George Rickey

George Rickey Tres líneas escalonadas 1990 Escultura cinética de acero inoxidable formada por 3 aspas móviles Altura de la suspensión con zócalo aprox. 120 cm. Longitud de las palas 64 cm cada una. Firmada, fechada y numerada 'Rickey 1990' en el zócalo. Ejemplar 2/3 - Con pequeños signos de envejecimiento. La presente obra está registrada en The George Rickey Estate, East Chatham. Procedencia Galería Maxwell Davidson, Nueva York (1990); Colección privada, Baviera George Rickey era un atento observador de la naturaleza. La estructura de un árbol joven, su ramificación y los movimientos silenciosos de sus ramas provocados por el viento fueron la inspiración y el punto de partida de sus primeras esculturas cinéticas de metal para el hijo de un ingeniero desde principios de la década de 1960. A partir de los conocimientos así adquiridos, Rickey diseñó formas básicas y estructuras elementales de líneas y superficies, que ensamblaba, siguiendo las leyes de la gravedad, en construcciones móviles aparentemente sencillas, pero en realidad muy complejas. "También para el artista cinético", escribió Rickey en 1970, "la naturaleza es omnipresente y le toca constantemente. [...] La naturaleza ha presentado el paisaje, la figura y la naturaleza muerta -así como la geometría, la luz y el espacio mediador- al ojo del artista [...]. No es en la imitación de la apariencia donde el arte cinético se sirve de la "naturaleza", sino en el reconocimiento de las regularidades, en la conciencia de las analogías y en la correspondencia con el amplio repertorio del movimiento en el espacio". (citado de Eberhard Roters, George Rickey, un retrato, en: Wieland Schmied, George Rickey, St. Gallen 1976, p. 11). La escultura que se ofrece, "Tres líneas escalonadas", pertenece al grupo de "Líneas y aspas" creadas desde 1961, en las que Rickey combinó y equilibró una, dos o tres agujas móviles. Como casi ningún otro grupo de obras, encarna la idea de un sistema de coordenadas en movimiento cuyas líneas forman constantemente nuevas constelaciones. Se crean así ante nuestros ojos imágenes en continuo cambio.