Escuela flamenca, siguiendo modelos de JAN VAN SCOREL; ca. 1600. "Retrato masculino. Óleo sobre lienzo pegado a tabla. Presenta repintes y restauraciones en la superficie pictórica. Medidas: 77 x 63 cm. Protagonizado por el retrato de un hombre, este retrato transmite en su concepción un mensaje que va más allá de la pura elevación personal. Envuelto en religiosidad, el protagonista adopta el gesto de bendecir con la mano derecha, mientras apoya la izquierda sobre una calavera. Se trata de un recurso muy habitual en la pintura de la época, utilizado para señalar la fugacidad de la vida y de las cosas materiales frente a la eternidad de un alma devota. El artista dota a la escena de una gran veracidad que se hace especialmente evidente en el rostro del protagonista, que muestra los signos de la edad de forma realista y detallada, huyendo del idealismo. Un personaje real de gran monumentalidad que ocupa un espacio sobrio pero definido gracias a la mesa y al bodegón del fondo compuesto por dos tazas. La obra termina con un detalle más, el escudo de armas del protagonista, símbolo de su linaje y posición social. La obra recuerda estéticamente a la pintura de Jan Van Scorel (1495 - 1562), pintor holandés que desempeñó un papel destacado en la introducción de aspectos de la pintura renacentista italiana en la pintura renacentista holandesa y flamenca. Fue uno de los primeros pintores de estilo romanista que pasó varios años en Italia, donde absorbió plenamente el estilo pictórico italiano. Su viaje a Italia coincidió con el breve reinado del único Papa holandés de la historia, Adriano VI, en 1522-1523. El Papa le nombró pintor de la corte y superintendente de su colección de antigüedades. Su estancia en Italia duró de 1518 a 1524 y también visitó Núremberg, Venecia y Jerusalén. El arte veneciano tuvo un impacto importante en el desarrollo de su estilo. Se diferenció de la mayoría de los romanistas en que era natural del norte de los Países Bajos y no de Flandes, y permaneció la mayor parte de su vida en el norte de los Países Bajos. En 1530 se instaló definitivamente en Utrecht y creó un gran taller siguiendo el modelo italiano. El taller produjo principalmente retablos, muchos de los cuales fueron destruidos por la iconoclasia de la Reforma en los años inmediatamente posteriores a su muerte. También ocupó cargos administrativos.