Null RAMON MARTÍ ALSINA (Barcelona, 1826 - 1894).

"Paisaje", 1891.

Óleo sobre …
Descripción

RAMON MARTÍ ALSINA (Barcelona, 1826 - 1894). "Paisaje", 1891. Óleo sobre tabla. Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 25 x 38 cm; 41 x 56 cm (marco). Considerado hoy como la figura más importante del realismo español, Martí Alsina se enmarca dentro de la vanguardia europea de la época. Revolucionó el panorama artístico español del siglo XIX, fue pionero del estudio naturalista y creador de la escuela catalana moderna, así como maestro de toda una generación, con discípulos de la talla de Vayreda, Urgell o Torrescassana. Comenzó sus estudios de Filosofía y Letras, alternándolos con clases nocturnas en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona hasta 1848. Finalizado este primer aprendizaje y decidido a dedicarse a la pintura, da sus primeros pasos en la comarca del Maresme, donde comienza a ganarse la vida realizando retratos naturalistas y paisajes "à plen air". En 1852 ingresó como profesor de dibujo lineal en la Escuela de la Lonja de Barcelona, y dos años más tarde comenzó a impartir clases de dibujo de figuras, puesto que ocupó hasta la subida al trono de Amadeo de Saboya. En 1853 viajó a París, donde visitó el Louvre y se familiarizó con la obra de Horace Vernet, Eugène Delacroix y el romanticismo francés. Más tarde conocería la obra de Gustave Courbet, máximo exponente del realismo. En 1859 fue nombrado académico correspondiente de la Academia de Bellas Artes de Sant Jordi de Barcelona. Su primera exposición importante fue la Exposición General de Bellas Artes de Barcelona en 1851. A partir de ese momento expuso regularmente en Barcelona, Madrid y París, y fue invitado a la Exposición Universal de la capital francesa en 1889. Entre sus premios destacan las medallas obtenidas en las Exposiciones Nacionales de Madrid, tercero en 1858 con la obra "Último día de Numancia" y segundo en 1860 con su paisaje. En sus últimos años vivió recluido, centrando sus esfuerzos en la búsqueda de nuevas formas de expresión, con una pincelada cercana al impresionismo. Entre sus temas encontramos numerosos paisajes y marinas, vistas urbanas (especialmente de Barcelona), retratos y figuras humanas, escenas de género, temperamentales desnudos femeninos, pintura de historia y escenas bíblicas. En pocas ocasiones se dedicó a los bodegones, aunque también pintó algunos. Se conservan obras de Martí Alsina en el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo de la Abadía de Montserrat y el Museo de l'Empordà, en Figueras.

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RAMON MARTÍ ALSINA (Barcelona, 1826 - 1894). "Paisaje", 1891. Óleo sobre tabla. Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho. Medidas: 25 x 38 cm; 41 x 56 cm (marco). Considerado hoy como la figura más importante del realismo español, Martí Alsina se enmarca dentro de la vanguardia europea de la época. Revolucionó el panorama artístico español del siglo XIX, fue pionero del estudio naturalista y creador de la escuela catalana moderna, así como maestro de toda una generación, con discípulos de la talla de Vayreda, Urgell o Torrescassana. Comenzó sus estudios de Filosofía y Letras, alternándolos con clases nocturnas en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona hasta 1848. Finalizado este primer aprendizaje y decidido a dedicarse a la pintura, da sus primeros pasos en la comarca del Maresme, donde comienza a ganarse la vida realizando retratos naturalistas y paisajes "à plen air". En 1852 ingresó como profesor de dibujo lineal en la Escuela de la Lonja de Barcelona, y dos años más tarde comenzó a impartir clases de dibujo de figuras, puesto que ocupó hasta la subida al trono de Amadeo de Saboya. En 1853 viajó a París, donde visitó el Louvre y se familiarizó con la obra de Horace Vernet, Eugène Delacroix y el romanticismo francés. Más tarde conocería la obra de Gustave Courbet, máximo exponente del realismo. En 1859 fue nombrado académico correspondiente de la Academia de Bellas Artes de Sant Jordi de Barcelona. Su primera exposición importante fue la Exposición General de Bellas Artes de Barcelona en 1851. A partir de ese momento expuso regularmente en Barcelona, Madrid y París, y fue invitado a la Exposición Universal de la capital francesa en 1889. Entre sus premios destacan las medallas obtenidas en las Exposiciones Nacionales de Madrid, tercero en 1858 con la obra "Último día de Numancia" y segundo en 1860 con su paisaje. En sus últimos años vivió recluido, centrando sus esfuerzos en la búsqueda de nuevas formas de expresión, con una pincelada cercana al impresionismo. Entre sus temas encontramos numerosos paisajes y marinas, vistas urbanas (especialmente de Barcelona), retratos y figuras humanas, escenas de género, temperamentales desnudos femeninos, pintura de historia y escenas bíblicas. En pocas ocasiones se dedicó a los bodegones, aunque también pintó algunos. Se conservan obras de Martí Alsina en el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza, el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo de la Abadía de Montserrat y el Museo de l'Empordà, en Figueras.

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