Null Círculo de BARTOLOMÉ ESTEBAN MURILLO (Sevilla, 1617 - Cádiz, 1682).

"San F…
Descripción

Círculo de BARTOLOMÉ ESTEBAN MURILLO (Sevilla, 1617 - Cádiz, 1682). "San Francisco de Paula". Óleo sobre lienzo. Conserva el lienzo original. Presenta ligeros desperfectos y pérdidas en la superficie pictórica. Medidas: 118 x 88 cm; 146 x 116 cm (marco). La caracterización del protagonista de esta obra representado como un anciano de barba cana vestido con hábito, apoyado en un bastón, indica que se trata de la representación de San Francisco de Paula. Tanto el modelo del santo como el fondo en el que está inscrito indican que el autor de esta obra se basa en el modelo creado por Murillo (P000991), actualmente en la colección del Museo del Prado de Madrid. San Francisco de Paula (1416-1507) fue un eremita italiano, fundador de la Orden de los Mínimos. Muy joven comenzó su vida de ermitaño en las afueras de su ciudad natal, Paula. Poco a poco fue adquiriendo fama por sus prodigios, y hacia 1450 ya había un grupo de seguidores en torno a su figura. Su comunidad creció, y en 1470 la Congregación de Ermitaños (la futura Orden de los Mínimos) recibió la aprobación diocesana del arzobispo de Consenza. Cuatro años más tarde, el Papa Sixto IV les concedió la aprobación pontificia. En 1483 Francisco de Paula viajó a Francia por orden del Papa y a petición del rey Luis XI. Allí desarrolló una labor diplomática a favor de la Santa Sede, al tiempo que intentaba obtener la aprobación de una Regla para su congregación, que finalmente consiguió en 1493. Hasta su muerte, Francisco de Paula contaría con el apoyo y la protección de los monarcas franceses, y pocos años después de su muerte se iniciarían los procesos para su canonización en Calabria, Tourse y Amiens, en los que testificaron numerosos testigos de su vida y milagros. Finalmente fue beatificado en 1513 y canonizado en 1519. Presenta ligeros desperfectos y pérdidas en la superficie pictórica.

79 

Círculo de BARTOLOMÉ ESTEBAN MURILLO (Sevilla, 1617 - Cádiz, 1682). "San Francisco de Paula". Óleo sobre lienzo. Conserva el lienzo original. Presenta ligeros desperfectos y pérdidas en la superficie pictórica. Medidas: 118 x 88 cm; 146 x 116 cm (marco). La caracterización del protagonista de esta obra representado como un anciano de barba cana vestido con hábito, apoyado en un bastón, indica que se trata de la representación de San Francisco de Paula. Tanto el modelo del santo como el fondo en el que está inscrito indican que el autor de esta obra se basa en el modelo creado por Murillo (P000991), actualmente en la colección del Museo del Prado de Madrid. San Francisco de Paula (1416-1507) fue un eremita italiano, fundador de la Orden de los Mínimos. Muy joven comenzó su vida de ermitaño en las afueras de su ciudad natal, Paula. Poco a poco fue adquiriendo fama por sus prodigios, y hacia 1450 ya había un grupo de seguidores en torno a su figura. Su comunidad creció, y en 1470 la Congregación de Ermitaños (la futura Orden de los Mínimos) recibió la aprobación diocesana del arzobispo de Consenza. Cuatro años más tarde, el Papa Sixto IV les concedió la aprobación pontificia. En 1483 Francisco de Paula viajó a Francia por orden del Papa y a petición del rey Luis XI. Allí desarrolló una labor diplomática a favor de la Santa Sede, al tiempo que intentaba obtener la aprobación de una Regla para su congregación, que finalmente consiguió en 1493. Hasta su muerte, Francisco de Paula contaría con el apoyo y la protección de los monarcas franceses, y pocos años después de su muerte se iniciarían los procesos para su canonización en Calabria, Tourse y Amiens, en los que testificaron numerosos testigos de su vida y milagros. Finalmente fue beatificado en 1513 y canonizado en 1519. Presenta ligeros desperfectos y pérdidas en la superficie pictórica.

Las pujas estan cerradas para este lote. Ver los resultados

Podría interesarle

Atribuido a ANTONIO MARÍA ESQUIVEL SUAREZ DE URBINA (Sevilla, 1806 - Madrid, 1857). "Santa Úrsula. Óleo sobre lienzo. Con inscripción ilegible al dorso. Medidas: 93,5 x 73 cm; 103 x 84 cm (marco). Este lienzo representa a Santa Úrsula vestida de doncella. Según la leyenda medieval, una joven llamada Úrsula se convirtió al cristianismo prometiendo conservar su virginidad. Al ser pretendida por un príncipe bretón, decidió peregrinar a Roma y lograr así la consagración de sus votos. En Roma, fue recibida por el Papa Siricio, quien la bendijo y consagró sus votos de virginidad perpetua para dedicarse a la predicación del Evangelio de Cristo. Cuando regresó a Alemania, fue sorprendida en Colonia por el ataque de los hunos, en 451. Atila, rey de este pueblo, se enamoró de ella, pero la joven resistió y, junto con otras doncellas que se negaban a rendirse a los apetitos sexuales de los bárbaros, fue martirizada. Por sus características formales, esta obra puede atribuirse a Antonio María Esquivel, pintor y teórico español nombrado Pintor de Cámara durante el reinado de Isabel II, reconocido por su estilo romántico. A pesar de proceder de una familia noble, con la muerte de su padre se encuentran en una situación precaria y difícil. Sin embargo, su madre le animó a continuar sus estudios en la Academia de Bellas Artes de Sevilla, donde se familiarizó con la pintura de Bartolomé Esteban Murillo (1618-1682). Estos estudios se vieron paralizados por la invasión de los Cien Mil Hijos de San Luis, conflicto militar que le llevó a alistarse en las filas liberales para defender la plaza de Cádiz. En 1831 reanudó sus estudios y en 1831, pensionado en Madrid, se presentó al concurso general de la Academia, que le nombró académico de mérito. Durante su estancia en la capital española, participó asiduamente en el Liceo Artístico y Literario, donde recibió clases de anatomía. También participó en las exposiciones de la Academia de 1835, 1837 y 1838.