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Descripción

LUIS DE MADRAZO Y KUNTZ (Madrid, 1825 - 1897). "Éxtasis de San Francisco de Asís". Óleo sobre lienzo. Retoque. Tiene repintes. Medidas: 153 x 117 cm. Hijo de José de Madrazo y hermano de Federico y Pedro, Luis de Madrazo gozó de gran prestigio en vida, siendo primero profesor (catedrático de Dibujo de lo Antiguo y Ropajes) y más tarde director de la Escuela de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid, y reconocido con honores como el nombramiento de comendador de la Orden de Isabel la Católica, así como académico de número del Real de Bellas Artes de San Fernando. Cultivó los temas religiosos e históricos, aunque fue especialmente elogiado como retratista. Comenzó su formación con su padre y posteriormente la amplió en la Escuela de San Fernando de Madrid. Ya en 1845 trabajaba como ilustrador para "El Semanario Pintoresco". Más tarde trabajó también como dibujante para el "Semanario Pintoresco Español". En 1848 viajó a Roma para ampliar sus estudios artísticos en la Academia Nacional de San Lucas y en la Academia Francesa de Villa Médicis. En Roma entró en contacto con Friedrich Overbeck a través de Antonio Solá. Del pintor romántico alemán recibió una poderosa influencia nazarena, que se aprecia en su obra desde entonces. Más tarde viajó a París, Venecia, Múnich y Berlín antes de regresar a Italia en la década de 1890, instalándose en Pompeya con los pintores Bernardino Montañés y Francisco Sáinz. Finalmente regresó a España para iniciar su carrera docente en San Fernando y se introdujo en los círculos artísticos de Madrid de la mano de su padre y su hermano Federico. Con este último trabajó en el Museo del Prado. Como pintor, Luis de Madrazo se dedicó casi exclusivamente al retrato, trabajando para organismos oficiales y también para la nobleza. Dio a conocer su obra, caracterizada por la pureza de líneas y la nitidez de color y luz propias de la más estricta estética nazarena, a través de diversos concursos y exposiciones oficiales celebrados tanto en España como en el extranjero. En 1855 obtuvo un gran éxito en la Exposición Universal de París, y al año siguiente ganó la primera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid por su obra "Pelayo en Covadonga". También obtuvo una medalla de plata en la Exposición Franco-Española de 1864. En la actualidad, Luis de Madrazo está representado en el Museo del Prado, la Real Academia de la Historia de Madrid, el Museo Lázaro Galdiano de la misma ciudad y otras importantes colecciones públicas y privadas.

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LUIS DE MADRAZO Y KUNTZ (Madrid, 1825 - 1897). "Éxtasis de San Francisco de Asís". Óleo sobre lienzo. Retoque. Tiene repintes. Medidas: 153 x 117 cm. Hijo de José de Madrazo y hermano de Federico y Pedro, Luis de Madrazo gozó de gran prestigio en vida, siendo primero profesor (catedrático de Dibujo de lo Antiguo y Ropajes) y más tarde director de la Escuela de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid, y reconocido con honores como el nombramiento de comendador de la Orden de Isabel la Católica, así como académico de número del Real de Bellas Artes de San Fernando. Cultivó los temas religiosos e históricos, aunque fue especialmente elogiado como retratista. Comenzó su formación con su padre y posteriormente la amplió en la Escuela de San Fernando de Madrid. Ya en 1845 trabajaba como ilustrador para "El Semanario Pintoresco". Más tarde trabajó también como dibujante para el "Semanario Pintoresco Español". En 1848 viajó a Roma para ampliar sus estudios artísticos en la Academia Nacional de San Lucas y en la Academia Francesa de Villa Médicis. En Roma entró en contacto con Friedrich Overbeck a través de Antonio Solá. Del pintor romántico alemán recibió una poderosa influencia nazarena, que se aprecia en su obra desde entonces. Más tarde viajó a París, Venecia, Múnich y Berlín antes de regresar a Italia en la década de 1890, instalándose en Pompeya con los pintores Bernardino Montañés y Francisco Sáinz. Finalmente regresó a España para iniciar su carrera docente en San Fernando y se introdujo en los círculos artísticos de Madrid de la mano de su padre y su hermano Federico. Con este último trabajó en el Museo del Prado. Como pintor, Luis de Madrazo se dedicó casi exclusivamente al retrato, trabajando para organismos oficiales y también para la nobleza. Dio a conocer su obra, caracterizada por la pureza de líneas y la nitidez de color y luz propias de la más estricta estética nazarena, a través de diversos concursos y exposiciones oficiales celebrados tanto en España como en el extranjero. En 1855 obtuvo un gran éxito en la Exposición Universal de París, y al año siguiente ganó la primera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid por su obra "Pelayo en Covadonga". También obtuvo una medalla de plata en la Exposición Franco-Española de 1864. En la actualidad, Luis de Madrazo está representado en el Museo del Prado, la Real Academia de la Historia de Madrid, el Museo Lázaro Galdiano de la misma ciudad y otras importantes colecciones públicas y privadas.

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