Objetos surrealistas Objeto perturbado Montaña pelada - Erupción 1902 H : 15,5 cm Charles Ratton, sobre todo anticuario y experto en Artes Primitivas, presentó en 1936, a propuesta de André Breton, una acumulación surrealista de objetos fundidos tras la erupción del monte Pelee en Martinica en 1902, "objetos perturbados" como los llamaba el artista. Los objetos se clasifican de la siguiente manera: naturales/naturales interpretados/naturales incorporados/perturbados/encontrados/interpretados/americanos/océanicos/matemáticos/preparados y preparados ayudados/surrealistas. Esta exposición, importante en la historia del primitivismo, sitúa los objetos etnográficos junto a los objetos creados por los artistas surrealistas, convirtiéndose así, según Sophie Leclerc, "en objetos vinculados por analogía a los objetos surrealistas, combinados con ellos con fines subversivos, y finalmente apropiados para convertirse en "objetos surrealistas de pleno derecho", permitiendo así a los surrealistas afirmar su interés formal y simbólico por el primitivismo". Conservado en su caja de madera original y con la etiqueta con su nombre, el "objeto perturbado" que presentamos fue probablemente exhibido en esta exposición. Objetos surrealistas Fiel al principio de su estética, ilustrado por la frase de Lautréamont: "Hermoso como el encuentro fortuito de un paraguas y una máquina de coser en una mesa de disección", el objeto surrealista es el resultado del collage de los objetos más inesperados, resultado del encuentro de dos realidades diferentes en un plano que no les conviene. El efecto que se busca es siempre la sorpresa, el asombro, la desorientación, como la que provoca la irrupción de los sueños en la realidad. La asociación de objetos se realiza en nombre de la asociación libre de palabras o ideas que, según Freud, domina la actividad inconsciente y, en particular, la actividad onírica. Ya en 1924, André Breton, en su Introducción al Discurso sobre la Pequeña Realidad, proponía fabricar "ciertos objetos a los que sólo se puede acceder en un sueño". Los surrealistas, artistas y escritores, se dedicarán con pasión a esta práctica. El objeto surrealista es un doble de la imagen surrealista, esta vez en tres dimensiones. Su autor asocia los elementos más heterogéneos de forma insólita y provocadora para provocar el choque de la sorpresa y transportar al espectador a un mundo de ensueño. Así, en la exposición de Charles Ratton de 1936, Breton informa en un breve artículo que sirve de catálogo: "Hay objetos naturales -minerales (cristales que encierran agua fósil), plantas (plantas carnívoras), animales (oepyornix huevo de oso hormiguero) - objetos naturales interpretados (mono en helechos) o incorporados en conjuntos - objetos perturbados (modificados por agentes naturales como el fuego o el terremoto, objetos encontrados, expuestos tal cual o interpretados - objetos matemáticos descubiertos en el Instituto Poincaré por Ernst y fotografiados por Man Ray - objetos salvajes (fetiches y máscaras) y finalmente objetos surrealistas propiamente dichos. " Breton añade: "La concepción surrealista del objeto da paso a la creación del objeto surrealista, tal como acaba de definirlo Dalí, quien, por su parte, ofrece bajo esta etiqueta su Chaqueta Afrodisíaca cubierta de vasos llenos de licor. Los tres objetos que nos complace presentarles son la síntesis de la definición del "objeto surrealista" tal y como lo concibió André Breton. Aunque no se pueden identificar formalmente en las imágenes que nos han llegado de la exposición de Charles Ratton en 1936, su historia su interés histórico no es menos inconfundible.