Descripción
Escuela historicista italiana de principios del siglo XX Retrato de mujer en estilo Quattrocento Busto de terracota Tamaño: 67,5 cm, sobre columna de madera ennegrecida Altura: 101,8 cm Obras relacionadas : -Andrea del Verrocchio, Mujer con flores, mármol, Florencia, Museo Nacional del Bargello, Inv. 115S ; -Giovanni Bastianini, Beatrice Portinari, yeso, Florencia, Galleria d'arte moderna; -Alceo Dossena, Virgen con el Niño dormido, primer cuarto del siglo XX, terracota, H. 38 cm, Pescia, Musei Civici. Bibliografía relacionada: -Anita Fiderer Moskowitz, Forging authencity, Bastianini and the Neo-Renaissance in Ninetheenth-century Florence, Arte e archeologia, studio e documenti, 32, Leo S. OlschkiEditore, 2013, cat. 31 y cat. 32 ; -Dario Del Bufalo, Marco Horak (eds.), Il falso nell'arte. Alceo Dossena e la scultura italianadel rinascimento, cat. exp. Mart, Museo di arte moderna e contemporanea di Trento e Rovereto, 3 octubre 2021 -9 enero 2022, Roma, L'Erma di Bretschneider, 2021, p. 163. A partir de la segunda mitad del siglo XIX, los artistas italianos comenzaron a celebrar las obras del Renacimiento mediante la imitación. Entre los más notables de estos artistas, conocidos como historicistas, figura Giovanni Bastianni (1830-1868), que utilizó los cánones del Quattrocento, sobre todo en sus bustos. Su objetivo no era engañar, sino satisfacer los deseos de una clientela adinerada a la que le gustaba rodearse tanto de originales como de reinterpretaciones. Este retrato de mujer ilustra perfectamente este gusto por una época dorada de la sociedad y la creación. Está pintado en el material preferido de la época, la terracota. Hábilmente modelado según los códigos del Renacimiento, este busto marca su originalidad y su pertenencia a una escuela neoflorentina por los brazos de la dama delicadamente cruzados sobre el vientre. Existen pocos ejemplos de este tipo de busto recortado, la mayoría acabados por debajo de los hombros, siendo el más llamativo e ilustre la Mujer con flores de Andrea del Verrochio, conservada en el Bargello de Florencia. Nuestra obra podría haber sido realizada por Alceo Dossena (1878-1937) o su entorno a principios del siglo XX. En efecto, el tratamiento de las manos, angulosas y alargadas, es muy similar al de algunas de sus esculturas de gran calidad, como la Virgen con el Niño dormido (H. 38 cm, terracota, Museo Civici di Pescia).
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Escuela historicista italiana de principios del siglo XX Retrato de mujer en estilo Quattrocento Busto de terracota Tamaño: 67,5 cm, sobre columna de madera ennegrecida Altura: 101,8 cm Obras relacionadas : -Andrea del Verrocchio, Mujer con flores, mármol, Florencia, Museo Nacional del Bargello, Inv. 115S ; -Giovanni Bastianini, Beatrice Portinari, yeso, Florencia, Galleria d'arte moderna; -Alceo Dossena, Virgen con el Niño dormido, primer cuarto del siglo XX, terracota, H. 38 cm, Pescia, Musei Civici. Bibliografía relacionada: -Anita Fiderer Moskowitz, Forging authencity, Bastianini and the Neo-Renaissance in Ninetheenth-century Florence, Arte e archeologia, studio e documenti, 32, Leo S. OlschkiEditore, 2013, cat. 31 y cat. 32 ; -Dario Del Bufalo, Marco Horak (eds.), Il falso nell'arte. Alceo Dossena e la scultura italianadel rinascimento, cat. exp. Mart, Museo di arte moderna e contemporanea di Trento e Rovereto, 3 octubre 2021 -9 enero 2022, Roma, L'Erma di Bretschneider, 2021, p. 163. A partir de la segunda mitad del siglo XIX, los artistas italianos comenzaron a celebrar las obras del Renacimiento mediante la imitación. Entre los más notables de estos artistas, conocidos como historicistas, figura Giovanni Bastianni (1830-1868), que utilizó los cánones del Quattrocento, sobre todo en sus bustos. Su objetivo no era engañar, sino satisfacer los deseos de una clientela adinerada a la que le gustaba rodearse tanto de originales como de reinterpretaciones. Este retrato de mujer ilustra perfectamente este gusto por una época dorada de la sociedad y la creación. Está pintado en el material preferido de la época, la terracota. Hábilmente modelado según los códigos del Renacimiento, este busto marca su originalidad y su pertenencia a una escuela neoflorentina por los brazos de la dama delicadamente cruzados sobre el vientre. Existen pocos ejemplos de este tipo de busto recortado, la mayoría acabados por debajo de los hombros, siendo el más llamativo e ilustre la Mujer con flores de Andrea del Verrochio, conservada en el Bargello de Florencia. Nuestra obra podría haber sido realizada por Alceo Dossena (1878-1937) o su entorno a principios del siglo XX. En efecto, el tratamiento de las manos, angulosas y alargadas, es muy similar al de algunas de sus esculturas de gran calidad, como la Virgen con el Niño dormido (H. 38 cm, terracota, Museo Civici di Pescia).
