Rara parte de una vajilla de porcelana del servicio del Kaiser Guillermo II, compuesta por 12 platos llanos, 6 platos hondos y un plato ovalado, con bordes contorneados de forma "Neuozier", decorados en rojo hierro y oro con grupos de flores que rodean en el centro en una cartela coronada de rocaille el águila prusiana centrada con el monograma FR. Buen estado, ligero desgaste del oro. Fabricación KPM, Berlín, 1892-1909. Marcas en el reverso con la figura del kaiser en azul en la cubierta, marcas de la fabricación con un sello rojo en la cubierta y el cetro azul bajo la cubierta, marcas de los pintores y años marcados en azul. P_24,5 y 22,5 cm Plato: An_39 cm Procedencia: este servicio fue encargado a la manufactura de porcelana de Berlín por el Kaiser Guillermo II (1888-1918) para ser utilizado en las comidas de estado "estándar", destinadas a ser utilizadas en todas las residencias reales en lugar de ser específicas para una habitación o Palacio en particular. Se diseñó siguiendo la tradición de la grand rocaille para complementar los dos grandes servicios que la precedieron: el encargado por el emperador Federico II a finales de la década de 1870, que también se basó en un servicio entregado al rey Federico el Grande en 1781-1783. Las formas básicas moldeadas, conocidas como Neuozier, eran las "nuevas" formas de cestería estriada rococó desarrolladas en el siglo XVIII para revivir y reelaborar las "antiguas" formas (Altozier). El servicio realizado para Federico el Grande estaba decorado con la misma paleta de rojo hierro y oro que el servicio actual, pero con escenas heroicas y míticas. Reproducir esta decoración habría sido una tarea realmente gigantesca cuando se estaba produciendo un servicio de banquetes de esta envergadura, destinado a extenderse por los palacios reales. En su lugar, las cartelas centrales recibieron el monograma FR pintado en oro sobre el águila prusiana. El diseño en sí se hizo popular y la fábrica vendió una variante sin la cartela central. También es interesante señalar que el rey de Italia encargó un servicio similar, adaptado a las armas de Saboya en las cartelas centrales. Una parte de este servicio, que aún se encuentra en posesión de la familia en Huis Doorn, se expuso en el Deutches Historisches Museum de Berlín y se ilustra en "Der Letzte Kaiser Wilhelm II. Im Exil", catálogo de la exposición, Múnich, 1991, p. 173, nº 23.