Null PERE PRUNA OCERANS (Barcelona, 1904 - 1977).

"Torero yacente", 1937.

Óleo…
Descripción

PERE PRUNA OCERANS (Barcelona, 1904 - 1977). "Torero yacente", 1937. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Parche en el reverso Con etiquetas de la Sala Parés y de la Galería Artur Ramon, Barcelona, en el reverso. Medidas: 70 x 115 cm; 92 x 135,5 cm (marco). Pere Pruna consigue transmitir la serena belleza del torero yacente utilizando una paleta de muy pocos colores pero dotándolos de una rica variedad tonal, al tiempo que maneja un trazo sintético que condensa la enigmática palpitación de un reposo que podría ser eterno. Luces sólidas construyen los rasgos, modelando suavemente el óvalo y la línea curva de los párpados cerrados. Las lentejuelas y joyas del traje centellean con matizados destellos plateados que se prolongan en la banda lateral de las largas piernas enfundadas en un estilete rojo. El rojo de los pantalones y el brillo del cuero negro de los zapatos interrumpen la rica gama de tonos plateados que domina la atmósfera lírica. Artista principalmente autodidacta, Pere Pruna completó su formación en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona. Tras empezar a exponer en Barcelona siendo aún muy joven, viajó a París en 1921, donde contó con la ayuda y la guía de Picasso. En la capital francesa celebró una exitosa exposición individual en la Galerie Percier, y entró en contacto con intelectuales como Cocteau, Drieu la Rochelle, Max Jacob y otros, con los que fundó la revista "Philosophie" en 1924. Serge Diaghilev, que visitó una de sus exposiciones, también le pidió que creara los decorados y el vestuario del ballet "Les matelots" en 1925. A partir de entonces, también trabajó en otras obras musicales, como "La vie de Polichinele" (1934) y "Oriane" (1938), entre otras. En 1928 obtuvo el segundo premio en la exposición del Carnegie Institute de Pittsburg y más tarde, a su regreso a Barcelona, ganó otros galardones como el concurso "Montserrat vista por artistas catalanes" (1931) y el Premio Nonell (1936). Este último estuvo rodeado de polémica, porque Pruna lo ganó por su óleo "El vi de Chios", para el que utilizó como modelo una fotografía publicada en una revista pornográfica parisina. Ante el revuelo causado, Pruna retiró el premio, pero el jurado mantuvo su decisión. Tras el estallido de la Guerra Civil, Pruna se instala en París y prosigue su actividad expositiva internacional, destacando la exposición organizada en Londres en 1937. Paralelamente trabajó para los servicios de propaganda de Ridruejo, con obras como el cartel conmemorativo de la promulgación de la Ley del Trabajo, y Eugenio d'Ors, Jefe Nacional de Bellas Artes, le presentó a la representación española en la Bienal de Venecia de 1938. Después de la guerra compaginó las exposiciones de pintura de caballete con la pintura mural, género en el que fue especialmente celebrada su obra en el Monasterio de Montserrat. En 1965 ganó el Premio Ciudad de Barcelona, y tres años más tarde fue nombrado académico del Far de Sant Cristòfor. Pere Pruna está representado actualmente en el Museo de Montserrat, donde hay un espacio con su nombre, el MACBA de Barcelona y el Museo Maricel de Sitges, entre otros.

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PERE PRUNA OCERANS (Barcelona, 1904 - 1977). "Torero yacente", 1937. Óleo sobre lienzo. Firmado en la esquina inferior derecha. Parche en el reverso Con etiquetas de la Sala Parés y de la Galería Artur Ramon, Barcelona, en el reverso. Medidas: 70 x 115 cm; 92 x 135,5 cm (marco). Pere Pruna consigue transmitir la serena belleza del torero yacente utilizando una paleta de muy pocos colores pero dotándolos de una rica variedad tonal, al tiempo que maneja un trazo sintético que condensa la enigmática palpitación de un reposo que podría ser eterno. Luces sólidas construyen los rasgos, modelando suavemente el óvalo y la línea curva de los párpados cerrados. Las lentejuelas y joyas del traje centellean con matizados destellos plateados que se prolongan en la banda lateral de las largas piernas enfundadas en un estilete rojo. El rojo de los pantalones y el brillo del cuero negro de los zapatos interrumpen la rica gama de tonos plateados que domina la atmósfera lírica. Artista principalmente autodidacta, Pere Pruna completó su formación en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona. Tras empezar a exponer en Barcelona siendo aún muy joven, viajó a París en 1921, donde contó con la ayuda y la guía de Picasso. En la capital francesa celebró una exitosa exposición individual en la Galerie Percier, y entró en contacto con intelectuales como Cocteau, Drieu la Rochelle, Max Jacob y otros, con los que fundó la revista "Philosophie" en 1924. Serge Diaghilev, que visitó una de sus exposiciones, también le pidió que creara los decorados y el vestuario del ballet "Les matelots" en 1925. A partir de entonces, también trabajó en otras obras musicales, como "La vie de Polichinele" (1934) y "Oriane" (1938), entre otras. En 1928 obtuvo el segundo premio en la exposición del Carnegie Institute de Pittsburg y más tarde, a su regreso a Barcelona, ganó otros galardones como el concurso "Montserrat vista por artistas catalanes" (1931) y el Premio Nonell (1936). Este último estuvo rodeado de polémica, porque Pruna lo ganó por su óleo "El vi de Chios", para el que utilizó como modelo una fotografía publicada en una revista pornográfica parisina. Ante el revuelo causado, Pruna retiró el premio, pero el jurado mantuvo su decisión. Tras el estallido de la Guerra Civil, Pruna se instala en París y prosigue su actividad expositiva internacional, destacando la exposición organizada en Londres en 1937. Paralelamente trabajó para los servicios de propaganda de Ridruejo, con obras como el cartel conmemorativo de la promulgación de la Ley del Trabajo, y Eugenio d'Ors, Jefe Nacional de Bellas Artes, le presentó a la representación española en la Bienal de Venecia de 1938. Después de la guerra compaginó las exposiciones de pintura de caballete con la pintura mural, género en el que fue especialmente celebrada su obra en el Monasterio de Montserrat. En 1965 ganó el Premio Ciudad de Barcelona, y tres años más tarde fue nombrado académico del Far de Sant Cristòfor. Pere Pruna está representado actualmente en el Museo de Montserrat, donde hay un espacio con su nombre, el MACBA de Barcelona y el Museo Maricel de Sitges, entre otros.

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