ÉCOLE ITALIENNE DU XVE SIÈCLE SUIVEUR DE LÉONARD DE VINCI

Salomé con la cabeza de San Juan Bautista Óleo sobre tabla 84,4 x 92,9 cm El cuadro representa un tema bíblico de los Evangelios de Mateo y Marcos: durante las celebraciones de cumpleaños de su suegro Herodes, la bella y joven princesa Salomé baila para él, fascinando a todos los asistentes al rico banquete. Para recompensar a la muchacha, Herodes promete darle todo lo que quiera y Salomé, instada por su madre Herodías, exige la cabeza de Juan el Bautista, que había condenado enérgicamente el comportamiento de Herodías y su amante. En ese momento, Juan es decapitado y Salomé ofrece su cabeza a su madre en una bandeja. Salomé aparece aquí de pie, de tres cuartos, señalando con su mano derecha un plato sobre la mesa. Detrás de ella, un verdugo coloca la cabeza del Bautista en el plato; a la derecha de la composición se sitúa una tercera figura femenina con un turbante ricamente enjoyado, probablemente Herodías. El tema de Salomé con la cabeza de San Juan Bautista estaba muy extendido en el círculo lombardo de Leonardo (1452-1519) a principios del siglo XVI, y puede estar relacionado con la presencia en Milán de los Caballeros del Hospital de San Juan de Jerusalén: de 1503 a 1513, el Gran Maestre de los Hospitalarios fue Emery d'Amboise (1434-1512), y se sabe que Leonardo se alojó en el castillo de Amboise en los últimos años de su vida. Además, entre 1507 y 1510, uno de los mejores alumnos de Leonardo, Andrea Solario (1460-1524), trabajó para Georges d'Amboise (1460-1510), hermano de Emery. La cabeza de Salomé, peligroso icono de la seducción femenina según la tradición cristiana, parece estar influenciada por un famoso cuadro de Leonardo, la Scapigliata (Parma, Galleria Nazionale) y el cuadro muestra también los logros técnicos de Leonardo, como los colores brillantes apagados, la pintura en claroscuro y el sfumato. La piel y las joyas de la princesa aparecen brillantes sobre el fondo oscuro, que también recuerda la influencia flamenca.