Descripción
Charles Lapicque (francés, 1898-1988) Rendez à César, 1958 Lienzo. Altura 116, anchura 89 cm. Procedencia: Colección Alain y Violette Merle. Bibliografía: Philippe Bouchet, "Charles Lapicque, Le Dérangeur", éd. Thalia, 2009, fotografía de Charles Lapicque delante de la obra p.151. Orgulloso de este cuadro ante el que posa para un objetivo fotográfico, el artista trata este tema en otros dos cuadros conservados en el Museo de Bellas Artes de Dijon (DG 370) y en el Centro Pompidou de París (AM 1977-634). Enfrentamiento entre la Roma imperial, con el carro del triunfo del César, y la Roma cristiana, ilustrada por un Cristo "pantocrátor" bizantino con nimbo de crucifixión, "Rendez à César" es la superposición metafísica de colores explosivos. Si Lapicque afirma aquí que el reino de Dios no es terrenal, su cuadro es el testimonio de un movimiento del corazón del pintor hacia los artistas que le precedieron, testigos de mundos desaparecidos y anunciadores de la Jerusalén celestial.
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Charles Lapicque (francés, 1898-1988) Rendez à César, 1958 Lienzo. Altura 116, anchura 89 cm. Procedencia: Colección Alain y Violette Merle. Bibliografía: Philippe Bouchet, "Charles Lapicque, Le Dérangeur", éd. Thalia, 2009, fotografía de Charles Lapicque delante de la obra p.151. Orgulloso de este cuadro ante el que posa para un objetivo fotográfico, el artista trata este tema en otros dos cuadros conservados en el Museo de Bellas Artes de Dijon (DG 370) y en el Centro Pompidou de París (AM 1977-634). Enfrentamiento entre la Roma imperial, con el carro del triunfo del César, y la Roma cristiana, ilustrada por un Cristo "pantocrátor" bizantino con nimbo de crucifixión, "Rendez à César" es la superposición metafísica de colores explosivos. Si Lapicque afirma aquí que el reino de Dios no es terrenal, su cuadro es el testimonio de un movimiento del corazón del pintor hacia los artistas que le precedieron, testigos de mundos desaparecidos y anunciadores de la Jerusalén celestial.
