HENRI MICHAUX (1899-1984)

Sin título Tinta sobre papel, con monograma abajo a la derecha Tinta sobre papel, con monograma abajo a la derecha 119 x 141 cm 47 ¼ x 55 33/64 in. Esta obra se incluirá en el catálogo razonado que están preparando Micheline Phankim, Rainer Michael Mason y Franck Leibovici. PROVENZA Regalado por el artista al compositor y director de orquesta Maurice Le Roux y conservado en su familia desde OTROS Un detalle de esta obra ilustra la portada de la serie ORTF Inédits de 1974 de Maurice Le Roux, en la que el compositor puso música a poemas de Henri Michaux. La obra completa ilustra la reedición de este disco, en 1984. De origen belga, Henri Michaux es un escritor, poeta y pintor francés. Nacido en Namur en 1899, creció en Bruselas, pero a principios de los años 20 decidió abandonar su país natal para instalarse en París. Poco a poco, se fue distanciando de sus orígenes belgas y finalmente se nacionalizó francés en 1955. Aunque comenzó su carrera escribiendo, sobre todo participando activamente en la revista de vanguardia Le Disque vert de Bruselas, pero también formando parte del comité de redacción de la revista Hermès de París, se pasó a la pintura en 1925 y desarrolló una importante producción gráfica. Utilizó acuarela, lápiz, gouache y tinta. Desde muy joven, el artista mostró su fascinación por la medicina y, a falta de una carrera en este campo, desarrolló su interés, en particular por el psicoanálisis, a través de sus producciones pictóricas y literarias. A partir de los años 50, Henri Michaux se dedicó a nuevos experimentos y alteró deliberadamente su estado de conciencia tomando mescalina, una planta alucinógena originaria de México. Las obras resultantes son como danzas pictóricas que ilustran ideas, emociones o incluso los inicios de la mente. Las formas que aparecen en el lienzo no son fijas, no podemos discernir si están a punto de desaparecer o si son Las formas que aparecen en el lienzo no son fijas, no podemos discernir si están a punto de desaparecer o si acaban de nacer, son la imagen de nuestra mente, de su constante reorganización y movimiento. De este modo, las obras que crea nunca son productos acabados, sino más bien destellos de su búsqueda de movimiento. Él mismo explica: "Quería dibujar la conciencia de la existencia y el flujo del tiempo. Igual que uno siente su pulso". Desde sus primeros años, Henri Michaux se interesó por la música, y en cada uno de sus viajes trataba de sumergirse en los estilos musicales tradicionales de los países que visitaba. Como hizo con otras de sus creaciones, Henri Michaux probó a escuchar música bajo la influencia alucinante de la mescalina, intentando estudiar los efectos de la escucha de las drogas. Aunque muchos compositores intentaron poner música a sus poemas y escritos, fue Maurice Le Roux (1923-1992) quien lo intentó con más éxito, especialmente cuando compuso Au Pays de la Magie, seis poemas de Henri Michaux, para soprano y piano entre 1951 y 1953. Compositor de vanguardia y ferviente defensor de la música contemporánea, Maurice Le Roux fue también un reconocido director de orquesta. Amigo de Georges Pompidou, Olivier Guichard y Henri Michaux, fue condecorado con la Légion d'honneur y formó parte del jurado del Festival de Cannes. La obra que presentamos hoy fue adquirida por Maurice Le Roux a Henri Michaux directamente en su taller. Es excepcional, tanto por su procedencia como por sus raras dimensiones y cualidades estéticas. Tiene una composición especialmente elaborada, densa en algunas partes, aireada en otras con toques que a veces parecen escaparse. Esta obra también se utilizó como ilustración para la portada del disco de vinilo de 33 rpm de la interpretación de Le Roux de Au Pays de la Magie, seis poemas de Henri Michaux, para soprano y piano por la ORTF en 1974. También se utiliza como ilustración para la reedición de 1984, donde aparece al revés.