Incensario. China, finales del siglo XIX. Cerámica celadón. Estilo Longquan. Medidas: 30 x 25 cm (diámetro). Incensario de cerámica apoyado sobre tres patas, de cuerpo globular con asas laterales y tapa. La ornamentación sintética consiste en motivos vegetales en el cuerpo a los que se añaden ornamentos zoomorfos, como las asas que representan dos colas de pez o el perro Foo que sirve de asa de la tapa superior. El celadón es muy popular en Asia, ya que permite obtener el color del jade, la piedra sagrada. Los artesanos chinos reprodujeron los antiguos bronces, por lo que abandonaron el color ocre por un verde cremoso que realza sus obras maestras, el famoso color que ahora se asocia al nombre de celadón. La edad de oro del celadón se extendió del siglo XI al XIV en China, durante las dinastías Song y Yuan, la primera gobernó China del 960 al 1279. El clasicismo artístico de la dinastía Song abarcaba todos los medios de expresión y las piezas que se fabricaban eran más para el disfrute de la contemplación que para su uso. Las vajillas de celadón son generalmente monocromas, a veces desprovistas de ornamentación, y a menudo decoradas con motivos sencillos y finamente elevados en relieve, con labios lobulados o simplemente con una mayor abertura hacia el exterior que confieren a las vajillas una elegancia añadida a la monotonía cromática del monocolor.