Miquel BARCELO (1957)

Miquel BARCELO (1957) Esparrecs. Acrílico sobre lienzo firmado, fechado "86" y titulado en el reverso del lienzo. 130 x 195 cm. Ligeros saltos en los bordes, ligeros arañazos. Se entregará al futuro comprador un certificado en foto de la obra indicando "Hecho por mi mano en Barcelona en 1986, Barcelo". Miquel Barceló es un artista eminentemente singular. Describiéndose a sí mismo como un "pintor de la materia", lleva desarrollando una obra ecléctica desde los años 70, combinando con energía el arte y la alegría. En la década de 1980, cuando su reputación adquirió una dimensión internacional -expuso en los museos y galerías más importantes-, Miquel Barceló emprendió una serie de pinturas "culinarias". Nuestro cuadro, Esparrecs ("espárragos" en catalán), forma parte de este linaje gastronómico, al igual que La gran cena española (1985), cuadro adquirido por el Museo Reina Sofía de Madrid. En esta composición aérea y dinámica, la armonía de los azules, los verdes y los amarillos permite percibir claramente un manojo de espárragos, mientras que otros sólo se esbozan con un gesto. La materia pictórica varía entre finas capas translúcidas y generosos empastes. En definitiva, más que los espárragos, lo que está en juego es la pintura, a la que Barceló rinde homenaje. Porque, como conocedor de los clásicos, el artista entabla aquí un tenue diálogo con la historia del arte. Uno piensa tanto en el Bodegón con espárragos (1697) de Adriaen Coorte, conservado en el Rijksmuseum, como en el cuadro L'Asperge (1880) de Édouard Manet, expuesto en el Museo de Orsay. Este diálogo sitúa a Barceló en una ilustre estirpe de grandes maestros que, en cierto modo, trasciende al explorar los límites de la pintura. Revelando el talento pictórico de Miquel Barceló, el artista español más influyente de la escena contemporánea, el cuadro de Esparrecs combina las ventajas de un valor seguro en el mercado del arte y un alegre manifiesto.