EUSTAQUIO MARÍN RAMOS (Sevilla, 1873 - San Sebastián, 1948). 

"Castellana", 192…
Descripción

EUSTAQUIO MARÍN RAMOS (Sevilla, 1873 - San Sebastián, 1948). "Castellana", 1928. Acuarela sobre papel. Firmada, titulada y fechada en la zona inferior izquierda. Medidas: 12,5 x 9 cm; 30 x 29 cm (marco). De forma autodidacta Eustaquio Marín se acercó a la pintura, en un principio a través de un lenguaje figurativo, influenciado por el folclore de su tierra natal. Sin embargo, más tarde se acercó a una pintura más expresionista, donde la pincelada y la materialidad cobraron gran importancia.

49 

EUSTAQUIO MARÍN RAMOS (Sevilla, 1873 - San Sebastián, 1948).

Las pujas estan cerradas para este lote. Ver los resultados

Podría interesarle

FRANCISCO HOHENLEITER DE CASTRO (Cádiz, 1889 - Sevilla, 1968). "Majos". Óleo sobre tabla (x2). Firmado en la parte inferior derecha. Medidas: 31 x 20 cm (x2); 40 x 29 x 3cm (marcos, x2). Francisco Hohenleiter comenzó su formación en El Puerto de Santa María, y en 1918 se trasladó a Sevilla, estableciéndose definitivamente en la ciudad. Pintor elegante y colorista, pronto se convirtió en una figura destacada de la decoración mural y, sobre todo, del cartelismo, la ilustración de revistas y la ilustración de libros. Sus obras combinan influencias de diferentes estilos como el modernismo, la pintura de género y el romanticismo. A través de sus carteles de los años veinte reinventó la Semana Santa de Sevilla, con obras basadas en el uso del color y las líneas decorativas. Como pintor se centró en el retrato, el paisaje y la representación de tipos populares, principalmente majos, así como en escenas costumbristas. También realizó desnudos, interiores de iglesias y naturalezas muertas. A lo largo de su carrera expuso en diversas ciudades españolas y también en París, destacando su exposición en la galería Charpentier en 1932. La pintura de Francisco Hohenleiter hunde sus raíces en la de Jiménez Aranda y García Ramos y se inspira en Goya y Alenza. Se convirtió en el glosador de la Sevilla romántica, el retratista de la Andalucía musicada por Albéniz. Actualmente su obra se encuentra repartida por toda Andalucía: murales, carteles, programas de mano, etc. Hoy está representado en varios museos y colecciones privadas.

MANUEL GARCÍA Y RODRIGUEZ (Sevilla, 1863 - 1925). La carreta", 1901. Óleo sobre lienzo. Con restauraciones. Firmado y fechado en la esquina inferior derecha. Medidas: 50 x 90 cm: 58 x 105 (marco). Manuel García y Rodríguez ejecuta esta obra con una pincelada amplia y pastosa, aplicando manchas de color. Destaca el tratamiento de las figuras y el contraste entre las zonas de sombra y las de sol. Utiliza una paleta rica en policromía, en la que predominan los verdes en todas sus tonalidades. García y Rodríguez inició su formación con José de la Vega Marrugal y luego pasó a la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, donde fue alumno de Eduardo Cano y Manuel Wssel. En un principio se dedicó a la figura, pero determinadas circunstancias, entre ellas la influencia y fascinación ejercida por Marín Rico y Fortuny sobre los jóvenes artistas sevillanos y los éxitos comerciales de los primeros viajes de Sánchez Perrier al extranjero, le llevaron a volcarse en la pintura de paisaje, que se convirtió prácticamente en su único tema a partir de entonces. Participa regularmente en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, obteniendo una tercera medalla en 1887 por su obra "Orillas del Guadalquivir". También obtuvo segundas medallas en 1890 por "La tarde" y en 1895 por "Tarde de otoño". También participó en las Exposiciones de Bellas Artes de Sevilla desde 1921 hasta su muerte. En 1888 participa en la Exposición Universal de Barcelona y al año siguiente en la de París. En 1891 su obra "Entrada a un huerto en Sevilla" fue adquirida por el Museo de Barcelona en la I Exposición General de Bellas Artes; ese mismo año el Estado de Prusia adquirió su obra "Sevilla" en la Exposición Internacional de Berlín. Durante los años siguientes también mostró sus obras en exposiciones en Chicago y Munich. Hacia 1893 realizó una visita a Marruecos, país recientemente visitado por otros sevillanos como Sánchez Perrier y Gonzalo Bilbao, adonde regresó en 1904. En 1889 fue nombrado miembro de la Academia de San Fernando de Madrid, y entre 1902 y 1903 fue miembro activo del Centro de Bellas Artes del Ateneo de Sevilla. Fue ilustrador además de pintor, y en esta disciplina colaboró con el semanario "Blanco y Negro" y también con "La Ilustración Artística". García y Rodríguez está representado actualmente en el Museo del Prado (su obra se encuentra en depósito en el Museo Municipal de Málaga), el Museo Nacional de La Habana, el Museo de Bellas Artes de Sevilla y el Museo Thyssen-Bornemisza, entre otros.