Modular bookcase. Italy, 1970s.

Librería modular. Italia, años 70. Madera laminada lacada en negro con perfiles y asas de metal cromado. Medidas: 225 x 106 x 44,5 cm . Librería modular de un solo cuerpo con tres niveles, diseñada por Willy Rizzo, fabricada en los años 70 en Italia, muy posiblemente por Mario Sabot Ediciones. En la parte inferior, dos puertas de apertura lateral con unos estantes interiores. En la parte superior, varios módulos, uno con una puerta de apertura lateral y dos con estantes. El diseñador y fotógrafo italiano se dio a conocer en los años 60 como cronista y creador de la jet-set. Aunque la fotografía fue el primer amor de Rizzo, en los años 70 desarrolló una segunda carrera de éxito como diseñador de muebles de lujo. En la década de 1940, Rizzo comenzó su carrera como fotoperiodista, trabajando para varias publicaciones francesas. Después de la Segunda Guerra Mundial, Rizzo cubrió los juicios de Nuremberg y viajó a Túnez para Point de Vue para fotografiar el conflicto del norte de África. Fue contratado por France Dimanche para retratar a los ricos y famosos en eventos como el Festival de Cine de Cannes. El encanto de Rizzo se ganó la confianza de la realeza, los dignatarios y las estrellas de cine, permitiéndole fotografiar a estos personajes públicos en momentos naturales. En 1947, Rizzo viajó a Nueva York con la agencia Black Star para fotografiar a las estrellas estadounidenses. A su regreso a París, comenzó a trabajar para Paris Match, como fotógrafo jefe. En 1959, se convirtió en director artístico de Marie Claire y colaboró con otras revistas de moda, como Vogue. A lo largo de su carrera, Rizzo fotografió a decenas de estrellas. En 1968 se trasladó a Roma. Fue aquí donde Rizzo empezó a trabajar en el diseño de muebles, empezando por su recién alquilado y destartalado piso romano. Para uso personal (al principio), Rizzo creó una serie de piezas únicas inspiradas en iconos modernistas como Mies van der Rohe y Le Corbusier. Pero al igual que sus brillantes amigos -Rodolfo Parisi, Gigli Rizzi, Franco Rapetti, Salvador Dalí, Brigitte Bardot y otros admiradores de su obra-, Rizzo se vio inundado de encargos de diseño y creó una empresa. En 1978, Rizzo vendió su empresa y volvió a la fotografía.