Null MALETÍN DE XAVIER CUGAT
Barcelona és bona si la bossa sona. Maleta del dia …
Descripción

MALETÍN DE XAVIER CUGAT Barcelona és bona si la bossa sona. Maleta del dia 7 deJulio, conteniendo:1 dibujo original de Xavier Cugat10 litos de Barcelona firmadas por el autor.1 plato serigrafiado con "Sant Jordi"1 disco con grandes éxitos de X. Cugat.1 abanico original de X. Cugat.Desplegable alegórico sobre la ciudad de Barcelona.Se han realizado 429 ejemplares :365 ejemplares correspondientes a cada dia del año52 ejemplares con las semanas del año.12 ejemplares con los meses del año.

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MALETÍN DE XAVIER CUGAT Barcelona és bona si la bossa sona. Maleta del dia 7 deJulio, conteniendo:1 dibujo original de Xavier Cugat10 litos de Barcelona firmadas por el autor.1 plato serigrafiado con "Sant Jordi"1 disco con grandes éxitos de X. Cugat.1 abanico original de X. Cugat.Desplegable alegórico sobre la ciudad de Barcelona.Se han realizado 429 ejemplares :365 ejemplares correspondientes a cada dia del año52 ejemplares con las semanas del año.12 ejemplares con los meses del año.

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CARLOS MATA (Palma de Mallorca, 1949 - Barcelona, 2008). "Caballo S/T", 1997. Hierro fundido. Pieza única. Se adjunta certificado expedido por Margarita Yarmats, última compañera sentimental del escultor. Firmado en la base. Medidas: 33 x 30 x 13,5 cm. El tema equino fue predominante en la singular obra de Carlos Mata. Las formas básicas a las que se subsume esta escultura (hay que señalar que se trata de una obra única, sin otros ejemplares) hunden sus raíces en las antiguas civilizaciones mediterráneas, en la cuna de nuestra cultura. El hierro, en sus manos, está dotado de una pátina extemporánea, arcaica y vanguardista al mismo tiempo. En sus esculturas, Mata siempre fue fiel a esta reducción de los objetos a su esencia y de las siluetas a líneas puras. Es precisamente esta pureza la que hace brillar aún más la calidez de la textura del hierro, que compite en protagonismo con la propia forma de la pieza. Mata optó por el bronce o el hierro para reflejar la calidez del trabajo manual, con sus superficies áridas e irregulares, rugosas, que invitan al tacto, y también con sus hendiduras fluidas, suaves y redondeadas. Escultor, pintor y grabador, Carlos Mata estudió Bellas Artes en Barcelona y París, ciudades entre las que ha compartido su residencia desde sus años de formación. Realizó su primera exposición individual en la galería Canalls de Sant Cugat del Vallés en 1976, a la que siguieron otras en Barcelona, Francia y Alemania. Entre sus exposiciones más recientes se encuentran las celebradas en la galería Kreisler de Madrid, Casal Soleric de Palma y Can Marc de Girona. Sus esculturas en hierro fundido sin pulir aprovechan sus cualidades austeras y toscas en estilizaciones figurativas de cierto primitivismo y evocación arqueológica, tomando generalmente como tema animales, como toros o caballos. La misma intención esquemática se aprecia en su pintura, de tipo neofigurativo, planista, con una gama cromática contenida y reducida. En 2008, como homenaje póstumo, se celebró una importante antológica de su obra en el Haras du Pin, en Normandía (Francia). Se trataba de una retrospectiva compuesta por 35 caballos de bronce, además de su colección de joyas.

EVA LOOTZ (Viena, 1940). "Los barcos congelados", 1990. Madera pintada (estructura) y cera (pies). Procedencia: Galería Luis Adelantado. Medidas: 230 x 170 cm. "Los barcos congelados" fue un proyecto de Eva Lootz que consistió en la colocación de barcos rescatados de algún puerto y otros objetos (como la estructura que en licitación) con una cuidada puesta en escena. La alusión al frío la consiguió la artista vienesa mediante el uso de queroseno blanco, que cubría las superficies de la instalación como si fuera nieve. Éste, junto con la cera utilizada en la estructura, son aparentemente materiales sin gran valor material, pero con una gran carga simbólica para Lootz. Los barcos de este proyecto forman parte de la colección permanente del MEIAC (Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo) desde 1995. Artista vienesa afincada en Madrid desde 1965, Eva Lootz se formó en su ciudad natal, donde estudió Bellas Artes, Musicología, Cinematografía y Filosofía. Aunque es conocida principalmente por su obra escultórica, Lootz también trabaja la instalación, el dibujo, el grabado, la fotografía, el vídeo y el sonido, siempre centrada en su principal preocupación: la relación entre materia y lenguaje. Comenzó su actividad expositiva en 1973, y desde entonces ha realizado regularmente exposiciones individuales tanto en España como en el extranjero, en galerías y centros de arte como la Galleriet de Lund (Suecia, 1981), la David Breitzel de Nueva York (1990), la Barbara Faber de Amsterdam (1990, 1994, 1996), la South London de Londres (1994), la Fundación Pilar i Joan Miró de Palma (1996), el Luis Adelantado de Valencia (1997), el Borås Konstmuseum (Suecia, 1997) o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid (2002). También ha participado en concursos, exposiciones colectivas y oficiales como la Expo'92 de Sevilla, y en 1994 fue galardonada con el Premio Nacional de Bellas Artes. Actualmente está representada en el MACBA de Barcelona, el MNCARS de Madrid, el Museo de Arte Abstracto de Cuenca, el Museo de Arte Contemporáneo de Malmö, el CAAM de Las Palmas, el Museo Patio Herreriano de Valladolid y otras muchas colecciones públicas y privadas. Procedencia: Galería Luis Adelantado.

JOSÉ MANUEL BROTO GIMENO (Zaragoza, 1949). "Hierros", 2000. Acrílico sobre lienzo y madera. Firmado, fechado y titulado al dorso. Tamaño: 100 x 100 cm. Pintor aragonés enmarcado dentro de la nueva abstracción de los años setenta, siendo considerado como una de las figuras más significativas de la pintura española contemporánea, José Manuel Broto articula su lenguaje plástico utilizando el color, modulándolo en sutiles variaciones tonales que evocan sinfonías musicales. Las influencias artísticas recibidas a lo largo de su carrera le condujeron hacia una abstracción próxima a artistas como Mark Rothko, Barnett Newman, Clyfford Still, Robert Motherwell o Sam Francis, basada en el lirismo y, en algunos casos, en lo sublime. Para él fue fundamental el camino abierto por Antoni Tàpies, que rehuyó lo conceptual para practicar un arte material basado en la esencialidad de la pintura. Así, en esta obra, Broto utiliza un lenguaje abstracto, basado en una geometría irregular, libre tanto en su trazado como en sus texturas y colores. Las formas pictóricas son fruto de la dualidad, ya que se resuelven mediante una composición meditada y también mediante la experimentación. El resultado es una imagen que trasciende, indicando al espectador que estamos ante formas, ideas o sugerencias que traspasan los límites de lo puramente pictórico. José Manuel Broto estudió en la Escuela de Artes y Oficios de Zaragoza, y expuso por primera vez en 1968 (galería Galdeano), mostrando un estilo en línea con el constructivismo. En 1972 se traslada a Barcelona, donde funda el grupo Trama junto con Javier Rubio, Xavier Grau y Gonzalo Tena. Con este grupo presentó su obra en 1976 en la galería Maeght de Barcelona, con el apoyo de Antonio Tàpies. Trama también publicó una revista de arte del mismo nombre, de la que, sin embargo, sólo aparecieron dos números (1976-1977). Sin embargo, tras la disolución del grupo, Broto se orientó hacia un lenguaje próximo al expresionismo abstracto, que incorporaba a su obra un paisaje natural primitivo. Mostró estas nuevas obras en su primera exposición individual en París, celebrada en 1984 en la galería Adrien Maeght. Al año siguiente abandonó Barcelona y se instaló en la capital francesa, donde pasó diez años y coincidió con otros artistas españoles como Barceló, Campano y Sicilia. Durante su etapa parisina, Broto sustituyó los temas románticos por formas más austeras y abstractas, y su obra se llenó de formas orgánicas relacionadas con la tradición ascética y mística. A mediados de los ochenta regresa a España, esta vez instalándose en Mallorca. Ya un artista maduro, practica una neoabstracción directamente vinculada a la escuela catalana de los años setenta, influida en sus orígenes por los principios estéticos y plásticos del grupo francés Soporte/Superficie, que en 1966 reclamaba una vuelta a la pintura tras el desorden producido por los movimientos conceptuales. A partir de 1998, su abanico temático se amplía a figuras espaciales, transparencias, formas atmosféricas, etc., combinadas con un tratamiento colorista y una estructura rigurosa. A lo largo de su carrera, Broto ha realizado numerosas exposiciones, y ha sido galardonado con el Premio Nacional de Artes Plásticas (1995), el Premio ARCO de la Asociación de Críticos (1997) y el Premio Aragón Goya de Grabado (2003). En 1995 el Museo Reina Sofía de Madrid le dedicó una exposición retrospectiva. Actualmente está representado en el Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, el FRAC (Midi-Pyrénées, Francia), la Chase Manhattan Bank Collection de Nueva York, la Fundación Juan March, el Reina Sofía, el Metropolitan Museum de Nueva York, el Fond National d'Art Contemporain de París, la Colección Kampo de Tokio, la Fundación Tàpies de Barcelona, la Colección DOVE de Zúrich, el Ateneum de Helsinki, la Fundación Peter Stuyvesant de Ámsterdam, la Maeght de Francia, la Colección La Caixa de Barcelona, la Preussag de Hannover y el IVAM de Valencia.