JOSEP CLARÀ I AYATS (Olot, Girona, 1878 - Barcelona, 1958)._x000D_ "El somriure" (Retrato de la bailarina Isabel Rodríguez), 1914._x000D_ Yeso._x000D_ Marca de Godard Pere Fondeur, París._x000D_ Firmado._x000D_ Copia en bronce publicada en "Josep Clarà, els anys de París, 1900-1931. L'ànima vibrant", con textos de Eva Vázquez, Mercè Doñate, Lluís Muntada, Mariàngela Villalonga y Manuel Loosveldt._x000D_ Tamaño: 35 x 24 x 26 cm._x000D_ Josep Clarà comenzó su formación en la Escuela de Dibujo de Olot con Josep Berga i Boix, y posteriormente estudió escultura en la Escuela de Bellas Artes de Toulouse, Francia. Tras completar sus estudios, se trasladó a París en 1890, donde trabajó en el estudio de Louis Barrias y conoció a Maillol, Bourdelle y Rodin. De hecho, los consejos de Rodin le ayudaron a superar las influencias modernistas de sus primeras obras. En 1907 presentó "Tormento" en el Salón de los Artistas Franceses, una obra que muestra una influencia rodiniana que en su mármol "Crepúsculo" (1913, Museo de Santiago de Chile), cuyo modelo de yeso presentó en el Salón de la Sociedad Nacional en 1908, se diluye en favor de una mayor claridad y serenidad. Al año siguiente presentó la que sería la primera de sus diosas, obra que supuso finalmente el reconocimiento oficial definitivo de su talento. Durante estos años, su amistad con la bailarina Isadora Duncan le permitió realizar sus dibujos más originales y espontáneos; el dinamismo de la danza no se oponía a su búsqueda de estabilidad y le proporcionaba una luz y una vivacidad serenas. Trabajador incansable, recibió varios encargos de monumentos, como "Serenidad sobre las ruinas de la vida" (Cementerio de San Isidro, Madrid) y "Monumento a los voluntarios catalanes" (Parque de la Ciutadella, Barcelona). Con el modelo de este último ganó el Gran Premio de París en 1925. A finales de ese mismo año fue nombrado miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Clarà también realizó cabezas y retratos, en los que hizo gala de un lenguaje condensado y vivo: "Voluntad" (1911), "Clara Stuart Merrill" (1926), "Adela" (1936), "Señorita Rodríguez Bauzà" (1941). Con el paso del tiempo, el escultor fue dando cada vez más importancia a la luz, y sus esculturas se fueron simplificando, liberándose de todo sentimiento, como puede verse en su primera "Estática" de 1926. Con esta nueva visión, en 1928 reinterpretó "Diosa" y "Serenidad" (jardín de Montjuic, Barcelona), y creó "Reposo" (MACBA), que le valió la medalla de honor en la Exposición Internacional de Barcelona (1929). En 1930 Clarà viaja a Grecia; dos años después deja su residencia en París y se instala definitivamente en Barcelona. En 1934 gana el premio Damià Campeny por "Desnudo de muchacha". En 1936 creó una de sus mejores obras, por su síntesis de sencillez, luz y serenidad: "Pujanza". También es autor del "Monumento a los caídos" (1952) en Barcelona). Con el desnudo "Pomona" (Museo de La Habana) obtuvo el Gran Premio de la Bienal Hispanoamericana de 1954. En 1946 realizó un "San Benito" (Montserrat) que le condujo hacia el estudio de la figura sentada. Así, sus últimas obras fueron principalmente maternidades sentadas y figuras reclinadas. En 1969 se inauguró en Barcelona el museo que lleva su nombre, donde se conserva gran parte de su obra. Su obra también se encuentra en el Museu Comarcal de la Garrotxa de Olot y en el Museu Nacional d'Art de Catalunya, entre otros.