Null Prosper ENFANTIN (1796-1864) líder de la escuela saint-simoniana. L.A.S., P…
Descripción

Prosper ENFANTIN (1796-1864) líder de la escuela saint-simoniana. L.A.S., París, 6 de noviembre de 1847, a una dama; 4 páginas en 8 con membrete de la Société d'Études du Canal de Suez. Hermosa carta filosófica. "Usted me dice que todo se perfecciona mediante la lucha [...] Es muy cierto que el sufrimiento y la infelicidad son ocasiones de perfección en el sentido de que nos damos cuenta de que somos tanto más sufrientes e infelices cuanto más hemos luchado contra las leyes de la naturaleza, o mejor contra la voluntad de Dios, contra la higiene y contra la moral. Es realmente extraño atribuir el progreso de la humanidad a la lucha incesante, cuando este progreso se manifiesta evidentemente por una reducción de las ocasiones y de los motivos de esta lucha; cuando los hombres se asocian cada vez más con la naturaleza; cuando las ciudades y las naciones se asocian cada vez más entre sí [...] Por el contrario, me parece que la humanidad ha demostrado una y otra vez su preferencia muy marcada por la paz sobre la guerra, por el amor sobre el odio, por el bautismo sobre el entierro. [...] La lucha no es más que la consecuencia y la expresión de un sentimiento de amor que la inspira y la domina; y es este sentimiento el que la perfecciona, pero no es la lucha. Esta última destruye el mal, es cierto, pero cuando está inspirada por el amor del bien. Amén"...

114 

Prosper ENFANTIN (1796-1864) líder de la escuela saint-simoniana. L.A.S., París, 6 de noviembre de 1847, a una dama; 4 páginas en 8 con membrete de la Société d'Études du Canal de Suez. Hermosa carta filosófica. "Usted me dice que todo se perfecciona mediante la lucha [...] Es muy cierto que el sufrimiento y la infelicidad son ocasiones de perfección en el sentido de que nos damos cuenta de que somos tanto más sufrientes e infelices cuanto más hemos luchado contra las leyes de la naturaleza, o mejor contra la voluntad de Dios, contra la higiene y contra la moral. Es realmente extraño atribuir el progreso de la humanidad a la lucha incesante, cuando este progreso se manifiesta evidentemente por una reducción de las ocasiones y de los motivos de esta lucha; cuando los hombres se asocian cada vez más con la naturaleza; cuando las ciudades y las naciones se asocian cada vez más entre sí [...] Por el contrario, me parece que la humanidad ha demostrado una y otra vez su preferencia muy marcada por la paz sobre la guerra, por el amor sobre el odio, por el bautismo sobre el entierro. [...] La lucha no es más que la consecuencia y la expresión de un sentimiento de amor que la inspira y la domina; y es este sentimiento el que la perfecciona, pero no es la lucha. Esta última destruye el mal, es cierto, pero cuando está inspirada por el amor del bien. Amén"...

Las pujas estan cerradas para este lote. Ver los resultados