RUIZ SANCHEZ MORALES Manuel Bernardino (1857-1922)
Gitano tocando la guitarra 
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RUIZ SANCHEZ MORALES Manuel Bernardino (1857-1922) Gitano tocando la guitarra Acuarela sobre papel Firmada arriba a la derecha (manchas marrones) 70 x 48 cm (vista)

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RUIZ SANCHEZ MORALES Manuel Bernardino (1857-1922)

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MANUEL GARCÍA RODRÍGUEZ (Sevilla, 1863 - 1925). "Convento de Capuchinos de Sanlúcar de Barrameda", 1921. Óleo sobre lienzo. Tiene un marco de principios del siglo XX. Firmado, fechado y situado en la zona inferior izquierda. Medidas: 70 x 111 cm; 87 x 131 cm (marco). Manuel García Rodríguez comenzó su formación en el Seminario de Sevilla, aunque poco después decidió dedicarse a la pintura, iniciándose en este arte de la mano de José de la Vega Marrugal. Poco después ingresó en la Escuela de Bellas Artes, donde tuvo como profesores a Eduardo Cano y Manuel Wssel. Influido por Sánchez Perrier, a partir de 1885 se dedicó al paisaje, disciplina en la que se especializó, logrando múltiples éxitos. Obtuvo una tercera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1897 y en la Exposición Regional de Málaga; una medalla de bronce en la Exposición Internacional de Barcelona de 1888 y en la Exposición Internacional de Alicante de 1894; y una segunda medalla en las Exposiciones Nacionales de 1890 y 1895 y en la Exposición Internacional de Barcelona. Sus obras eran solicitadas desde Munich, Praga, Hamburgo, Estocolmo, Londres, San Petersburgo y especialmente Sudamérica, y en 1899 fue nombrado miembro correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Desde 1900 hasta su muerte participó regularmente en las Exposiciones de Primavera de Sevilla (excepto en 1907 y 1908) y en todas las Exposiciones Nacionales (excepto 1917 y 1920). Fue miembro activo del Centro de Bellas Artes entre 1902 y 1903, y de la Comisión de Monumentos en 1919.

EDUARDO SANCHÉZ SOLÁ (Madrid, 1869 - Granada, 1949). "Gitano". Óleo sobre lienzo. Conserva marco de época. Firmado y dedicado en el ángulo inferior izquierdo. Medidas: 70 x 50 cm; 85 x 65 cm (marco). Vemos en esta obra una escena de enfoque costumbrista, protagonizada por una joven gitana. Se trata de una composición que combina el retrato con el género costumbrista, tan en boga en la pintura española del siglo XIX y principios del XX. La mujer ha sido representada en formato de busto, en actitud desenfadada y natural, con el pelo ligeramente despeinado, recogido con varias flores. La claridad del fondo neutro contrasta con la audacia del color con que el artista ha configurado a la modelo, resaltando los rasgos de la joven, cuyo rostro insinúa una suave sonrisa. Sánchez Solá se formó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, donde tuvo como maestros a Alejandro Ferrant y Luis Taberner. Posteriormente fue profesor en la Escuela de Artes y Oficios de Granada, y colaborador de la revista de arte "La Ilustración Española y Americana". Participó asiduamente en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, siendo galardonado con mención honorífica en 1895; medalla de tercera clase en 1897 por el lienzo "Tristes noticias" y en 1899 por "El destete"; condecoración en 1901 y mención honorífica en Arte Decorativo en 1904. También expuso en la Regional de Arte Moderno de Granada, en la del Centro Artístico en 1942 y en la de Linares en 1943. Sánchez Solá se especializó en óleos donde reflejó escenas de juegos de los monaguillos de la época, en el interior de iglesias andaluzas. En ellas, el artista supo captar la expresividad y el movimiento de los niños, que generalmente aparecen concentrados en un juego. Por eso se le conoce como "el pintor de los monaguillos", conservando obras de este género como "Corto y prieto", "Haz lo que quieras", "Travesuras", etc. También fue conocido como pintor de retratos y paisajes. Sánchez Solá está representado actualmente en el Museo del Prado y en el Museo Provincial de Lugo, así como en varias colecciones privadas.

MANUEL GARCÍA Y RODRIGUEZ (Sevilla, 1863 - 1925). La carreta", 1901. Óleo sobre lienzo. Con restauraciones. Firmado y fechado en la esquina inferior derecha. Medidas: 50 x 90 cm: 58 x 105 (marco). Manuel García y Rodríguez ejecuta esta obra con una pincelada amplia y pastosa, aplicando manchas de color. Destaca el tratamiento de las figuras y el contraste entre las zonas de sombra y las de sol. Utiliza una paleta rica en policromía, en la que predominan los verdes en todas sus tonalidades. García y Rodríguez inició su formación con José de la Vega Marrugal y luego pasó a la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, donde fue alumno de Eduardo Cano y Manuel Wssel. En un principio se dedicó a la figura, pero determinadas circunstancias, entre ellas la influencia y fascinación ejercida por Marín Rico y Fortuny sobre los jóvenes artistas sevillanos y los éxitos comerciales de los primeros viajes de Sánchez Perrier al extranjero, le llevaron a volcarse en la pintura de paisaje, que se convirtió prácticamente en su único tema a partir de entonces. Participa regularmente en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, obteniendo una tercera medalla en 1887 por su obra "Orillas del Guadalquivir". También obtuvo segundas medallas en 1890 por "La tarde" y en 1895 por "Tarde de otoño". También participó en las Exposiciones de Bellas Artes de Sevilla desde 1921 hasta su muerte. En 1888 participa en la Exposición Universal de Barcelona y al año siguiente en la de París. En 1891 su obra "Entrada a un huerto en Sevilla" fue adquirida por el Museo de Barcelona en la I Exposición General de Bellas Artes; ese mismo año el Estado de Prusia adquirió su obra "Sevilla" en la Exposición Internacional de Berlín. Durante los años siguientes también mostró sus obras en exposiciones en Chicago y Munich. Hacia 1893 realizó una visita a Marruecos, país recientemente visitado por otros sevillanos como Sánchez Perrier y Gonzalo Bilbao, adonde regresó en 1904. En 1889 fue nombrado miembro de la Academia de San Fernando de Madrid, y entre 1902 y 1903 fue miembro activo del Centro de Bellas Artes del Ateneo de Sevilla. Fue ilustrador además de pintor, y en esta disciplina colaboró con el semanario "Blanco y Negro" y también con "La Ilustración Artística". García y Rodríguez está representado actualmente en el Museo del Prado (su obra se encuentra en depósito en el Museo Municipal de Málaga), el Museo Nacional de La Habana, el Museo de Bellas Artes de Sevilla y el Museo Thyssen-Bornemisza, entre otros.