A MONUMENTAL AND IMPRESSIVE ITALIAN SCULPTED LIMESTONE GROUP OF BACCHUS WITH A SATYR, FIRST QUARTER 20TH CENTURY

El dios del vino representado desnudo y de pie, una copa en la mano derecha levantada, el sátiro niño a sus pies 250 cm. de altura. Sobre un zócalo de piedra caliza de sección rectangular con bordes superiores y base moldurados. 100 cm. de altura, 350 cm. de altura total. Parece que el escultor de este llamativo grupo de piedra caliza estuvo muy influido por el Baco de mármol de Miguel Ángel de 1496-7, en el que el maestro representaba al dios del vino en una postura tambaleante y ebria. La obra parece inspirarse en la descripción que hace Plinio el Viejo en su Historia Natural de una escultura de bronce perdida de Praxíteles, que representa a "Baco, la embriaguez y un sátiro". La sensación de precariedad resultante de un centro de gravedad elevado puede encontrarse en varias obras posteriores del artista, entre las que destaca el David En este lote, la representación de la inestabilidad del dios en estado de embriaguez está más acentuada, ya que su torso se arquea casi involuntariamente hacia la izquierda en un aparente intento exagerado de mantener el equilibrio. La embriaguez más evidente en el ejemplo actual se subraya aún más por las diferencias en el tratamiento de los ojos en relación con la copa. En el Baco de Miguel Ángel, el dios parece intentar concentrar la mirada en el cielo que tiene ante sí, y lo consigue; mientras que en el ejemplo que aquí se ofrece, los ojos se entrecierran, sugiriendo una visión borrosa, más asociada a la embriaguez avanzada que precede al colapso. Este Baco ha sido esculpido con una musculatura más pronunciada que el modelo más refinado y parecido a Antinoo del Museo Nacional del Bargello y, lo que es más importante, ha sido esculpido con vello púbico, mientras que el de Miguel Ángel no lo tenía. La representación del dios del vino como una figura más bárbara en este caso es, por tanto, casi con toda seguridad un diseño".