Null TETSU, Roger TESTU (1913-2008)

Nunca hubiera imaginado que el dueño de una…
Descripción

TETSU, Roger TESTU (1913-2008) Nunca hubiera imaginado que el dueño de una belleza ¡el negocio de los productos de belleza podría tener una canica así! ¡Una canica! Tinta y aguada sobre papel firmada abajo a la izquierda 32,5 x 25cm - 12.79 x 9.84 in. Tinta y aguada sobre papel firmada abajo a la izquierda

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TETSU, Roger TESTU (1913-2008) Nunca hubiera imaginado que el dueño de una belleza ¡el negocio de los productos de belleza podría tener una canica así! ¡Una canica! Tinta y aguada sobre papel firmada abajo a la izquierda 32,5 x 25cm - 12.79 x 9.84 in. Tinta y aguada sobre papel firmada abajo a la izquierda

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Donatien-Alphonse-François, marqués de SADE. L.A.S., París [prisión de Sainte-Pélagie] 3 termidor X (22 de julio de 1802), a su esposa, "Madame de Sade" en París; 3páginas en-4, sobre. Se entera de que ella acaba de "hacer oposición sobre la renta de los bienes que poseo en Provenza; ¡con el ridículo espantoso de esta gestión me fue fácil ver cuáles eran sus consejos y hasta qué punto eran peligrosos! Se opuso a Mazan y Saumane, a pesar de que "las rentas de estos dos terrenos se destinan específica y únicamente al pago de los acreedores familiares", arreglo difícil de hacer aceptar: "vuestra objeción, al alterar el equilibrio de esta balanza, provoca un incendio en mis asuntos que nada podrá apagar", con numerosos pleitos... La oposición a su propiedad en Arles afecta "al único pan que me queda para vivir. Y es mientras estoy entre grilletes, mientras sufro todo tipo de torturas imaginables, cuando tú, piadosamente del lado de mis verdugos, vienes devotamente y en silencio a añadir a las torturas que me hacen sufrir, la bondad religiosa de hacerme morir de hambre...". Se trata de un "proyecto aconsejado por el diablo"... Vuelve sobre las condiciones de su separación, "una separación que se te exige, que yo nunca te habría propuesto y a la que sólo accedí de mala gana"; ella había prometido en su momento no exigir nada a su marido... Denuncia a los canallas que la aconsejan, y le ruega que abandone "el execrable proyecto de arruinaros tanto a ti como a tus hijos, reduciendo a tu marido a morir él mismo de hambre"... Por último, la exhorta "a que no me haga arrepentir por no haberla reembolsado en asignaciones como hubiera podido hacerlo, a que no me obligue a divulgar, sobre todo, los motivos políticos que desesperan tanto a usted como a sus hijos, el estado de ánimo en que se encuentran todos, el uso que he hecho de los fondos de la venta de la Coste, [...] a que no me obligue a divulgar todo esto"...