Null "Cibeles". Francia, finales del siglo XIX-principios del XX.

Galleta

Pres…
Descripción

"Cibeles". Francia, finales del siglo XIX-principios del XX. Galleta Presenta algunos desperfectos y ligeras rasgaduras. Medidas: 25 x 49 x 20 cm. La diosa Cibeles, la Gran Madre originaria de la mitología frigia y heredada por griegos y romanos, ha sido representada aquí en su carro, conducido por dos leones montados por tórtolos. Sigue los modelos estilísticos del neoclasicismo francés. La diosa, de rostro idealizado, empuña una antorcha y lleva un vestido corto, hábilmente drapeado. Un tercer amorcillo custodia uno de los laterales del carro. El grupo de galletas es dinámico y descriptivo, recreándose con la representación de texturas y calidades en cada uno de los detalles. Los leones encarnan, respectivamente, a Atalanta e Hipómenes. Cibeles era considerada la personificación de la tierra fértil, una diosa protectora de la naturaleza y los animales. En la mitología griega, dado que su figura ya estaba representada por otras divinidades, esta diosa tuvo que ser readaptada para integrarse en los mitos existentes, hasta el punto de que muchos autores la consideraban el mismo personaje que Rea, la madre de los dioses. Su equivalente romana era Magna Mater, la Gran Madre o Idaea mater ("Madre de Ida"). Su título de "Señora de los Animales", que también ostentaba la Diosa Madre minoica, revela sus raíces arcaicas paleolíticas.

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"Cibeles". Francia, finales del siglo XIX-principios del XX. Galleta Presenta algunos desperfectos y ligeras rasgaduras. Medidas: 25 x 49 x 20 cm. La diosa Cibeles, la Gran Madre originaria de la mitología frigia y heredada por griegos y romanos, ha sido representada aquí en su carro, conducido por dos leones montados por tórtolos. Sigue los modelos estilísticos del neoclasicismo francés. La diosa, de rostro idealizado, empuña una antorcha y lleva un vestido corto, hábilmente drapeado. Un tercer amorcillo custodia uno de los laterales del carro. El grupo de galletas es dinámico y descriptivo, recreándose con la representación de texturas y calidades en cada uno de los detalles. Los leones encarnan, respectivamente, a Atalanta e Hipómenes. Cibeles era considerada la personificación de la tierra fértil, una diosa protectora de la naturaleza y los animales. En la mitología griega, dado que su figura ya estaba representada por otras divinidades, esta diosa tuvo que ser readaptada para integrarse en los mitos existentes, hasta el punto de que muchos autores la consideraban el mismo personaje que Rea, la madre de los dioses. Su equivalente romana era Magna Mater, la Gran Madre o Idaea mater ("Madre de Ida"). Su título de "Señora de los Animales", que también ostentaba la Diosa Madre minoica, revela sus raíces arcaicas paleolíticas.

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