Reinhold Begas

Reinhold Begas El Kaiser Guillermo I a caballo, guiado por la Alegoría de la Victoria Bronce, finamente cincelado, pátina marrón dorada. Marca de fundición redonda Gladenbeck. Alto 40, ancho aprox. 22, fondo aprox. 32 cm. Berlín, fundición Gladenbeck, hacia 1900. Se trata de una de las escasas reducciones del motivo ecuestre central del Monumento Nacional Kaiser Wilhelm. El escultor Reinhold Begas y el arquitecto Gustav Halmhuber erigieron el monumento de 21 metros de altura en el Schlossfreiheit de Berlín entre 1895 y 1897. Reinhold Begas nació en Schöneberg el 15 de julio de 1831. Hijo del pintor alemán Carl Joseph Begas, pertenecía a una dinastía de artistas de varias generaciones, por lo que entró en contacto con las bellas artes a una edad temprana. Sin embargo, a diferencia de su célebre padre, Reinhold Begas sintió desde el principio un mayor entusiasmo por la escultura, por lo que su formación básica no la recibió en el taller de su padre, sino con el escultor Ludwig Wilhelm Wichmann en Berlín. En 1846 comenzó sus estudios con Christian Daniel Rauch en la Academia de Arte de Berlín, que por aquel entonces tenía como director a Johann Gottfried Schadow, uno de los más grandes escultores de la historia del arte alemán. Reinhold Begas obtuvo su primer éxito con su grupo de yeso Agar e Ismael y pudo visitar Roma con una beca de 1856 a 1858. En la cosmopolita ciudad, rica en tradiciones y arte, conoció a personalidades artísticas como Arnold Böcklin, Heinrich Dreber y Anselm Feuerbach y creó su grupo de mármol Amor y Psique al estilo del escultor suizo Ferdinand Schlöth. Bajo la influencia de sus experiencias en Roma, sobre todo a través del estudio de las obras de Gian Lorenzo Bernini y Miguel Ángel, Reinhold Begas se inclinó por un estilo barroco que se oponía al estricto clasicismo aún imperante. En 1861 recibió una llamada de la aún joven Escuela de Arte Gran Ducal de Sajonia en Weimar, donde se reencontró con su conocido de Roma Böcklin como profesor y también conoció a Franz von Lenbach. Reinhold Begas ocupó su puesto de profesor hasta 1863 y luego regresó a Berlín. Aunque realizó varias estancias breves en Roma y París, el Berlín prusiano siguió siendo el hogar del artista, que se ganó el favor de los Hohenzollern con su patetismo inconfeso y recibió numerosos encargos prestigiosos del káiser Guillermo II. El Monumento Nacional al Kaiser Guillermo, inaugurado en 1897, fue diseñado por Reinhold Begas junto con Gustav Halmhuber en estilo neobarroco; sobrevivió a dos guerras mundiales, pero fue destruido en la RDA en 1950; sólo se conservaron tres figuras.