Null Escuela valenciana del siglo XVI.

"San Bartolomé amamantado por una cierva…
Descripción

Escuela valenciana del siglo XVI. "San Bartolomé amamantado por una cierva". Óleo o temple sobre tabla. La colección Arias Jáuregui, a la que pertenece esta obra, contaba con un importante número de obras de esta época y escuela, como lo demuestra un importante retablo que donó al Museo de Bilbao en 1934. Tamaño: 60 x 41,5 cm. Se trata de una tabla valenciana que representa a San Bartolomé como niño amamantado por una cierva. Desde el punto de vista iconográfico, la escena tiene sus raíces en la tradición escrita, con manuscritos flamencos como el de la colección de la Biblioteca Real de Bruselas, en el que se describe a San Bartolomé como un príncipe sirio. Sus padres, incapaces de concebir un hijo, imploran la intercesión divina, prometiendo ofrecer a su futuro hijo al servicio de Dios. Cuando la madre se queda embarazada, tiene una premonición de lo poderoso que será su hijo, por lo que el diablo, celoso, secuestra al recién nacido nada más nacer. Luego lo abandona en la cima de una montaña nevada, donde una cierva lo alimenta con su propia leche, salvando milagrosamente su vida. Este tema tuvo una gran repercusión en Cataluña, como puede verse en el retablo de San Bartolomé que se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, cuya tabla superior está dedicada al tema de San Bartolomé y la Cierva.

Escuela valenciana del siglo XVI. "San Bartolomé amamantado por una cierva". Óleo o temple sobre tabla. La colección Arias Jáuregui, a la que pertenece esta obra, contaba con un importante número de obras de esta época y escuela, como lo demuestra un importante retablo que donó al Museo de Bilbao en 1934. Tamaño: 60 x 41,5 cm. Se trata de una tabla valenciana que representa a San Bartolomé como niño amamantado por una cierva. Desde el punto de vista iconográfico, la escena tiene sus raíces en la tradición escrita, con manuscritos flamencos como el de la colección de la Biblioteca Real de Bruselas, en el que se describe a San Bartolomé como un príncipe sirio. Sus padres, incapaces de concebir un hijo, imploran la intercesión divina, prometiendo ofrecer a su futuro hijo al servicio de Dios. Cuando la madre se queda embarazada, tiene una premonición de lo poderoso que será su hijo, por lo que el diablo, celoso, secuestra al recién nacido nada más nacer. Luego lo abandona en la cima de una montaña nevada, donde una cierva lo alimenta con su propia leche, salvando milagrosamente su vida. Este tema tuvo una gran repercusión en Cataluña, como puede verse en el retablo de San Bartolomé que se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, cuya tabla superior está dedicada al tema de San Bartolomé y la Cierva.

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