Figura de bronce dorado "Tara", Nepal, s.XIX La deidad se dispone en postura estática frontal, dibujando un suave contrapposto gracias a la posición inclinada de las caderas y la flexión/extensión de los brazos, dibujando una línea sinuosa que rompe la verticalidad de la composición. El rostro es amable, con expresión serena. La diosa "Tara", suprema salvadora budista, otorga su bendición con su mano izquierda extendida, y la derecha, alzada y flexionada. Viste un largo dothi atado a la cintura, dejando el pecho desnudo pero adornado con finas joyas. Del hombro pende una larga cinta sobre la que se dispone, a la altura del codo, una gran rama de loto en flor. El pelo se recoge por completo en un alto moño, coronado por una diadema de puntas, ornamentada y flanqueada por dos grandes pendientes que adornan las largas orejas. En el budismo Vajrayana, Tara se presenta a menudo como la contraparte espiritual de Avalokiteshvara y representa el cometido de protectora compasiva. Aparece en muchas formas, de las cuales Sitatara (Tara Blanca) con un loto (padma), fue la más popular. Altura: 24,5 cm Peso: 907 g