Arte indio Fragmento de elefante en piedra arenisca. India, posiblemente siglos …
Descripción

Arte indio Fragmento de elefante en piedra arenisca. India, posiblemente siglos XVI-XVII. . . Cm 28x40,50x15. Escultura de arenisca que representa lo que queda de un elefante con un mahout. La ausencia de las partes salientes de la figura humana y animal hace muy difícil la atribución basada en rasgos estilísticos. Procedencia: Colección Berger.

172 

Arte indio Fragmento de elefante en piedra arenisca. India, posiblemente siglos XVI-XVII. . . Cm 28x40,50x15. Escultura de arenisca que representa lo que queda de un elefante con un mahout. La ausencia de las partes salientes de la figura humana y animal hace muy difícil la atribución basada en rasgos estilísticos. Procedencia: Colección Berger.

Las pujas estan cerradas para este lote. Ver los resultados

Podría interesarle

Ventana de celosía; India, Rajastán, principios del siglo XIX o antes. Arenisca tallada. Obra expuesta en Feriarte 2007. Medidas: 183 x 52,5 x 10 cm. Por su estética es posible que proceda de un palacio de Jaisalmer I. Jalí es el equivalente hindú a la celosía, un elemento arquitectónico consistente en un tablero calado que se utilizaba para cubrir vanos como balcones, ventanas o puertas; permitía ver desde el interior sin ser visto a la vez que dejaba entrar la luz y el aire en las estancias y ayudaba a regular la temperatura. En la India, el jali se suele realizar en piedra y se desarrolla como una mezcla entre la cantería ancestral y el arte de trabajar la piedra mediante punzonados que dibujan bellas formas geométricas como se puede apreciar en la pieza que presentamos. Los motivos geométricos solían combinarse con la caligrafía. Con el tiempo este tipo de elemento decorativo irá ganando más protagonismo en la arquitectura india y las decoraciones serán cada vez más complejas. La celosía o jali es profusamente utilizada en la arquitectura india, islámica e hispanomusulmana. Los motivos decorativos del arte indio se obtienen, como se aprecia en el tímpano, mediante la repetición de elementos simples entrelazados o superpuestos. Destaca el gusto por la simetría, con lo que se consigue un efecto dinámico y armonioso en el que el detalle no prevalece sobre el conjunto. La reiteración infinita de ornamentos en el mundo indio forma parte de una metáfora representativa cercana al concepto de eternidad y a la mutabilidad del universo. El arte indio, a diferencia del occidental, no imita la naturaleza. Por este motivo, es muy común la representación estilizada de ornamentos y motivos vegetales. Obra expuesta en Feriarte 2007.