Null Frasco de perfumería con asa. Roma, siglo I d.C.

Vidrio fino y transparent…
Descripción

Frasco de perfumería con asa. Roma, siglo I d.C. Vidrio fino y transparente. En buen estado, con una grieta en el cuello y una rotura reintegrada en el cuerpo. Con etiqueta antigua de colección. Se adjunta certificado expedido en 1971. Medidas: 12 cm (altura). Frasco de perfumería de cuerpo esférico, base casi plana, cuello corto con labio exvasado y bonita asa aplicada que une la parte superior del cuerpo con el borde de la boca. La tipología de esta pieza concentra las características precisas para su uso como perfumero de tocador femenino romano, es decir, base plana, cuerpo esférico, cuello corto y labio curvo. La superficie exterior presenta una agradable iridiscencia debida al largo tiempo que el vidrio ha pasado bajo tierra y en contacto directo con los minerales de la propia tierra. El vidrio empezó a utilizarse ampliamente a partir del siglo I d.C., tras el descubrimiento de la técnica del soplado hacia el 40 a.C. en la parte oriental de la costa mediterránea. Esta técnica supuso una gran revolución y se extendió rápidamente. El vidrio soplado ofrecía grandes ventajas sobre otros materiales, ya que no alteraba el sabor de los alimentos que contenía y era más impermeable que la terracota. Además, la técnica del soplado permitía fabricar piezas de formas y tamaños muy variados, y también producirlas con mayor rapidez. Por otra parte, las piezas de vidrio eran más fáciles de limpiar, por lo que pronto se convirtió en el material preferido para uso doméstico.

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Frasco de perfumería con asa. Roma, siglo I d.C. Vidrio fino y transparente. En buen estado, con una grieta en el cuello y una rotura reintegrada en el cuerpo. Con etiqueta antigua de colección. Se adjunta certificado expedido en 1971. Medidas: 12 cm (altura). Frasco de perfumería de cuerpo esférico, base casi plana, cuello corto con labio exvasado y bonita asa aplicada que une la parte superior del cuerpo con el borde de la boca. La tipología de esta pieza concentra las características precisas para su uso como perfumero de tocador femenino romano, es decir, base plana, cuerpo esférico, cuello corto y labio curvo. La superficie exterior presenta una agradable iridiscencia debida al largo tiempo que el vidrio ha pasado bajo tierra y en contacto directo con los minerales de la propia tierra. El vidrio empezó a utilizarse ampliamente a partir del siglo I d.C., tras el descubrimiento de la técnica del soplado hacia el 40 a.C. en la parte oriental de la costa mediterránea. Esta técnica supuso una gran revolución y se extendió rápidamente. El vidrio soplado ofrecía grandes ventajas sobre otros materiales, ya que no alteraba el sabor de los alimentos que contenía y era más impermeable que la terracota. Además, la técnica del soplado permitía fabricar piezas de formas y tamaños muy variados, y también producirlas con mayor rapidez. Por otra parte, las piezas de vidrio eran más fáciles de limpiar, por lo que pronto se convirtió en el material preferido para uso doméstico.

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