Fahr-el-Nissa ZEID (1901-1991)

Constelación Óleo sobre lienzo Firmado abajo a la derecha Refrendado al dorso 196 x 97 cm Procedencia Colección de Madame Ménard, amiga y vecina de Fahr-el-Nissa Zeid Colección particular Publicado por Adila Laïdi-hanieh autora del libro Fahrelnissa Zeid: Pintora de la palabra interior Información actualizada sobre la inclusión de Fahrelnissa Zeid en la exposición Présences Arabes en el MAM de París. 04.04.2024 Esta nueva exposición es una buena oportunidad para hacer justicia a generaciones de artistas que han sido olvidados en los mismos lugares donde sus prácticas han florecido o florecido, y una oportunidad para descubrir algunas obras y prácticas artísticas notables. Sin embargo, dado que esta exposición está estructurada en torno a los polos de las culturas/identidades árabes y las temporalidades y relaciones coloniales, Fahrelnissa Zeid (1901-1991), artista turca apolítica, no debería estar incluida, y menos en una presentación que carece de rigor. "Su país natal no fue colonizado, y menos aún por Francia. Fahrelnissa Zeid eligió venir a Francia en los años veinte como francófila, con su marido el escritor turco Melih Devrim, ambos en busca de educación e inspiración artística, y no como súbdita colonizada en una metrópoli colonial. Sus dos países árabes de adopción -Irak y luego Jordania- no fueron colonizados por Francia, por lo que resulta muy extraño que su obra se sitúe en la sección de "descolonización" de esta exposición. Y lo que es más importante, sus obras eran apolíticas. A diferencia de su hijo, el artista turco Nejad Devrim -que no está incluido en esta exposición-, evitó explícitamente -para bien o para mal- cualquier reivindicación o compromiso político en su práctica artística. A diferencia de muchos de sus contemporáneos turcos de antes de la guerra y de los demás artistas incluidos en esta exposición, tampoco le interesaban los problemas de desarrollar una práctica artística moderna como híbrido de tradiciones culturales determinadas. Pero si concedemos su presencia en esta exposición porque Fahrelnissa Zeid es árabe de adopción, y pasamos por alto su falta de estatus colonial y de compromiso político-cultural, lo que queda son algunos extraños errores y omisiones en los textos murales de presentación, así como algunas inquietantes valoraciones orientalistas. Orientalismo: los dos cuadros de Fahrelnissa Zeid se presentan bajo el trivial y sexista título de "cometa cosmopolita". ¿Qué puede decir esto sobre su práctica artística? Lo que se menciona se confirma en el texto siguiente, que repite apreciaciones orientalistas refutadas: "Sintetizando sus influencias bizantinas, europeas e islámicas, estas pinturas cautivan [...] una bóveda o una cúpula de mosaico". Uno casi esperaría leer las palabras 1001 Nuits & Arabesques al final de la frase. Tal apreciación sólo puede justificarse por una percepción de los orígenes de Fahrelnissa Zeid congelada en una proyección orientalista anacrónica, más que por un enfoque basado en hechos. Las propias palabras de Fahrelnissa Zeid dan fe de influencias, motivaciones e inspiraciones muy diferentes, como demuestro en mi biografía de la artista de 2017. Errores: En cuanto a los errores de hecho en otros textos sobre Fahrelnissa Zeid: Tras sus estudios de 1928 en París, se embarcó en una práctica figurativa vigorosamente expresionista, nunca fue una pintora cubista. Irak fue admitido en la Sociedad de Naciones en 1932 y fue miembro fundador de la ONU en 1945. Por ello, Irak no pudo acceder a la independencia en 1958. Fahrelnissa Zeid sólo estudió en París, en la Académie Ranson, no con Lhôte ni con Léger. Fahrelnissa Zeid no estudió en un "estudio StahlBlech". Omisiones : Además de estos errores y superficiales encuadres orientalistas, existen importantes omisiones sobre el conjunto de su carrera y su relación con París. Por ejemplo: el hecho de que fuera la primera mujer de cualquier nacionalidad en exponer en solitario en el ICA de Londres, o que fuera la primera artista de Oriente Próximo en exponer en una galería comercial de Nueva York, o sus vínculos con Malraux y Jacques Jaujard, o sus exposiciones en La Hune y en Katia Granoff, o la invención de sus singulares "paléokrystalos", o su práctica pionera de la abstracción como artista turca, o su difusión pionera de la abstracción en Jordania, etcétera. En conclusión, es decepcionante que todos los contemporáneos y camaradas de Fahrelnissa Zeid -miembro fundador de la Nouvelle Ecole de París- se hayan beneficiado ya de retrospectivas en museos parisinos, mientras que ella queda relegada en 2024 a la escombrera del mundo del arte.