ALDO TURA
Carro. Madera, pergamino, latón, cristal coloreado y esmerilado
73 x 8…
Descripción

ALDO TURA Carro. Madera, pergamino, latón, cristal coloreado y esmerilado 73 x 85 x 50 cm CARRO DE ALDO TURA Buen estado, líneas arañazos y signos de desgaste, falta insignificante, oxidación, ligeros halos en el pergamino que está en muy buen estado de época. Pequeña lesión en una de las gomas originales, apenas visible.

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ALDO TURA Carro. Madera, pergamino, latón, cristal coloreado y esmerilado 73 x 85 x 50 cm CARRO DE ALDO TURA Buen estado, líneas arañazos y signos de desgaste, falta insignificante, oxidación, ligeros halos en el pergamino que está en muy buen estado de época. Pequeña lesión en una de las gomas originales, apenas visible.

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ALDO TURA (Italia, 1909-1963). Mueble bar, ca. 1960. Madera lacada, palisandro y latón. Incluye llave. Medidas: 154 x 80 x 40 cm. Este personalísimo mueble bar muestra la confluencia de intereses que motivaban las creaciones de Aldo Tura y les daban un sello singular, como la experimentación con distintos materiales o los poco ortodoxos tratamientos superficiales: véase aquí la atractiva pátina conseguida con el lacado parduzco de las dos puertas semicirculares, perfiladas con tachuelas y sujetas al mueble con atractivos herrajes. Aldo Tura absorbió los preceptos del Art Déco, pero fue más allá de su legado minimalista en busca de un estilo más dinámico, con ecos historicistas. El armario marino de cuerpo rectangular, que alberga un interior acristalado, se asienta sobre una base torneada con panza globular. Las puertas se abren con tiradores de latón en forma de tornapuntas. Aldo Tura comenzó su carrera en el diseño experimental de muebles en la década de 1930. Tras las formas angulosas y afiladas del Art Déco, la madera empezó a utilizarse en formas libres, llenas de curvas, y Tura vio en este nuevo gusto una nueva dirección para el diseño de muebles. Su obra es una significativa combinación de formas libres y desinhibidas, a veces excepcionalmente irónicas. Sus diseños son también ejemplos de la más alta artesanía, y a menudo se producen en series de edición limitada, e incluso sólo un prototipo. En la década de 1950, Tura descubrió el evocador encanto de los muebles pintados con vistas arquitectónicas venecianas, y también empezó a experimentar con diversos materiales, como la cáscara de huevo, el pergamino, la piel de cabra o las chapas de madera.