Spanish or Italian school; 17th century.

Escuela española o italiana; siglo XVII. "Coronación de la Virgen" Óleo sobre lienzo. Refinado Presenta restauraciones. Medidas: 40,5 x 55,5 cm. Esta obra sigue una composición clásica en este tipo de representaciones, con la imagen dividida en un plano terrenal y otro celestial. Con las tres figuras principales del mismo tamaño, situadas en la zona superior, y siguiendo una estructura triangular. La Virgen en el centro está siendo coronada, con Jesús el Hijo y Dios el Padre sosteniendo la corona, flanqueando a la Virgen, y dándole el papel de madre de la cristiandad. María está colocada haciendo una genuflexión, con el rostro ligeramente vuelto hacia el suelo y los párpados bajados en actitud reflexiva. Es muy interesante que en la obra no aparezca la paloma, representación del Espíritu Santo, elemento iconográfico fundamental en estas representaciones. La escena se completa con un grupo de ángeles músicos y serafines, que se disponen a los lados de la coronación, en forma de friso, lo que indica que se trataría de una procesión, celebrando la gloria de la Virgen. En la zona inferior, la parte terrenal, un paisaje, que se abre en el centro a un lago, es el elemento principal de la imagen. Aunque no hay presencia humana, se ven pequeños ángeles que interactúan entre sí y recogen flores blancas, típicas del simbolismo de la Virgen. El tema de la coronación de la Virgen fue relatado en el siglo II por San Melitón, obispo de Sardis, y posteriormente difundido por Gregorio de Tours y Santiago de Vorágine, que lo recogió en su famosa leyenda Aurea. La Coronación de la Virgen es también objeto de devoción en toda la cristiandad. Más allá del arte, la Coronación es un motivo central en las procesiones marianas de todo el mundo.