Juan Do (ámbito)
Xàtiva 1601 - Nápoles 1656
Adoración de los pastores
óleo sobre…
Descripción

Juan Do (ámbito) Xàtiva 1601 - Nápoles 1656 Adoración de los pastores óleo sobre lienzo, 125x195 cm.

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Juan Do (ámbito) Xàtiva 1601 - Nápoles 1656 Adoración de los pastores óleo sobre lienzo, 125x195 cm.

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JOSÉ GUERRERO (Granada, 1914 - Barcelona, 1991). Sin título, 1985. Óleo sobre fondo litográfico. Firmado y fechado. Bibliografía: Baena, Francisco; Guibault, Serge; Ramírez, Juan Antonio; Romero Gómez, Yolanda; Vallejo Ulecia, Inés, Catálogo Razonado Vol. II. 1970-1991, ed. Centro José Guerrero, página 1090, nº 1133. Medidas: 68 x 48 cm; 82 x 64 cm (marco). Pintor y grabador español nacionalizado estadounidense, José Guerrero desarrolló su obra dentro del expresionismo abstracto. Comenzó su formación en la Escuela de Artes y Oficios de Granada, y pronto se trasladó a Madrid para continuar sus estudios en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, donde fue alumno de Daniel Vázquez Díaz. En 1942 obtuvo una beca de la Casa de Velázquez, y en 1945 se trasladó a París gracias a una nueva beca, esta vez concedida por el gobierno francés. En la capital francesa conoció de primera mano la vanguardia europea y entró en contacto con los pintores españoles de la Escuela de París. Desde entonces, su obra está llena de ecos vanguardistas y de los signos de Picasso, claramente visibles en esta obra, rasgos que abandonará en los años cincuenta, cuando descubra el expresionismo abstracto en Nueva York. Llega a esa ciudad en 1950, animado por su mujer, la periodista neoyorquina Roxana Pollock, con la que se había casado un año antes. En 1954 expone junto a Joan Miró en el Art Club de Chicago, exposición que supone su definitiva proyección internacional. Su marchante fue Betty Parson, una de las galeristas más importantes del Nueva York de la época. El estilo de Guerrero cambia entonces por completo, mostrando una profunda influencia de Rothko y Kline; abandona definitivamente la figuración y construye composiciones donde se evidencia una marcada tensión entre espacios, colores y objetos irreconocibles. Regresa a España en 1965 y participa en la creación del Museo de Arte Abstracto de Cuenca. Pronto regresa a Nueva York, aunque continúa realizando viajes a España. Su producción, que sigue caracterizándose por la fuerza de las masas de color, los planos y las líneas, recibe en esta época la influencia de Clyfford Still y Barnett Newman. Hoy en día, José Guerrero está reconocido como uno de los pintores españoles más destacados de la Escuela de Nueva York. Obtuvo un temprano reconocimiento, al ser nombrado Caballero de la Orden de las Artes y las Letras por el gobierno francés en 1959. Asimismo, en 1976 se celebró en su ciudad natal su primera exposición antológica. En 1984 recibió la Medalla de Oro de las Bellas Artes, y en 1989 fue condecorado por la Fundación Rodríguez Acosta. En 2000 se inauguró en Granada el centro de arte que lleva su nombre, creado a partir de la donación realizada por su viuda a la Diputación Provincial. También está representado en diversos museos y colecciones, como el Museo Guggenheim, el MOMA y el Metropolitan de Nueva York, el Reina Sofía de Madrid, el British Museum y el Patio Herreriano de Valladolid.

LUCA GIORDANO (Nápoles, 1634 - 1705). "La Sagrada Familia con San Juan". Óleo sobre lienzo. Revestido. Conserva marco italiano del siglo XVII en madera tallada y dorada. Firmado en el ángulo inferior izquierdo. Procedencia: Wells College Museum, Aurora (Estados Unidos) y colección particular, Madrid. Medidas: 83 x 104 cm; 108 x 130,5 cm (marco). Bibliografía: Milkovich, M. (dir.). Luca Giordano in America. Memphis: 1964, p. 38. - Ferrari, O. y Scavizzi, G. Luca Giordano. Nápoles: 1966, vol. II, p. 49 y vol. III, fig. 89. -Fredericksen, B. B. y Zeri, F. Census of Pre-Nineteenth-Century Italian Paintings in North American Public Collections. Cambridge: Harvard University Press, 1972, pp. 85 y 554. - Ferrari, O. y Scavizzi, G. Luca Giordano. L'opera completa. Nápoles: Electa, 1992, vol. I, p. 263, cat. nº. A86. -Sotheby's Nueva York, Pinturas y esculturas maestras: Parte II, cat. exp. 29 de enero de 2015. Luca Giordano es una de las figuras más relevantes del Barroco europeo. Pintor prolífico, su carrera se desarrolló entre su Nápoles natal y la corte de Madrid, donde residió entre 1692 y 1702. Sus primeros biógrafos indican que se formó en el estilo de Ribera, cuyo estilo imitó durante sus primeros años. Su capacidad para imitar y copiar a los maestros antiguos le llevaría a imitar el estilo de Rafael Sanzio, como muestran algunos de los cuadros conservados en el Museo del Prado. Su paso por Venecia y Roma también queda patente en su obra, especialmente en lo que se refiere a Pietro da Cortona. Un buen ejemplo de ello es esta Sagrada Familia con San Juan, fechada por Ferrari y Scavizzi hacia 1660. Muestra los tipos físicos de las pinturas de Cortona, como su Adoración de los pastores de San Salvatore in Lauro. Por otra parte, el espacio con ruinas clásicas en el que se insertan las figuras se relaciona con pinturas contemporáneas de Giordano como su Santa Ana con la Virgen Niña de la iglesia de la Asunción de Chiaia (1657) o Cristo entre los doctores de la colección privada boloñesa (hacia 1660). El cuadro fue documentado por primera vez en 1664 por Milkovich en el Wells College Museum de Aurora. También fue recogida allí por Ferrari y Scavizzi en 1992, que también la estudiaron y fecharon hacia 1660". Luca Giordano, el pintor napolitano más destacado de finales del siglo XVII, y uno de los principales representantes del Barroco tardío italiano.Pintor y grabador, conocido en España como Lucas Jordán, Giordano gozó de gran popularidad en vida, tanto en su Italia natal como en nuestro país. Sin embargo, tras su muerte su obra fue a menudo criticada por su rapidez de ejecución, opuesta a la estética grecolatina. Se cree que se formó en el entorno de Ribera, cuyo estilo siguió en un principio. Sin embargo, pronto viajó a Roma y Venecia, donde estudió a Veronés, cuya influencia se ha dejado sentir desde entonces en su obra. Este viaje fue clave para la maduración de su estilo, así como las influencias de otros artistas como Mattia Preti, Rubens, Bernini y, sobre todo, Pietro da Cortona. A finales de la década de 1670, Giordano comenzó sus grandes decoraciones murales (Montecassino y San Gregorio Armeno en Nápoles), a las que siguieron, a partir de 1682, otros proyectos, como las pinturas murales de la galería y la biblioteca del palacio Medici Ricardi de Florencia. En 1692 fue llamado a Madrid para realizar obras murales en el monasterio de El Escorial, donde trabajó de 1692 a 1694. Más tarde pintó también el despacho y el dormitorio de Carlos II en el Palacio Real de Aranjuez, y tras ellos acometió las pinturas del Casón del Buen Retiro (hacia 1697), la sacristía de la catedral de Toledo (1698), la capilla real del Alcázar y San Antonio de los Portugueses (1699). Sin embargo, los encargos reales cesaron con la llegada de Felipe V en 1701 y el inicio de la Guerra de Sucesión, por lo que Giordano regresó a Nápoles en 1702, aunque desde allí continuó enviando pinturas a España. En la actualidad, las obras de Giordano se conservan en las pinacotecas más importantes del mundo, como el Museo del Prado, el Hermitage de San Petersburgo, el Louvre de París, el Kunsthistorisches de Viena, el Metropolitan de Nueva York y la National Gallery de Londres. Bibliografía: Milkovich, M. (dir.). Luca Giordano in America. Memphis: 1964, p. 38. - Ferrari, O. y Scavizzi, G. Luca Giordano. Nápoles: 1966, vol. II, p. 49 y vol. III, fig. 89. -Fredericksen, B. B. y Zeri, F. Census of Pre-Nineteenth-Century Italian Paintings in North American Public Collections. Cambridge: Harvard University Press, 1972, pp. 85 y 554. - Ferrari, O. y Scavizzi, G. Luca Giordano. L'opera completa. Nápoles: Electa, 1992, vol. I, p. 263, cat. nº. A86. -Sotheby's Nueva York, Master Paintings & Sculpture: Parte II, cat. exp. 29 de enero de 2015.

Atribuido al Maestro JUAN TEJERINA, siglo XVI. "Los esponsales de la Virgen y San José". Óleo sobre tabla. Tiene un marco del siglo XX siguiendo modelos del siglo XV. Medidas. 75 x 53 cm; 95 x 58 cm (marco). En plena transición entre los estilos gótico y renacentista, esta obra nos muestra el conocimiento del autor de las nuevas corrientes humanistas. Esto se refleja en la forma de componer el espacio, ya que la escena se organiza a través de un punto de fuga basado en la mirada del espectador. La simetría, habitual en esta imagen de larga tradición artística, y el uso de contraposados, movimientos y pliegues de los ropajes alejan la obra del estilo hierático típico del periodo gótico, aunque es cierto que ciertas figuras recuerdan a ese periodo. El panel representa un tema especialmente popular en la Baja Edad Media, aunque su fuente textual no se encuentra en los textos bíblicos canónicos, sino en diversos relatos apócrifos. Se trata de los esponsales de la Virgen María con el anciano San José. Desde los siglos XII y XIII hasta el final del periodo gótico, María adquirió importancia como símbolo de la Iglesia y de sus fieles, pero también como figura cada vez más cercana y humana, como madre que intercede por sus hijos terrenales, la humanidad, ante su Hijo celestial, Cristo, en busca de su perdón. En consonancia con esta creciente importancia, también aumentó el interés por su vida, los acontecimientos que marcaron su existencia terrena y su destino tras su muerte. Numerosas obras devocionales y místicas, en muchos casos inspiradas en los antiguos textos apócrifos escritos en los primeros siglos del cristianismo, se apresuraron a llenar las lagunas dejadas por los evangelistas, relatando con detalle episodios de su infancia y juventud. En el caso de su matrimonio con San José, las fuentes ponen especial cuidado en subrayar el carácter milagroso de este matrimonio, señalando que el pretendiente fue elegido entre todos los hombres justos y honorables de Jerusalén, tanto solteros como viudos, gracias a una señal divina. Las características estilísticas de la pieza nos acercan a la obra del maestro Juan Tejerina, cuya producción se desarrolló especialmente en la zona de Palencia. Seguidor de Juan de Flandes, su proximidad estética ha propiciado la atribución de las dos tablas de la Visitación de la Virgen a Santa Isabel y la Adoración de los Reyes, incluidas en la parte superior del retablo mayor de la catedral de Palencia. También se le atribuyen la Anunciación y la Natividad de la iglesia de Santa Eulalia de Paredes de Nava.