Descripción
Buda de pie. Escuela Fang, norte de Tailandia. Siglo XVI. Bronce. Buen estado general. Falta la llama, dedos rotos en la mano derecha, grietas. Medidas: 56 cm x 16 cm x 12 cm. Se trata de una imagen extremadamente singular y finamente ejecutada de un Buda en bronce. De pie, trabajado en bulto redondo, adopta con una mano el Mudra Abbhaya, mostrando la mano derecha levantada, el brazo doblado y la palma hacia delante con los dedos hacia arriba a la altura del hombro, mientras que la mano izquierda cuelga del lado derecho del cuerpo erguido. Posa los pies descalzos sobre un trono escalonado en la parte inferior y con alusiones al loto en la parte del cojín. El gesto indica tranquilidad, seguridad, ausencia de miedo. Trae protección y bendición divina. En el budismo Theravada sólo se levanta la mano derecha. Las mismas propiedades del gesto se transmiten al rostro, también sereno y apacible. Destaca la sublimidad de los rasgos, así como los finos detalles que describen la túnica. Podemos identificar numerosos lakshana, símbolos iconográficos que identifican a los Budas. El primero que vemos es el peinado de moño, símbolo de la meditación, de la vida espiritual. Junto a los ojos semicerrados, el rostro sereno se completa con la sonrisa esbozada, símbolo del equilibrio y la serenidad de un ser perfecto. Los alargados lóbulos de las orejas aluden a los grandes pendientes que llevaban los miembros de las clases altas de la India contemporánea a Sakyamuni, y representan los conceptos de grandeza, nobleza y sabiduría.
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Buda de pie. Escuela Fang, norte de Tailandia. Siglo XVI. Bronce. Buen estado general. Falta la llama, dedos rotos en la mano derecha, grietas. Medidas: 56 cm x 16 cm x 12 cm. Se trata de una imagen extremadamente singular y finamente ejecutada de un Buda en bronce. De pie, trabajado en bulto redondo, adopta con una mano el Mudra Abbhaya, mostrando la mano derecha levantada, el brazo doblado y la palma hacia delante con los dedos hacia arriba a la altura del hombro, mientras que la mano izquierda cuelga del lado derecho del cuerpo erguido. Posa los pies descalzos sobre un trono escalonado en la parte inferior y con alusiones al loto en la parte del cojín. El gesto indica tranquilidad, seguridad, ausencia de miedo. Trae protección y bendición divina. En el budismo Theravada sólo se levanta la mano derecha. Las mismas propiedades del gesto se transmiten al rostro, también sereno y apacible. Destaca la sublimidad de los rasgos, así como los finos detalles que describen la túnica. Podemos identificar numerosos lakshana, símbolos iconográficos que identifican a los Budas. El primero que vemos es el peinado de moño, símbolo de la meditación, de la vida espiritual. Junto a los ojos semicerrados, el rostro sereno se completa con la sonrisa esbozada, símbolo del equilibrio y la serenidad de un ser perfecto. Los alargados lóbulos de las orejas aluden a los grandes pendientes que llevaban los miembros de las clases altas de la India contemporánea a Sakyamuni, y representan los conceptos de grandeza, nobleza y sabiduría.