en esta etapa Salinas realizó varias series para la decoración de grandes salones. Además de estos temas, también pintó escenas orientalistas e interiores de iglesias. En la última etapa de su carrera se aprecia una disminución del detallismo, un carácter más suelto y menos descriptivo. Juan Pablo Salinas está representado actualmente en el Museo del Prado (su obra se encuentra en depósito en el Museo de Bellas Artes de Asturias, en Oviedo), en la Colección Bellver de Sevilla y en otras colecciones públicas y privadas.

Valorac. 3 500 - 4 000 EUR

Lote 86 - RICARDO NAVARRETE Y FOS (Serpis, Alicante, 1834 - Madrid, 1909) "Marina Acuarela sobre papel. Firmada en la zona inferior izquierda. Medidas: 25 x 44 cm; 33,5 x 53 cm (marco). Pintor alicantino de la segunda mitad del siglo XIX, hermano del grabador Federico Navarrete, Ricardo abordó en su obra una amplia gama de temas, destacando especialmente en el retrato, la pintura de historia y la de costumbres. Comenzó su formación en la Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia, y luego pasó a la de San Fernando, en Madrid. Alumno aventajado, obtuvo pensiones para Roma y Venecia, y durante su estancia en Italia comenzó a enviar obras a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes. Así, en 1864 obtuvo una mención honorífica, y tres años más tarde su obra "Capuchinos en el coro" le valió una tercera medalla. Navarrete se instaló en Venecia gracias al mecenazgo de José María Olmos, y allí se dedicó a pintar temas de la historia de la ciudad y pequeños cuadros de género veneciano, muy admirados en su época. Siguió participando en concursos oficiales, y en 1873 obtuvo una medalla de oro en la Exposición Internacional de Viena. Ese mismo año pintó un notable retrato del novelista Enrique Pérez Escrich, que fue presentado como homenaje póstumo en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897, año de la muerte del escritor. En 1884 Navarrete regresó a España y ocupó una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, desde donde más tarde se trasladaría a Barcelona y Madrid. También fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. En la actualidad, se conservan obras de Ricardo Navarrete en el Museo del Prado, el Museo Municipal de Játiva, el Museo de Almería, la Diputación Provincial de Zamora, el Ayuntamiento de Irún, el Gobierno Civil de Vitoria y otras colecciones públicas y privadas.

Valorac. 1 200 - 1 500 EUR

Lote 87 - JOSÉ MARÍA SERT BADIA (Barcelona, 1874 - 1945). Sin título, boceto para el Salón de los Bucaneros en Kent House, Londres, 1913. Óleo sobre tabla. Presenta xilófagos en el marco. Medidas: 42 x 53 cm; 44 x 55 cm (marco). La obra que aquí se presenta es un boceto al óleo sobre tabla que Sert realizó en 1913 como parte del proyecto de decoración de la residencia londinense de Sir Saxton Noble, conocida como Kent House. Las pinturas estaban destinadas a la ornamentación de dos salas contiguas separadas por una columnata de estilo jónico, una utilizada como sala de música y la otra como salón de baile. Según el libro "José María Sert: su vida y su obra", de Alberto del Castillo, esta obra habría decorado la sala de la chimenea (que debería corresponder a la sala de música). Afirma que "la decoración de la sala contigua, la de la chimenea, es como un viaje al país de los sueños". Y prosigue: "El panel de la derecha -que correspondería al trabajo final de la obra licitada- representa un puerto fantástico de Oriente, evocando la poesía parnasiana. Un primer plano con pavimento de ladrillos de colores, un canal lleno de barcos al fondo, es un tema veneciano al estilo de Bellini o Carpaccio, que Tiepolo siguió todavía en su Embarco de Cleopatra". Formado con Benito Mercadé y Pere Borrell, fue miembro del Círculo Artístico de Sant Lluc y más tarde discípulo de A. de Riquer. En 1900 Torras i Bages le encargó una gran decoración mural para la Catedral de Vic, de la que presentó bocetos y lienzos preparatorios en 1905 y 1907 en Barcelona y París, de los que esta obra es un ejemplo. Gracias a sus exposiciones en el extranjero, pronto adquirió un extraordinario prestigio entre la aristocracia francesa e inglesa, para la que realizó suntuosas decoraciones. En 1908 decoró la Sala de los Pasos Perdidos del Palacio de Justicia de Barcelona, y en 1910 presentó la decoración mural del salón de baile del marqués de Alella (Barcelona) en el Salón de Otoño de París y decoró el salón de música de la princesa de Polignac en París. Dos años más tarde expuso un importante grupo de obras en el Salón de la capital francesa. En los años siguientes trabajó para la reina Victoria Eugenia (Santander) y para Robert Rotschild (Chantilly), y expuso en solitario en Londres, en la Agnew Gallery. En 1920 se casa en París con Maria Godebska, "Misia", musa de la escena artística parisina. Pinta nuevos murales para importantes casas de Park Lane (Inglaterra), Buenos Aires, Palm Beach y París, y en 1926 realiza, con gran expectación, una exposición de sus obras para la catedral de Vic en el Jeu de Paume de París. En 1927, con el apoyo de su amigo y mecenas Francesc Cambó, terminó la parte principal de la decoración de la catedral, que se completó con la construcción de los lunetos entre 1928 y 1929. En 1930 fue nombrado miembro de la Academia de San Fernando, y en los años siguientes trabajó por todo el mundo, pintando importantes murales como los del Waldorf Astoria de Nueva York, la capilla del Palacio de Liria de Madrid y la Sala del Consejo de la Sociedad de Naciones en Ginebra. Fue el pintor decorativo más eminente de su época, y su estilo se caracterizó por una gran imaginación al servicio de un lenguaje retórico influido por el orientalismo y el expresionismo de Goya, con un cromatismo basado casi exclusivamente en tonos dorados y sepias.

Valorac. 4 000 - 5 000 EUR

Lote 88 - JOSÉ MARÍA SERT (Barcelona, 1874 - 1945). "Pueblo de libertad" y "Pueblo de comerciantes", 1932-1934. Boceto para el auditorio del Museo San Telmo de San Sebastián. Óleo sobre tabla. Los paneles definitivos publicados en "José María Sert. Su vida y su obra", Alberto del Castillo, pp. 215 y 218. Medidas: 74,5 x 53,5 cm. Este lienzo presenta dos escenas. Por un lado, "Pueblo de la Libertad", que muestra el Árbol de Guernica, símbolo de las libertades de Vasconia, que se alza con sus ramas secas frente al peristilo de la Casa de las Juntas. Alberto del Castillo afirma que "la figura de la Libertad vuela por los aires, centrando una aureola centelleante que surcan los rayos de gloria". Al pie del viejo roble, un gran libro abierto simboliza el Fuero de Bizkaia; por su parte, "Pueblo de comerciantes" representa la escena dedicada a la Real Compañía Guipuzkoana de Caracas, entidad que dio a la provincia un inusitado auge económico a lo largo del siglo XVII. Esta obra exalta a los vascos como pueblo de comerciantes. Ambas composiciones fueron pintadas para la decoración del gran salón del Museo del antiguo convento de San Telmo de San Sebastián, una de las decoraciones más vistosas de la vida del pintor. Formado con Benito Mercadé y Pere Borrell, Sert fue miembro del Círculo Artístico de Sant Lluc. En 1908 decoró la Sala dels Pasos Perdus del Palacio de Justicia de Barcelona, y en 1910 presentó la decoración mural del salón de baile del marqués de Alella (Barcelona) en el Salón de Otoño de París y decoró el salón de música de la princesa de Polignac en París. En los años siguientes trabajó para la reina Victoria Eugenia (Santander) y para Robert Rotschild (Chantilly). Pinta nuevos murales para importantes casas de Park Lane (Inglaterra), Buenos Aires, Palm Beach y París, y en 1926 realiza, con gran expectación, una exposición de sus obras para la catedral de Vic en el Jeu de Paume de París. En 1927, con el apoyo de su amigo y mecenas Francesc Cambó, terminó la parte principal de la decoración de la catedral, que se completó con la construcción de los lunetos entre 1928 y 1929. En 1930 fue nombrado miembro de la Academia de San Fernando, y en los años siguientes trabajó por todo el mundo, realizando importantes murales como los del Waldorf Astoria.

Valorac. 7 000 - 9 000 EUR

Lote 89 - ANTONIO REYNA MANESCAU (Coín, Málaga, 1859 - Roma, 1937). "Canal de Venecia". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 35 x 75 cm; 48,5 x 89 cm (marco). Las vistas venecianas de Antonio Reyna llevaron el género de los Vedutti al más alto grado de artisticidad. En este paisaje urbano, estamos ante un destacado exponente de su capacidad para conjurar el "genius loci" del lugar, el sabor local. Una mañana cualquiera, el paseo adoquinado junto al canal está abarrotado de transeúntes, mujeres atareadas, una bebiendo agua de la fuente, otra comprando en la frutería, bajo el toldo a rayas.... Con un lenguaje vivo y colorista, con una audaz pincelada impresionista, Reyna despliega una magnífica panorámica que se escapa hacia las casas libremente apiñadas tras el puente. Considerado hoy uno de los paisajistas andaluces más importantes del siglo XIX, Antonio Reyna inició su formación en la Escuela de Bellas Artes de Málaga, donde tuvo como maestros a Joaquín Martínez de la Vega y Bernardo Ferrándiz. Desde muy joven expuso sus obras con asiduidad, destacando en el ambiente artístico local por sus composiciones coloristas y atractivas y la soltura de su pincelada. En 1882 obtuvo una pensión de la Diputación de Málaga para ampliar estudios en Italia. Tras su viaje a Italia, Roma se convirtió en el lugar de residencia de Reyna, y allí se quedó a vivir para siempre. En Roma frecuentó, como tantos otros españoles, a Villegas, e influido en cierta medida por la obra de este pintor, Reyna trabajó algunos temas orientales y "casacones", estos últimos de exquisita factura y refinada variedad cromática. Al mismo tiempo, como miembro de la colonia española, participó en las tertulias del Café Greco. Aunque su residencia habitual estaba en la capital italiana, el artista viajó varias veces a Venecia, desde donde en 1885 pintó una vista del Gran Canal, y en 1887 realizó abundantes "vedute" de la ciudad. Su pintura, tratada desde una perspectiva de cierto pintoresquismo, se centra en la realización, en pequeños formatos, de paisajes urbanos, repitiéndolos en numerosas ocasiones con mínimas variaciones. Venecia era en ese momento uno de los mayores focos de atracción para los españoles gracias a la influencia del maestro Fortuny y al peso de la producción veneciana de Villegas, sumándose también el efecto de las estancias veraniegas de Martín Rico, cuyos preciosos paisajes fueron transmitidos a Reyna. En 1887, un lienzo desaparecido de grandes proporciones, titulado "Floralia", le valió una medalla de tercera clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes, siendo considerado en su momento como el mejor cuadro del pintor. En 1910, con motivo del fallecimiento de su madre, Reyna pasó una temporada en su ciudad natal. Allí se inspiró para crear otro de sus cuadros más celebrados, el lienzo "Rancho Andaluz", que expuso en la Exposición Internacional de Bellas Artes de Roma al año siguiente. Unos años antes, en 1895, la reina regente María Cristina le había concedido la cruz de caballero de la orden de Carlos III, asociando el hecho a la realización de unas sobrepuertas que más tarde pasaron al Ateneo de Madrid, aunque al parecer ahora no se encuentran en ese paradero. Reyna también exportó su obra a Londres, especialmente sus vistas venecianas. También realizó exposiciones periódicas en Roma, mostrando entre otras obras dos retratos del Papa Benedicto XV, que demuestran su maestría en este género. En su pintura, ciertamente novedosa para la época, el pintor mostró en todo momento su destreza en el dibujo, así como una habilidad innata para la composición, marcada por la audacia de su pincelada y una gran riqueza cromática.

Valorac. 18 000 - 20 000 EUR

Lote 90 - JOSÉ MONGRELL TORRENT (Valencia, 1870 - Barcelona, 1937). "Esperando la pesca", 1921. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado en la esquina inferior izquierda. Presenta una pequeña mancha en la zona central derecha. Medidas: 130 x 104 cm; 148 x 120 cm (marco). José Mongrell estudió en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, donde fue discípulo de Ignacio Pinazo y Joaquín Sorolla. Adquirió renombre artístico gracias a su participación en numerosos concursos y exposiciones en Madrid y Barcelona. En 1897 realizó, con gran éxito, el cartel taurino de la Feria de San Jaime de Valencia, y de hecho su cartel de la Feria de Julio de Valencia de 1912 fue reeditado en 1971 con motivo del centenario de estas fiestas. Obtuvo una plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona, donde residió el resto de su vida. De esta época destacan sus trabajos para el Palacio de la Generalitat de Catalunya, a cargo de la Diputación de Barcelona, así como su retrato del rey Alfonso XIII. También realizó mosaicos de estilo Art Nouveau, como los del gran arco del Mercado de Colón y la fachada de la Estación del Norte, ambos en Barcelona. Mongrell se dedicó a las escenas de género, retratos y paisajes, y fue un maestro de la captación del instante, dotando a sus escenas de vitalidad y dinamismo a través de colores vivos y naturalistas y de la luz. Tradicionalmente encasillado como discípulo de Sorolla, Mongrell, sin embargo, sólo aprendió del maestro aquello que le ayudó a ampliar su arte. El pintor desarrolló su obra a caballo entre el regionalismo y el modernismo, pero también se aprecia en ella cierto simbolismo de influencia francesa. De hecho, Mongrell se caracterizó por su énfasis en el contenido, atribuyendo a la imagen un significado que iba más allá de la pura apariencia. En una época en la que predominaban las composiciones históricas grandiosas, idealistas y dramáticas, Mongrell desarrolló un estilo pictórico preocupado por representar el pasado y el presente desde una perspectiva cotidiana, amable y pintoresca, alejada en general de la grandilocuencia y la teatralidad de la pintura histórica académica. A pesar de su dominio técnico, Mongrell no cayó, como otros, en un refinado manierismo al servicio de una temática intrascendente, sino que desarrolló un lenguaje plenamente personal, caracterizado por su dinamismo y libertad expresiva. José Mongrell está representado actualmente en el Museo de Bellas Artes San Pío V y en el Museo Nacional de Cerámica y de Artes Suntuarias González Martí de Valencia, en los Museos de Bellas Artes de Asturias, Badajoz y Pontevedra, en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, en el Rijksmuseum de Amsterdam, en el Museo de La Habana y en el Museo de Bellas Artes de Buenos Aires, entre otros. La maestría del luminismo de Mongrell, pintor clave para entender el impresionismo valenciano, queda demostrada en el presente lienzo. En él el artista nos regala uno de sus temas predilectos, el costumbrista, que aúna un paisaje costero con escenas cotidianas de la vida diaria, protagonizadas por dos mujeres populares captadas con una dignidad que las equipara a los antiguos héroes clásicos. Esto es perfectamente visible en la presente obra, en la que nuestra mirada queda irremediablemente atrapada por la magnética expresión de lo que parecen ser una madre y una hija representadas con el humilde estilo de Mongrell. La madre, vestida con el traje popular de los pescadores valencianos, mira a lo lejos, esperando la pesca, mientras la hija está dentro de la barca, esperando las órdenes de su madre. Las figuras aparecen en primer plano, ocupando la mayor parte de la superficie pictórica, destacando sobre un paisaje de playa magníficamente trabajado, cuyos tonos parecen hacerse eco de los colores de las ropas de las figuras.

Valorac. 24 000 - 26 000 EUR

Lote 91 - JOAQUÍN SOROLLA Y BASTIDA (Valencia, 1863 - Cercedilla, Madrid, 1923). "Paisaje de sierra", c. 1887-1889. Óleo sobre tabla. Agradecemos a Blanca Pons Sorolla su ayuda en el peritaje de la obra. Próximamente la obra será incluida en el catálogo razonado del artista (nº BPS-3860). Medidas: 14 x 11 cm; 47 x 43 cm (marco). Este cuadro pertenece a un periodo seminal de la producción de Sorolla, concretamente a la etapa en la que residió en Roma, periodo clave para su formación. Podemos apreciar en este paisaje intimista magistralmente resuelto donde el artista ya está definiendo una pincelada suelta y vibrante que le llevará al pleno y justo reconocimiento de su inconfundible técnica. La expresividad es máxima gracias a los hábiles toques que combinan pinceladas rápidas y quebradas con una paleta de ocres y marrones en sabio contraste con los tonos claros de las carnaciones y los blancos drapeados. Ya en su época escolar, Joaquín Sorolla mostró su afición por el dibujo y la pintura, asistiendo por las tardes a las clases de dibujo que impartía el escultor Cayetano Capuz en la Escuela de Artesanos. Premiado al finalizar sus estudios preliminares en la Escuela Normal Superior, ingresó en la prestigiosa Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia en 1879. Además, durante sus visitas a Madrid en 1881 y 1882, copió cuadros de Velázquez, Ribera y El Greco en el Museo del Prado. Dos años más tarde obtuvo un gran éxito en la Exposición Nacional de Bellas Artes con un cuadro de historia, lo que le animó a solicitar una beca para estudiar en la Academia Española de Bellas Artes de Roma. Conseguido su objetivo, en 1885 Sorolla partió hacia Roma, permaneciendo en París varios meses antes de llegar. En la capital francesa le impresionaron los cuadros de los realistas y los pintores que trabajaban al aire libre. Al término de sus años en Roma regresó a Valencia en 1889, estableciéndose en Madrid al año siguiente. En 1892 Sorolla muestra una nueva preocupación en su arte, interesándose por los problemas sociales al representar la triste escena de "¡Otra Margarita!", premiada con una medalla de primera clase en el Nacional, y al año siguiente en el Internacional de Chicago. Esta sensibilidad permanecerá en su obra hasta finales de la década, en sus actuaciones en la costa valenciana. Poco a poco, sin embargo, el maestro valenciano abandonará los temas de niños infelices que vemos en "Triste herencia", que había sido premiada en la Exposición Universal de París en 1900 y en la Nacional de Madrid un año después. Animado por el éxito de sus resplandecientes imágenes del Mediterráneo, y estimulado por su amor a la luz y la vida de sus soleadas playas, se centró en estas escenas en sus obras, más alegres y agradables, con las que alcanzaría fama internacional. En 1906 celebró su primera exposición individual en la Galería George Petit de París, donde también demostró sus dotes como retratista. En 1908, el norteamericano Archer Milton Huntington, impresionado por la exposición del artista en la Grafton Gallery de Londres, quiso adquirir dos de sus obras para su Hispanic Society. Un año más tarde, él mismo invitó a Sorolla a exponer en su institución, lo que dio lugar a una exposición en 1909 que fue un gran éxito. La relación entre Huntington y Sorolla desembocó en el encargo más importante de la vida del pintor: la creación de los inmensos lienzos destinados a ilustrar, en los muros de la Hispanic Society, las regiones de España. Tratando de captar la esencia de las tierras y gentes de su país, Sorolla viajó por toda España entre 1911 y 1919, sin dejar de realizar exposiciones. Incapacitado por un ataque de hemiplejía en 1921, Sorolla murió dos años después, sin ver su gran "Visión de España", que no se instalaría hasta 1926. Actualmente está representado en el Museo del Prado y el que lleva su nombre de Madrid, el Metropolitan de Nueva York, el Museo de Orsay de París, el J. Paul Getty de Los Ángeles, los museos de Bellas Artes de Bilbao y Valencia, la National Portrait Gallery de Londres y muchos otros. Agradecemos a Blanca Pons Sorolla su ayuda en el análisis pericial de la obra. La obra se incluirá próximamente en el catálogo razonado del artista (nº BPS-3860).

Valorac. 20 000 - 25 000 EUR

Lote 92 - Escuela francesa; segunda mitad del siglo XIX. "Bodegones". Óleo sobre lienzo. Presentan restauraciones. Medidas: 70 x 95 cm (x2). Inspiradas en el género tradicional de los bodegones, las presentes imágenes se reúnen en una composición clásica basada en una estructura piramidal con la mayoría de los elementos en primer plano y completamente visibles para el espectador. Las obras destacan por la abundancia de alimentos que van desde higos, peras, una calabaza, pollo, huevos en una de ellas, mientras que el otro cuadro muestra pan, carne y una lata de conservas entre otras cosas. En uno de los casos, el artista presenta una escena iluminada con un fondo neutro que realza el volumen de los alimentos, que han sido plasmados de forma cuidadosa, prestando especial atención a las calidades de cada uno de ellos, como se aprecia en el tratamiento de la porcelana de la sopera o en el brillo de los cubiertos metálicos. Un recurso a tener en cuenta es la forma en que está dispuesto el mantel, dejando parte de la mesa al descubierto, mientras que la otra parte está cubierta por un delicado mantel blanco sobre el que descansan las sombras de la escena. Las obras que se definen por una pincelada suelta no pierden la esencia de la pintura realista, como ya se ha mencionado. Sin embargo, hay que señalar que esta coexistencia entre ambos estilos pictóricos es propia del siglo XIX, época en la que las corrientes se unieron y solaparon debido al gran desarrollo artístico de la escuela francesa. El bodegón o naturaleza muerta ocupaba el peldaño más bajo de la jerarquía de los géneros en la historia del arte, sin embargo, cada vez era más popular entre los compradores. Además del tema independiente del bodegón, abordaba otros tipos de temas pictóricos utilizando elementos destacados, generalmente simbólicos, e imágenes que recurrían a multitud de elementos de la naturaleza para reproducir aparentemente un trozo de vida. Presenta restauraciones.

Valorac. 7 000 - 8 000 EUR

Lote 93 - PERE PRUNA OCERANS (Barcelona, 1904 - 1977). "Escena onírica". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 54 x 73 cm; 68 x 87 cm (marco). En esta ocasión, Pere Pruna nos sumerge en una escena enigmática, protagonizada por una muchacha alada con dos toros. Uno de los toros ladea la cabeza y sentimos la intensidad de su mirada. Otra figura se recorta contra el horizonte. La escena admite varias interpretaciones, todas ellas relacionadas con la vida y la muerte, la fuerza telúrica materializada en el animal instintivo y la espiritualidad concretada en la figura angelical. Artista principalmente autodidacta, Pere Pruna completó su formación en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona. Tras empezar a exponer en Barcelona siendo aún muy joven, viajó a París en 1921, donde recibió la ayuda y la guía de Picasso. En la capital francesa realizó una exitosa exposición individual en la Galerie Percier, y entró en contacto con intelectuales como Cocteau, Drieu la Rochelle, Max Jacob y otros, con los que fundó la revista "Philosophie" en 1924. Serge Diaghilev, que visitó una de sus exposiciones, también le propuso crear los decorados y el vestuario del ballet "Les matelots" en 1925. Desde entonces también trabajó en otras obras musicales, como "La vie de Polichinele" (1934) y "Oriane" (1938), entre otras. En 1928 obtuvo el segundo premio absoluto en la exposición del Carnegie Institute de Pittsburg y posteriormente, a su regreso a Barcelona, obtuvo otros galardones como el concurso "Montserrat vista por los artistas catalanes" (1931) o el Premio Nonell (1936). Este último estuvo rodeado de polémica, ya que Pruna lo obtuvo por su óleo "El vi de Chios", para el que utilizó como modelo una fotografía publicada en una revista pornográfica parisina. Ante el revuelo causado, Pruna renunció al premio, pero el jurado ratificó su decisión. Tras el estallido de la Guerra Civil, Pruna se instala en París y prosigue su actividad expositiva internacional, con una exposición organizada en Londres en 1937. Al mismo tiempo trabajó para los servicios de propaganda de Ridruejo, con obras como el cartel conmemorativo de la promulgación de la Fuerza del Trabajo, y Eugenio d'Ors, Jefe Nacional de Bellas Artes, le presentó a la representación española en la Bienal de Venecia de 1938. Tras la guerra, compaginó las exposiciones de pintura de caballete con la pintura mural, género en el que fue especialmente celebrada su obra en el Monasterio de Montserrat. En 1965 ganó el premio Ciudad de Barcelona, y tres años más tarde fue nombrado académico del Far de Sant Cristòfor. Pere Pruna está representado actualmente en el Museo de Montserrat, donde hay un espacio con su nombre, el MACBA de Barcelona y el Museo Maricel de Sitges, entre otros.

Valorac. 7 000 - 8 000 EUR

Lote 94 - MONTSERRAT GUDIOL COROMINAS (Barcelona, 1933 - 2015). "El Rosario". Óleo sobre tabla. Firmado en el margen inferior. Medidas: 80 x 40 cm; 96,5 x 57 cm (marco). Gudiol consigue en esta escena, sobre un efecto de grisalla, perfilar el delicado óvalo de dos figuras cuyos rasgos y estilizada silueta destilan melancolía. Montserrat Gudiol se inició en el mundo del arte en el taller familiar de restauración de pintura medieval, y desde 1950 se dedica a la pintura sobre tabla y sobre papel. Ese mismo año realiza su primera exposición individual en el Casino de Ripoll (Girona). En 1953 participa en la exposición colectiva "Retrato Actual", en el Círculo Artístico de Barcelona, y al año siguiente debuta en el extranjero con una exposición individual de dibujos celebrada en el Museo de Miami (Estados Unidos). Ese mismo año participa en la exposición colectiva "Pintura femenina" (C.I.C.F. de Barcelona), obtiene el Primer Premio de la Diputación de Barcelona y el Segundo Premio San Jorge de la misma entidad. En 1960 participa en la Exposición Nacional de Bellas Artes celebrada en Barcelona, donde obtiene una tercera medalla, y también participa en el Salón Internacional de Dibujo de la Fundación Ynglada Guillot (Barcelona), obteniendo el Primer Premio. En 1962 realiza una importante exposición individual en la Sala Gaspar de Barcelona (galería en la que repetirá su presencia a partir de entonces), y ese mismo año participa en una exposición colectiva celebrada en el Casón del Buen Retiro, en Madrid. Desde entonces ha seguido realizando exposiciones individuales y participando en colectivas, tanto en España como en Alemania, Sudáfrica, República Checa, China, Francia, Japón, Estados Unidos, Rusia y Canadá. Entre sus exposiciones personales destacan las celebradas en la Galería Pieter Wenning de Johannesburgo (1967), la Galería Tamenaga de Tokio (1974), Au Molin de Vauboyen de París (1978), la Sala de Exposiciones de la Unión de Pintores de la URSS de Moscú (1979), la Galería Dreiseitel de Colonia (1981) y la Galería Walton-Gilbert de San Francisco (1984). En 1980 realizó una importante obra monumental para la Abadía de Montserrat, una representación de San Benito. En 1981 fue la primera mujer en ingresar en la Real Academia Catalana de Bellas Artes de Sant Jordi, y en 1998 la Generalitat de Catalunya le concedió la Cruz de Sant Jordi. Poseedora de un lenguaje personal y sincero, alejado de modas o estilos preconcebidos, Gudiol crea obras caracterizadas por una temática y una atmósfera que muestran un marcado gusto por la fantasía y la introspección. Sus colores y figuras forman un mundo de misterio, poblado por personajes estilizados y ciegos, y escenas de maternidad. Sus óleos y dibujos transmiten la fuerte personalidad de la autora, así como su idea de un arte verdadero. Gudiol aborda los problemas extremos del ser humano, con composiciones caracterizadas por un fondo de silencios profundos, misteriosos e inquietantes, donde el afecto y la emoción entran en diálogo con la ansiedad y la angustia del ser humano. Actualmente está representada en el MACBA, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el Museo de Bellas Artes de Bilbao, los Museos de Arte Moderno de Johannesburgo, San Diego, Miami y Flint (EEUU), la Fundación Joseph Cantor de Indianápolis (EEUU), el Comité Olímpico Internacional de Lausana (Suiza), el Monasterio de Montserrat y la Real Academia de Bellas Artes de Sant Jordi.

Valorac. 3 400 - 4 000 EUR

Lote 95 - RAMÓN MARTÍN DURBAN (Zaragoza, 1904- Caracas, 1968). "Retrato de Concha Piquer. Óleo sobre lienzo. Presenta daños causados por xilófagos en el bastidor. Medidas: 212 x 151 cm; 247 x 188 cm (bastidor). Retrato de la folclórica Concha Piquer (Valencia, 1906 - Madrid, 1990). La obra nos muestra a una Concha de pie con un gran traje que toma casi el protagonismo de la escena. La protagonista no mira al espectador, sino que dirige su mirada más allá, hacia un punto lejano, estableciendo así una cierta distancia con respecto al espectador con un tono amable debido a su sonrisa. Según el "Diccionario antológico de artistas aragoneses, 1947-1978", Ramón Martín Durbán fue pintor, decorador de murales, cartelista e ilustrador gráfico. Su labor artística cobró importancia tras instalarse en Barcelona, donde colaboró activamente en la preparación artística de la Exposición Internacional de Bellas Artes de 1929 y, posteriormente, durante los años de la guerra civil, realizó varios carteles para el gobierno de la Generalitat. Había iniciado su formación artística en Zaragoza con el escultor-decorador Cubero y en la Academia de Dibujo de Abel Bueno. Participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1932, en los Salones de Arte Aragonés de Zaragoza y en los Salones de Otoño y Primavera de Madrid y Barcelona. Se exilió en Venezuela, donde impartió clases de Retrato en la Escuela de Artes Aplicadas de Caracas, desarrollando una abundante actividad pictórica mural. Presenta daños causados por xilófagos en el bastidor.

Valorac. 3 200 - 3 500 EUR

Lote 96 - DARÍO DE REGOYOS (Asturias, 1857 - Barcelona, 1913). "Bosque". ca.1897 Óleo sobre lienzo adherido a cartón. Firmado en la esquina inferior derecha. La obra se incluirá en el próximo catálogo razonado del artista. Fue propiedad del dibujante Manuel Feliú. Agradecemos al Sr. Juan San Nicolás su ayuda en la catalogación de la obra. Se puede adjuntar un certificado de autenticidad a petición y cargo del comprador. Medidas: 18 x 18 cm; 30 x 30 cm (marco). Junto a una estrecha carretera de arena crecen árboles de frondosa copa. A lo lejos se perfila un puente romano. En este paisaje, Regoyos utiliza una pincelada jugosa, rica en matices que van del verde esmeralda al verde limón. Con sutiles irisaciones traduce el juego de luces que se filtra entre las ramas y se proyecta con destreza y sabiduría poética sobre la hierba. A través de pequeños toques de pincel, Regoyos revela una composición en la que se refleja fielmente la atmósfera colorista y sombría de este lugar. Regoyos fue uno de los maestros impresionistas en la captación de la luz fugaz. Formado en la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde estudió paisajismo con el artista belga Carlos de Haes como maestro. Fue entonces cuando los conocimientos del artista asturiano comenzaron a ampliarse hacia las tendencias paisajísticas belgas, gusto e interés que desarrolló viajando a Bélgica en 1879. La estancia en Bruselas fue enriquecedora para Regoyos, asistiendo como alumno a la Real Academia de Bellas Artes de Bruselas. Sin embargo, el academicismo integrado en la institución provocó el abandono del artista, que recurrió al antiguo maestro de Carlos de Haes, Joseph Quinaux, para adquirir nuevas técnicas.Regoyos se integró perfectamente en su nuevo lugar de residencia, conoció a un gran número de artistas, poetas y escritores, de los que aprendió y se completó como artista. Su reconocimiento avanzó gracias a su dinamismo y habilidad artística, lo que le permitió entrar en el famoso Círculo del XX (act. 1883-1894). Podría decirse que fue a partir de entonces cuando la carrera artística de Regoyos comenzó a madurar. En 1886, el artista asturiano desarrolló una etapa puntillista promovida por la participación de George Seurat en una de las exposiciones celebradas en el Círculo del XX. El revuelo e impacto que causó el tratamiento de Seurat provocó la creación de un grupo puntillista, en el que participó Darío de Regoyos. Este innovador movimiento atrajo a artistas impresionistas franceses como Paul Signac, otro referente en la técnica artística de Regoyos. Tras la disolución de Los XX en 1893, Regoyos decidió volver a España donde el panorama artístico era limitado, ya que las nuevas tendencias aún no habían llegado de Francia. Podría decirse que este fue el final de su periodo de aprendizaje, convirtiéndose en maestro de artistas liberalizados del "sorollismo" arraigado en el campo de la pintura de paisaje, y animándoles a difundir sus ideas a través de los medios de comunicación de la época. La trayectoria expositiva del artista asturiano abarcó un gran número de ciudades, como Bilbao, Frankfurt, Berlín, La Haya, Venecia, Bayona, San Sebastián, Londres, México DF, Burdeos y Buenos Aires, entre otras. También está representado en instituciones como el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza, el Museo Nacional de Arte de Cataluña de Barcelona, el Museo de Bellas Artes de Bilbao y la Colección Gerstenmaier, entre otros muchos museos e instituciones.

Valorac. 6 000 - 7 000 EUR

Lote 97 - JOAQUIN AGRASOT (Orihuela, Alicante, 1837 - Valencia, 1919). "Odalisca". Acuarela sobre papel. Firmada en la esquina inferior derecha. Medidas: 35 x 26 cm; 62 x 54 cm (marco). Agrasot comenzó su formación en su Orihuela natal, donde fue pensionado por la Diputación de Alicante para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. Discípulo allí de Francisco Martínez Yago, en sus primeros años obtuvo premios como la medalla de oro en la Exposición Provincial de Alicante de 1860. En 1863 obtuvo una nueva pensión, esta vez para viajar a Roma, donde entró en contacto con Rosales, Casado del Alisal y Fortuny. Con este último estableció estrechos lazos de amistad, y su pintura se vio profundamente influida por el estilo del pintor catalán. Periódicamente envió lienzos a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en las que obtuvo la tercera medalla en 1864 y la segunda en 1867. Agrasot permaneció en Italia hasta 1875; tras la muerte de Fortuny regresó a España, siendo ya un pintor de reconocido prestigio, fue miembro de las Academias de San Carlos y San Fernando, y participó como jurado en varias exposiciones artísticas. En 1886 recibió la medalla de arte en la Exposición Universal de Filadelfia, y en 1888 la segunda medalla en la Exposición Internacional de Barcelona. El estilo de Agrasot se enmarca dentro del realismo, interesándose especialmente por los temas de género y el costumbrismo regional. Sin embargo, también trabajó desnudos, temas orientales y retratos. Está representado en el Museo del Prado, el Museo de Bellas Artes de Valencia, el MUBAG de Gravina (Alicante) y la Academia de San Carlos de Valencia.

Valorac. 800 - 900 EUR

Lote 98 - JOSÉ BENLLIURE GIL (Valencia, 1855 - 1937). Sin título. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 41,5 x 52 cm; 70 x 81 cm (marco). En este retrato de grupo, cada uno de los tipos costumbristas ha sido connotado con personalidades individualizadas. Profundidad psicológica y verismo meticuloso caracterizan esta obra. Los personajes aparecen en primer plano, sobre un fondo neutro que resalta las figuras. Un anciano que parece abatido, mientras el niño canta alegremente, convirtiéndose así en una metáfora de la vida y de las diferentes etapas de la misma. José Benlliure inició sus estudios artísticos con Francisco Domingo en Valencia, y luego continuó su formación en Madrid, donde se estableció en 1869. Desde muy joven gozó del mecenazgo del Rey de Saboya y en 1879 se trasladó a Roma, donde fue descubierto por el importante marchante Martín Colnaghi, quien financió sus estudios en la ciudad. En 1897 realizó varios viajes a Tánger, Argelia y Marruecos, donde se acercó al mundo cotidiano de los lugares que visitaba a través de una pintura realista, luminosa y suelta. A partir de 1900 su obra representa temas populares. Participó en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, obteniendo terceras medallas en las ediciones de 1876 y 1878 y primera en la de 1887. Perteneció a las Academias de San Fernando (Madrid), San Lucas (Roma), San Carlos (Valencia), Brera (Milán) y Munich. Entre 1904 y 1912 dirigió la Academia de España en Roma. La parte más importante de su producción se conserva en Valencia, en su Casa Museo y en el Museo de Bellas Artes San Pío V. También está representado en el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza y el Palacio de Carlos V de Granada, entre otros.

Valorac. 4 200 - 4 500 EUR

Lote 99 - PLÁCIDO FRANCÉS Y PASCUAL (Alcoy, 1834 - Madrid, 1902). "Mosquetero Óleo sobre tabla. Firmado en la esquina inferior derecha. Medidas: 20 x 15,5 cm; 42 x 36 cm (marco). Los retratos y escenas de mosqueteros fueron muy populares entre la clientela burguesa del siglo XIX, en un contexto heredero aún del romanticismo, que buscaba en la recreación idealizada del pasado una evasión de la realidad cotidiana. Numerosos pintores de la época trabajaron en esta línea, buscando plasmar con el mayor verismo posible escenas del pasado recreadas con una precisa atención al detalle, trabajadas con un lenguaje de raíces académicas. Este tipo de escenas protagonizadas por mosqueteros se enmarcan dentro del género de la pintura de casacón, escenas trabajadas con un especial afán narrativo y descriptivo, que en España tendrán como principal referente formal a Velázquez y sus contemporáneos. Nacido en Alcoy, inició su formación artística en Valencia, en la Academia de San Carlos de Valencia, pero se trasladó a Madrid en 1854 para completar sus estudios. Allí ingresó como alumno en la Academia de San Fernando de Madrid, más tarde, en 1861, fue nombrado Catedrático de la Escuela de Bellas Artes de Valencia y posteriormente de Artes e Industrias de Madrid. En 1882 se le concedió la Cruz de Carlos III. Antonio Cortina Farinós fue uno de sus alumnos más conocidos. En 1862 realizó decoraciones para el "Palacio del Marqués de Dos Aguas" de Valencia. Cuatro años más tarde, pintó medallones de Venus en el techo con putti y querubines para el salón de baile del palacio. También trabajó en los palacios del duque de Santoña y del marqués de Larios. En 1870 se trasladó a Madrid, donde fue uno de los fundadores del Círculo de Bellas Artes y de la Asociación de Acuarelistas de Madrid. También se convirtió en profesor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y comenzó a exponer sus obras en la Exposición Nacional de Bellas Artes, donde ganó medallas en 1871, 1890 y 1892. Sus ilustraciones aparecieron con frecuencia en la revista Blanco y Negro. Murió en Madrid a la edad de 68 años. Dos de sus hijos también fueron pintores: Fernanda Francés y Arribas (1862-1939), que se especializó en la pintura de flores, y Juan Francés Mexía (1873-1954) y su primo fue el pintor Emilio Sala, que también fue alumno suyo.

Valorac. 1 400 - 1 700 EUR

Lote 100 - JOAQUIN AGRASOT (Orihuela, Alicante, 1837 - Valencia, 1919). "Escena religiosa". Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior izquierda. Medidas: 37,5 x 23,5 cm; 62 x 48 cm (marco). En esta obra vemos un tema muy del gusto de la burguesía española de la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX, las escenas costumbristas, alegres y narrativas, protagonizadas por traviesos monaguillos. Lo más habitual era que estas escenas fueran tratadas como vemos aquí, con un dibujo preciso y descriptivo y una especial atención al detalle, tanto en gestos, expresiones y vestimentas como en la escenografía que rodea a los muchachos, normalmente interiores como el que aquí se representa, una dependencia del templo ricamente decorada. Agrasot comenzó su formación en su Orihuela natal, donde fue pensionado por la Diputación de Alicante para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. Discípulo allí de Francisco Martínez Yago, en sus primeros años obtuvo premios como la medalla de oro en la Exposición Provincial de Alicante de 1860. En 1863 obtuvo una nueva pensión, esta vez para viajar a Roma, donde entró en contacto con Rosales, Casado del Alisal y Fortuny. Con este último estableció estrechos lazos de amistad, y su pintura se vio profundamente influida por el estilo del pintor catalán. Periódicamente envió lienzos a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, en las que obtuvo la tercera medalla en 1864 y la segunda en 1867. Agrasot permaneció en Italia hasta 1875; tras la muerte de Fortuny regresó a España, siendo ya un pintor de reconocido prestigio, fue miembro de las Academias de San Carlos y San Fernando, y participó como jurado en varias exposiciones artísticas. En 1886 recibió la medalla de arte en la Exposición Universal de Filadelfia, y en 1888 la segunda medalla en la Exposición Internacional de Barcelona. El estilo de Agrasot se enmarca dentro del realismo, interesándose especialmente por los temas de género y el costumbrismo regional. Sin embargo, también trabajó desnudos, temas orientales y retratos. Está representado en el Museo del Prado, el Museo de Bellas Artes de Valencia, el MUBAG de Gravina (Alicante) y la Academia de San Carlos de Valencia.

Valorac. 2 200 - 2 500 EUR