1987 MERCEDES 560 SL

Bonita presentación Bajo kilometraje Más de 25.000 euros en facturas recientes Documento de registro belga Número de chasis WDBBA48D5HA068979 Tercera generación del Mercedes SL presentado en 1971, el R107 disfrutará de una larga carrera de 18 años. Este roadster fue muy admirado por los estadounidenses, que absorbieron por sí solos dos tercios de su producción. En 1986, Mercedes entregó su última evolución: el 560 SL, reservado a los mercados norteamericano, japonés y australiano. Bajo el capó había un V8 de 5,5 litros que desarrollaba 230 CV en la versión americana, combinado con una caja de cambios automática. Esta última serie se beneficiará de un alto nivel de equipamiento de serie que incluye tapicería de cuero, sistema de alarma, airbags y ABS. El coche también tiene una nueva suspensión trasera y un diferencial de deslizamiento limitado. Para el mercado norteamericano, el 560 SL tiene que cumplir normas específicas. Por ello, se equipó con faros redondos dobles, una tercera luz de freno central y parachoques de absorción de energía. El coche se dejó de fabricar en 1989 con 49.347 unidades. Fabricado el 21 de abril de 1987, este Mercedes 560 SL, que el día de nuestra visita tenía casi 102.000 millas en el odómetro (aproximadamente 163.000 km, kilometraje original confirmado por el Carfax), fue entregado nuevo en California en septiembre de ese mismo año a una tal Carmen Meléndez. Fue importado a Europa en 2015 desde Estados Unidos por su actual propietario, que vive en Bélgica. Tiene una combinación de colores sobria y elegante. Su carrocería azul oscuro (pintura original) se combina con una capota de lona azul, y el conjunto se encuentra en un bello estado de conservación. El interior cuenta con una tapicería de cuero gris con ribetes azules, que ha sido rehecha recientemente. La carpintería del salpicadero y las alfombras también están en buen estado. En carretera, el manejo es el esperado. El par motor V8 se revoluciona bien y la transmisión automática cambia con suavidad. Si se pisa el acelerador, el kick-down entra en acción y el Mercedes rebota. Desde su compra, el actual propietario se ha gastado mucho en poner el coche a su gusto (cambiando las llantas por las de la generación anterior, colocando una radio GPS e instalando un volante Moto-Lita con aro de madera) y en corregir pequeños defectos insignificantes. Nuestro entusiasta, muy quisquilloso, gastó más de 25.000 euros para poner el coche al nivel que quería. Los 560 SL en muy buen estado de funcionamiento son raros en el mercado. Y aunque este coche tiene algunos pequeños defectos de carrocería inherentes a un coche construido hace más de 30 años, hará las delicias de los que buscan un R107 impulsado por este legendario V8 listo para salir a la carretera. Tenga en cuenta que el coche se vende con su techo duro original.